José Manuel Soria renuncia por su implicación en los papeles de Panamá
La publicación de los papeles de Panamá ha acabado con la carrera política de José Manuel Soria. El hasta ahora ministro de Industria en funciones ha presentado su renuncia a Mariano Rajoy como ministro, diputado y presidente del PP de Canarias ante sus numerosas contradicciones sobre su participación en sociedades offshore radicadas en paraísos fiscales. Hasta este miércoles, el presidente en funciones decía confiar en sus explicaciones, pero en la dirección del PP crecía el enfado por sus falsedades. Finalmente, su jefe y amigo ha decidido dejarle caer.
El comunicado emitido por Soria confirma que renuncia a su acta de diputado y también a la presidencia autonómica del PP de Canarias, abandonando así “todo tipo de actividad política”. También se refiere a los “errores” cometidos en sus explicaciones tras aparecer su nombre vinculado a las empresas opacas de Mossack Fonseca. “La política es una actividad que debe ser en todo momento ejemplar también en la pedagogía y en las explicaciones. Cuando así no ocurre, deben asumirse las responsabilidades correspondientes”, finaliza el comunicado.
eldiario.es revelaba este jueves que la empresa familiar de los Soria, Oceanic Lines estaba participada en un 80% por una sociedad instrumental con sede en Jersey. Poco después, el diario El Mundo sumaba un nuevo documento, el del acta anual de UK Lines, que Soria firmaba en su condición de secretario de la misma. El cerco se estrechó tras publicarse horas después que el ministro tenía una sociedad en el paraíso fiscal de Jersey cuando era alcalde de Las Palmas de Gran Canaria.
La versión oficial del Gobierno y del PP se mantuvo a pesar de que las diferentes comparecencias públicas del ministro fueron demostrando las falsedades en cuanto a su relación con UK Lines, donde figuraba como administrador a pesar de que él atribuyó a “un error” la aparición de su firma y la de su hermano. “Ni tengo ni he tenido empresas registradas en Panamá. Es falso”, fue la primera versión defendida en una rueda de prensa convocada en Lanzarote poco después de que El Confidencial y La Sexta hicieran pública su investigación.
Su siguiente falsedad fue que ni él ni nadie de su familia habían tenido acciones o responsabilidad de ningún tipo en UK Lines Limited a pesar de que la firma había sido fundada por su padre y otro socio y que él figuraba como secretario del consejo de administración hasta que fue disuelta en 1995, cuando él ya era alcalde de Las Palmas.
Con el anuncio de la decisión, Soria ya no participará este viernes en la deliberación del Consejo de Ministros. No obstante, el Gobierno ya había “excusado” su presencia en la reunión en la tarde de este jueves. De esta forma, se relevaba a la vicepresidenta de ser la primera que diera las explicaciones. La renuncia de Soria permite anular su comparecencia del lunes ante la comisión parlamentaria en la que registró una solicitud para dar explicaciones tras su aparición en Los Papeles de Panamá. No obstante, su petición se produjo el martes, antes de que se revelaran los nuevos datos sobre su presencia en una sociedad opaca en Jersey.
A pesar de su relación de amistad con Rajoy desde hace años, en las últimas horas la situación de Soria se había vuelto insostenible. La misma persona a la que el jefe del Ejecutivo recurría para insistir en la necesidad de respetar la presunción de inocencia “para no ser injusto” en los casos sospechosos de corrupción. Este jueves, sin embargo, Rajoy se negaba a contestar a los periodistas sobre el asunto y guardaba silencio durante un acto en Cuenca destinado a subrayar la importancia de las diputaciones provinciales. Le acompañaban María Dolores de Cospedal, Fernando Martínez-Maillo y Javier Arenas, en un día en que los vicesecretarios más jóvenes no han tenido ningún tipo de actividad pública y crecían los rumores sobre las pocas horas que le quedaban en el cargo.
Hasta ahora, Gobierno y PP pretendían esperar hasta el lunes, cuando Soria iba a dar, de nuevo, explicaciones ante la comisión de Industria. La decisión de comparecer en el Congreso se tomaba este martes, después de que el protagonista del escándalo lo discutiera con Cospedal y con Jorge Moragas, jefe de gabinete de Rajoy.