Ciudadanos retoma su ofensiva sobre los incumplimientos de Rajoy en materia de corrupción
Tras varias semanas de paréntesis enfrascados en el 'monotema' de Catalunya, la corrupción vuelve a la agenda de los dirigentes de Ciudadanos. Los intentos del PP de 'descafeinar' la Ley Integral de Lucha contra la Corrupción, con la presentación en el Congreso de un amplio paquete de enmiendas, han indignado a los de Rivera que de nuevo acusan al Rajoy de “intentar impedir la regeneración y la lucha contra la corrupción”. El miércoles volverán a preguntar por qué no cumplen las medidas a las que se comprometió en el pacto de investidura.
Sin embargo, no será el líder de Ciudadanos el que protagonizará el inicio de esta nueva “ofensiva”. Rivera seguirá con su agenda. El martes se reúne con el presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani y durante los días que quedan de campaña continuará muy volcado en Catalunya arropando a la candidata, Inés Arrimadas.
Girauta será el encargado de preguntar al Gobierno
Rivera ha dejado esta tarea en manos de sus 'segundos'. El miércoles será el portavoz parlamentario, Juan Carlos Girauta, el encargado de preguntar en la sesión de control al Gobierno si “mantiene sus compromisos de regeneración democrática firmados en el acuerdo de investidura”.
Aunque la pregunta va dirigida indirectamente a Rajoy, será uno de sus ministros el que responderá ya que que Ciudadanos no tiene ese día cupo de pregunta al presidente del Gobierno.
El portavoz de Ciudadanos hará alusión a las maniobras que está haciendo el PP para rebajar la propuesta de Ciudadanos sobre Ley Integral de Lucha contra la Corrupción y Protección a los denunciantes. Una ley ómnibus con un amplio paquete de medidas sobre regeneración democrática que ya está en trámite en la Cámara y que si todo va bien podría ser debatida por el Pleno a principios de febrero, cuando comience el nuevo periodo de sesiones en el Congreso tras las Navidades.
Entre las cientos de enmiendas que acaban de registrar los grupos para su debate en Comisión hay medio centenar de los populares con correcciones al texto. Pero los de Rivera destacan sobre todo dos. Una destinada a que el órgano que proponen para supervisar la lucha contra la corrupción y tramitar las denuncias que se realicen dentro de la administración, no sea independiente sino que esté adscrito al Ministerio de Hacienda. Y otra que está encaminada a que el máximo responsable de este Oficina no sea elegido por el Pleno del Congreso, sino por el Consejo de Ministros.
El secretario general del grupo Miguel Gutiérrez, aseguró que su partido “no va a dejar que el PP impida que este país se regenere y que los partidos salpicados por casos graves de corrupción se limpien”.
Aunque saben que el PP ya no goza de mayoría en la Cámara para imponer su criterio, en Ciudadanos avisan que no se saldrán con la suya de guardarla “en un cajón”.
Otros grupos de la oposición, sin embargo, cargan contra los de Rivera porque el proyecto de ley no permite que las denuncias efectuadas ante la Autoridad Independiente sean anónimas.
El PP, por su parte, acaba de sorprender anunciado que quiere también acabar con el anonimato en las redes sociales, una medida que Ciudadanos ve “difícil” pero sobre la que están dispuestos a “hablar” dado que varios dirigentes del partido está sufriendo insultos en las redes.
Además de esta ley anticorrupción, los de Rivera se quejan de que Rajoy sigue sin cumplir otros compromisos, como la eliminación de los aforamientos, la limitación de mandatos, que están pendientes o la reforma de la ley electoral que subcomisión en donde se abordará.
Niegan que Rivera haya aparcado la corrupción del PP
En las filas naranjas niegan que Rivera haya aparcado a un lado la corrupción del PP, un tema que ha estado utilizando como ariete durante meses. Pero lo cierto es que el líder de Ciudadanos decidió guardar silencio en pleno escándalo sobre las revelaciones del policía que lideró las pesquisas sobre la trama Gürtel, Manuel Morocho, que compareció en la Comisión del Congreso sobre la financiación ilegal del PP.
El inspector jefe en la UDEF indicó que existen “indicios” de que Mariano Rajoy, recibió pagos de la 'caja B' del Partido Popular que manejaba el tesorero Luis Bárcenas. Pero ni el líder de Ciudadanos, ni ninguno de sus dirigentes aprovecharon la sesión de control al Gobierno para pedir explicaciones al presidente del Gobierno.
Fueron Unidos Podemos y el PSOE los dos únicos grupos que obligaron a Mariano Rajoy, y a la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, a afrontar preguntas sobre el caso en la sesión de control de aquella semana.
Rivera, en cambio, se centró de nuevo en cuestionar la capacidad de Rajoy para gestionar con eficacia la aplicación del 155 en Catalunya, que su partido alentó y apoyó.
En el partido afirman que una vez que pasen las elecciones y se despeje allí el panorama, el líder de Ciudadanos volverá a liderar la ofensiva contra el Gobierno en materia de corrupción y regeneración democrática que durante las últimas semanas ha tenido olvidada.
Temas para atacarle sobre los incumplimientos del pacto de investidura no le faltan. Incluso el PSOE ha elaborado un listado muy prolijo sobre ellos. En el partido de Pedro Sánchez han calificado su trabajo como una “auditoría” en la que denuncian que el 86% de las medidas comprometidas por Rajoy y Rivera continúan sin cumplirse un año después de comenzar la legislatura.
Los socialistas, precisamente, han preguntado al ministro de Justicia, Rafael Catalá, sobre estos incumplimientos en otra sesión de control al Gobierno. Catalá aprovechó para atacar al PSOE, y respondió que de las trece medidas de regeneración democrática pactadas, siete de ellas habían sido ejecutadas y otras seis estaban en proceso de hacerlo.