El Papa Francisco nombra cardenal al arzobispo de Madrid, Carlos Osoro
Al término del Angelus de hoy, el Papa Francisco anunció la creación de 13 nuevos cardenales electores, que podrán elegir (y ser elegidos) en un hipotético cónclave. Entre ellos, y como anunció eldiario.es, se encuentra el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, uno de los prelados más moderados y, sin lugar a dudas, el “hombre de Francisco” en España.
Junto a Osoro, el Papa ha designado cardenales de África, Oceanía, Asia y Latinoamérica, de modo que Europa deja de tener mayoría absoluta en el colegio cardenalicio. Algo que el propio Francisco había anunciado en su vuelo de regreso de Azerbaiyán, para poner de manifiesto la “universalidad de la Iglesia” frente al imponente peso del Viejo Continente y, especialmente, de Europa. De hecho, entre los elegidos, solo hay un italiano, y es el representante de Papa en Siria, Mario Zenari, lo que supone todo un símbolo de la lucha de Bergoglio contra esta guerra.
El nuevo cardenal español recibió la noticia en el aeropuerto de Santader, regresando de una celebración familiar. En conversación con eldiario.es, Osoro se muestra “profundamente feliz por la confianza que el Papa Francisco ha depositado en mí”, a la vez que “sorprendido”, porque “no me lo esperaba”.
“Ahora mismo regreso a Madrid, porque quiero compartir este honor con mi comunidad diocesana”, subrayó Osoro, quien apuntó que “me siento honrado, y con más fuerzas para dar todo lo que la Iglesia y el Papa quieran de mí, incluso hasta dar la vida”. La birreta cardenalicia, de hecho, significa la total dedicación de un purpurado.“Estoy muy feliz, no te lo puedo negar”, revela, exultante.
En las últimas semanas, se había adelantado la posibilidad de que el Papa Francisco nombrara cardenales como culmen del Año de la Misericordia, algo que ya había anunciado eldiario.es y que se confirma, con el anuncio de Consistorio el próximo 19 de noviembre, al término del Jubileo.
Si lugar a dudas, Carlos Osoro es el hombre del Papa Francisco en España. “El peregrino”, como el mismo Bergoglio lo denominó, es uno de los elegidos por el Santo Padre para construir la “cultura del encuentro” frente a la “cultura de la indiferencia”. Nombrado arzobispo de Madrid hace ahora dos años, el nuevo cardenal tendrá, a buen seguro, la responsabilidad de liderar el cambio en la Iglesia española, y en la Conferencia Episcopal, donde desde hace dos años y medio ejerce como vicepresidente.
Pocos dudan que, tras el nombramiento de Osoro, su candidatura a la presidencia de la Conferencia Episcopal está cantada, así como la opción de formar tándem con el otro hombre de Francisco en la Iglesia española, el arzobispo de Barcelona, Juan José Omella. La sintonía entre ambos es clara, así como la conexión de un estilo cercano y amable frente a los ruidos y la imagen de Iglesia oscura y condenatoria de anteriores mandatos al frente de la CEE, especialmente de las dos décadas de Rouco Varela.