Solo seis de la treintena de sociedades del Grupo Pitma cuentan con comité de empresa

El Grupo Pitma, que ha saltado a la primera línea mediática tras desembarcar en el Racing de Santander, es un gigante empresarial en Cantabria con cerca de 3.000 empleados que abarca todo tipo de actividades y servicios, desde el suministro de energía hasta la venta de teléfonos móviles, pasando por sistemas de seguridad o gestión de sanciones de tráfico.

Nostel Comunicaciones, Tiendas Conexión, Instalaciones Martínez Díez, Tower Valley, Disaldro Energy... y así hasta un total de 34 sociedades penden como mínimo de este gigante que encabezan los empresarios torrelaveguenses Alfredo Pérez y Pedro Ortiz. Y solo seis de todas estas empresas cuentan con comité o delegación sindical, según consta en la documentación solicitada por eldiario.es ante la Dirección General de Trabajo.

Para CCOO, “estos datos sacan a relucir la situación de acoso y derribo contra todos los trabajadores y trabajadoras que se integran en el Grupo Pitma y que quieren organizarse y constituir un proceso de elecciones sindicales para defender los derechos de la plantilla”. 

La secretaria de Acción Sindical, Laura Lombilla, reconoce que en las pequeñas y medianas empresas es “más costoso” iniciar un proceso sindical, pero subraya que “el caso del Grupo Pitma la situación es sangrante porque son empresas con muchos trabajadores”. “Lo habitual en sociedades con tanta plantilla es que no haya problema porque los empresarios tienen asumido que más pronto que tarde llegará un grupo de empleados que quieren organizarse”, apunta.

CCOO lleva meses dando la batalla contra las prácticas laborales de estos dos empresarios, con el foco puesto especialmente en el despido de las conocidas como 'Las 9 de AON'. Según ha denunciado este sindicato, nueve mujeres fueron despedidas de esta firma de telemarketing únicamente por el hecho de haber formado una candidatura sindical. La organización ha llevado a cabo distintas acciones para hacer visible esta situación, como la iniciativa 'Mete un gol al dueño del Racing'. 

En esta línea, Marta Careaga, secretaria general de la Federación de Servicios de CCOO, asegura que lo ocurrido con 'Las 9 de AON' no es un caso aislado, sino que “es una historia repetida y muestra un patrón de persecución sindical” por parte de los ahora máximos accionistas del Racing de Santander.

Tras unos primeros despidos, que fueron declarados nulos por la justicia, la empresa conformó un comité de empresa “con cargos intermedios y teleoperadores afines que ha jugado todo este tiempo a su favor”, remarca esta sindicalista. Según refleja la documentación que posee este medio, el comité se formó en mayo de 2013 y desde entonces no ha habido nuevas elecciones.  

Además del escaso número de sociedades que disponen de comité, desde CCOO ponen en cuestión la verdadera funcionalidad de algunos de ellos. Por ejemplo, según señala este sindicato, en Nexian figuran 17 representantes independientes -no pertenecen a ningún sindicato-, que en realidad “son gente puesta por la empresa”. Es decir, igual que sucedió en AON, según la versión de este sindicato.

Además de AON Mobile y de Nexian, dentro de la extensa red empresarial que pende del Grupo Pitma otras cuatro sociedades tienen representación legal: Gomeber, dedicada a la fontanería, con un delegado de CCOO nombrado en 1995, aunque el sindicato apunta que ya no tienen relación; Instalaciones Martínez Díez, con un delegado de UGT desde 2011; el call center Phone & Fun, en 2013 y, finalmente, el Racing de Santander (un representante de UGT desde 2016).

Un mercado voraz

El grueso de los aproximadamente 3.000 empleados contratados por Pitma se concentran en muy pocas sociedades y especialmente en dos de ellas, las que están vinculadas al telemarketing: AON Mobile, con 500 trabajadores, y Phone & Fun, con 800, que precisamente cuentan con representación legal de la plantilla. En el caso de AON la elección fue respaldada por “más del 90%” de los trabajadores.

En España hay cerca de media docena de plataformas call center, en las que las condiciones laborales se distinguen por ofrecer sueldos bajos y  trabajar a jornada reducida -una media entre cinco y seis horas diarias- bajo mucha presión. Estas plataformas son contratadas por grandes operadoras de telefonía y compiten entre sí para conseguir campañas, lo que provoca la precarización del empleo y que la exigencia sobre los empleados para lograr clientes sea muy alta. El nivel de eficacia de las plataformas ubicadas en el norte de España es elevado, motivo por el cual este tipo de empleo se ha implantado en Cantabria.  

Fiesta ibicenca en El Sardinero

Con su aterrizaje en el club deportivo más importante de la Comunidad, los dueños de Pitma, Alfredo Pérez y Pedro Ortíz, han saltado a la primera línea mediática, tanto para lo bueno como lo malo. El pasado sábado volvieron a ser motivo de polémica por celebrar en las instalaciones de la entidad deportiva una fiesta ibicenca entre sus empleados, la cual terminó siendo desalojada por la Policía Local tras recibir quejas de los vecinos por el ruido y por no contar con la autorización del Ayuntamiento de Santander, propietario del estadio.

El Ayuntamiento de Santander ha iniciado un procedimiento para imponer las sanciones que correspondan por este evento celebrado “sin conocimiento municipal y sin ninguna autorización” por parte del Consistorio, y CCOO va a interponer una denuncia ante la Inspección de Trabajo por infracciones laborales durante la “jornada de limpieza” con la que el máximo accionista del Racing trató de justificar el festejo.