El pacto progresista de 2015 saca 35.000 votos a las cuatro derechas en Gran Canaria
El voto canario en las elecciones generales varía sustancialmente cuando de elegir alcaldes o presidentes de cabildos se trata. Nada es extrapolable al detalle, pero la cita electoral del 28 de abril dibuja una tendencia para la siguiente vuelta en clave local del 26 de mayo: el bloque de izquierdas supera en 35.000 votos a las cuatro derechas en Gran Canaria, gobernada desde 2015 por un pacto progresista.
Así, la suma de los votos de PSOE, Nueva Canarias y Unidas Podemos alcanza los 233.194 sufragios entre las tres formaciones que en 2015 sellaron un acuerdo de gobierno en el Cabildo de Gran Canaria, roto después por la salida de dos de los cuatro consejeros morados. Los otros dos se han integrado ya en las filas de Nueva Canarias mediante la alianza suscrita con su nueva plataforma, Canaristas.
En la isla, el PSOE ha obtenido 127.191 votos, siendo la primera fuerza con un 28,53%, Unidas Podemos es tercera, con 74.053 y el 16,61%, y Nueva Canarias ha quedado en quinto lugar, con 31.950 votos y un 7,17%. Esos datos dejarían en una delicada posición al actual presidente, Antonio Morales (NC), que en 2015 dio el salto a la política insular desde la alcaldía de Agüimes convirtiéndose en el primer valor electoral de NC, con más de 100.000 votos y el 26,49%. Sin embargo, no suele el voto nacionalista de izquierdas ser el mismo en las generales que en las locales.
En 2015, el bloque de izquierdas obtuvo en el Cabildo de Gran Canaria resultados similares a los actuales en las generales, con 212.474 votos entre los tres partidos (Nueva Canarias, 103.423, PSOE 56.777 y Podemos 52.274), variando en todo caso la distribución de esos apoyos de NC a PSOE y Podemos en estas elecciones.
En el bloque de derechas, cuatro partidos suman desde posiciones liberales hasta la extrema derecha 197.928 votos. A los tres habituales en España de PP (74.175 votos y un 16,64%), Ciudadanos (70.665 y 15,85%) y Vox (30.590 y 5,86%) se une en la isla la alianza de la derecha españolista representada por escindidos del PP como el grupo de Bravo de Laguna, Unidos por Gran Canaria, o el de Nardy Barrios, Compromiso, en Juntos por Gran Canaria y sus 22.498 votos y un 5,05%.
El reflejo que estos resultados tengan en la distribución de los 29 consejeros del Cabildo de Gran Canaria es una incógnita. Pero todo apunta a que la Corporación insular tendrá que hacer hueco a partidos que no tienen representación durante este mandato, como son Ciudadanos y Vox.
Hace cuatro años, esa suma de la derecha a cuatro manos se quedó en 151.253 votos, casi 50.000 votos menos que ahora, (PP, 68.445 y 17,53%, Unidos por Gran Canaria, el grupo de Bravo escindido del PP, 44.167 y 11,31%, Coalición Canaria, 21.742 y 5,57% y Ciudadanos, que se quedó fuera del Cabildo, 16.899 y 4,33%), a lo que habría que añadir el irrelevante resultado de Vox en 2015, con 1.011 y un 0,26% que esta vez superará con creces.
