El segundo ‘cara a cara’ de Sánchez y Feijóo, un termómetro de su relación en plena negociación del Poder Judicial
El Senado será escenario de un segundo cara a cara entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo. La comparecencia de Sánchez, a petición propia, propiciará un nuevo debate más allá de las muy tasadas sesiones de control, marcado por la reanudación de las conversaciones entre Ejecutivo y PP para desbloquear el Poder Judicial. Un tema sobre el que unos y otros prefieren limitar los comentarios con la intención declarada de que no descarrilen las conversaciones.
La semana pasada Sánchez optó por aislar la renovación del CGPJ del barro político. Solo lo mencionó en su turno de réplica para reafirmarse en que no tiene intención de firmar un compromiso escrito con el PP para reformar el sistema de nombramiento de los vocales del organismo. Ese mismo día, mientras Sánchez hablaba, Feijóo insistía en la necesidad de tener esa promesa en un papel y firmada de su puño y letra.
Pero más allá de ese choque dialéctico a distancia, tanto Sánchez como la portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, orillaron el tema. Sea por estrategia o por convencimiento de que las conversaciones pueden terminar bien, una de las claves del debate de este martes será precisamente si el presidente y Feijóo confrontan o no por el CGPJ. De cómo se desarrolle se podrá deducir si las negociaciones tienen visos de terminar bien o no.
En el PP ya consideran un “avance” el mero hecho de que las negociaciones se mantengan una semana después de volverlas a poner en marcha. “No sería prudente por nuestra parte estar retransmitiendo en directo el avance de estas conversaciones. Y digo bien, el avance de estas conversaciones”, declaró este lunes el coordinador general del partido, Elías Bendodo. También en Moncloa se escudan en la necesidad de mantener en la opacidad las negociaciones para que no fracasen.
En todo caso, lo que aseguran fuentes socialistas es que Sánchez no pretende moverse un ápice de la estrategia que ha puesto en marcha en los últimos tiempos y desvinculan el debate de este martes de la negociación que se puso en marcha hace una semana. “Esperamos tener enfrente una alternativa. Es una aspiración pequeña y legítima del principal partido de la oposición, pero en el pasado debate del Congreso, Gamarra necesitó 50 segundos para dejar claro que el PP no tiene una alternativa. Después de una intervención del presidente detallando propuestas y estableciendo el plan de lo que hay que hacer en esta situación, la señora Gamarra se subió a hablar de indultos”, reprochan fuentes socialistas. “Lo que se espera de Feijóo es que deje de quejarse de los tiempos, del árbitro y del VAR antes de que empiece el partido”, ironizan.
El partido de Feijóo ha rebajado las expectativas tras el duro enfrentamiento de hace un mes y ha intentado poner el foco en la ventaja que el reglamento otorga al presidente, quien tiene tiempo ilimitado para intervenir. Los grupos, por su parte, gozan de un total de 20 minutos para dar la réplica al jefe del Ejecutivo. Algo que en Génova ya sabían, y que es así en todos los parlamentos en España. De hecho, Feijóo como presidente ya gozó de ese privilegio durante sus años al frente de la Xunta de Galicia.
En Moncloa sostienen que Sánchez no se moverá del “marco ganador” en el que, a su juicio, le sitúa la defensa del Estado del bienestar frente a las recetas del PP. Precisamente el motivo de la comparecencia, solicitada por el Gobierno antes de dar “una última oportunidad” al acuerdo para el Poder Judicial, es para rendir cuentas de las medidas “económicas y fiscales adoptadas por el Gobierno y el papel de las comunidades autónomas en su implementación y en el mantenimiento del Estado de Bienestar”. La decisión la tomó Sánchez al considerar que le había salido bien el primer duelo frente a Feijóo.
“Este Gobierno tiene una vía socialdemócrata para salir de la crisis, que asumen los gobiernos conservadores europeos menos Reino Unido, que ha tenido que cesar a su ministro de Economía, y los conservadores españoles”, argumentan fuentes socialistas. “Vamos a contar qué estamos haciendo y, lógicamente, al contarlo dejaremos en evidencia que por parte del PP no hay alternativa. Son debates que vienen bien a los españoles por escucharnos y desde el punto de vista político dejan claro cuál es nuestro modelo y cuál es la ausencia de modelo de Feijóo”, argumentan en Moncloa, donde insisten en separar el duelo de las conversaciones: “El debate es el debate y la negociación es la negociación”.
En la sede nacional del PP en la madrileña calle de Génova acuden a la cita en el Senado a la defensiva, a esperar a ver qué tono y qué mensaje esboza el presidente y responder en función de lo que este diga y de cómo lo diga. “Depende de él”, apuntan desde el círculo más próximo a Feijóo, donde creen que este martes se podrá medir si el Gobierno está o no dispuesto a pactar el CGPJ.
El segundo gran ‘cara a cara’ entre Sánchez y Feijóo será un termómetro de la nueva relación que han iniciado, pero servirá sobre todo para calibrar si hay mimbres para un entendimiento para la renovación del Poder Judicial, dado que en ambos lados reconocen la dificultad para forjar nuevos acuerdos a las puertas de un nuevo ciclo electoral.
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