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Ultiman un festival de música electrónica en Madrid junto a una zona de máxima protección ambiental

Imagen aérea que muestra el recinto para el festival y el límite del espacio protegido.

Raúl Rejón

Dos días seguidos de música electrónica, 20.000 personas, tiendas de campaña y decenas de vehículos. Todo justo en la linde de un espacio natural con máxima protección en la Comunidad de Madrid. Ese es el menú preparado por el Ayuntamiento madrileño de El Álamo (PP apoyado por Acala) y el 4every1 Festival para los días 27 y 28 de junio. Tanto es así, que la Consejería de Medio Ambiente ya informó en abril pasado de que este evento “es un uso agresivo al espacio protegido por lo que podría resultar incompatible con la conservación de los recursos naturales del Parque Regional Curso Medio Medio del Río Guadarrama”, según ha podido saber eldiario.es por un escrito del Ejecutivo regional. Añadía que supone un “impacto negativo para la flora y la fauna de la zona debido principalmente a la contaminación acústica generada y por el desarrollo de la actividad”.

Se trata de la segunda edición del festival (la anterior se celebro en el recinto específico para festivales de la localidad de Arganda del Rey, donde se desarrollaron eventos parecidos como el Rock in Río). Sin embargo, la organización dice haber cambiado la ubicación “por la inseguridad institucional que se nos planteaba” en la anterior sede. La cuestión es que querían incorporar un aparcamiento gratuito y un camping y, según dicen, El Álamo y su equipo de Gobierno “finalmente han garantizado la continuidad deseada al proyecto”. Su plan es repetirlo, al menos, cuatro años.

Así que fue el propio consistorio el que remitió el plan “en un correo electrónico” a Medio Ambiente. Allí, los técnicos comprobaron que, precisamente la denominada “zona de descanso” (el camping) estaba directamente dentro de los límites del parque regional en el Parque San Isidro. Además de esa ocupación del suelo del parque, se explica que “la zona de celebración y el aparcamiento se encuentra dentro de la franja periférica de protección”. Esta franja se ha establecido en 100 metros a partir del límite de la zona defendida en los que “se localizarán usos no agresivos”, según el Plan de Ordenación. El Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama es el mismo espacio en el que la familia Aznar-Oriol ha montado una cancha privada de polo donde se han celebrado torneos del circuito oficial.

El suelo en el que se planea realizar el festival está calificado como “suelo industrial” que no ha sido desarrollado. Es tierra de cultivo. Para hacerlo más habitable, la organización ha plantado césped y ha perforado un pozo para su riego. Algunos vecinos han recurrido al Seprona de la Guardia Civil para comprobar si se trata de un pozo autorizado. El Ayuntamiento de El Álamo, por su parte, ha contestado a eldiario.es que “sobre el festival todo esta OK”.

Un portavoz de la organización ha respondido a este medio que “efectivamente, la Consejería de Medio Ambiente nos ha pedido algunos informes que se han remitido y estamos esperando la autorización que pensamos que será inminente”. Esa petición se refiere a que el promotor debía haber realizado “la oportuna solicitud en la que se definan, al menos, las características de la misma, su ubicación exacta, equipos de luz, sonido, nivel de emisiones ópticas y acústicas, número de asistentes, instalaciones complementarias...”. Todo estos detalles no habían sido remitidos por el Ayuntamiento de El Álamo al informar de la realización del evento. Este martes, los sevicios jurídicos del festival se han puesto en contacto con eldiario.es para añadir que han “judicializado” lo que califica como “varias irregularidades” entre las que enumera “falsedad documental” con la idea de “evitar la venta de entradas”.

“Es una temeridad”

La propia Consejería señala que, a pesar de que el escrito en el que advertía de todas estas carencias salió el 17 de abril, “a fecha actual [2 de junio] no se ha recibido ningún tipo de solicitud por parte del promotor de la actividad referenciada por cuanto en ningún caso debería celebrarse la mencionada actividad sin obtener el preceptivo informe ambiental favorable”. La promotora aseguraba este lunes que estos documentos ya estaban en marcha. Mientras tanto, 4every1 Festival ha estado publicitando el evento y vendiendo entradas hasta sólo quedar 3.000 tiques de régimen general (a 45 euros), según informa en su página web. Entre los atractivos han estado expuestos la zona de descanso y el aparcamiento sobre los que advirtió Medio Ambiente.

“Es una temeridad meter a tanta gente en una zona que no tiene ni infraestructuras ni servicios”, analiza Mª Ángeles Nieto de Ecologistas en Acción. Nieto cuenta que allí “no hay agua corriente ni saneamientos, tendrán que ser portátiles”. Y sobre, todo, “está lindando con el espacio protegido y en plena época de riesgo alto de incendios”. En esta ocasión, la ecologista y la consejería parecen coincidir ya que el subdirector general de Espacios Protegidos, Ismael Fernández firmó un escrito que mencionaba los efectos nocivos de este “uso agresivo”

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