La Audiencia Nacional consideró “razonable” hace 15 años sacar del puerto de La Luz un barco incendiado
La decisión de sacar de los muelles de Las Palmas de Gran Canaria al pesquero ruso Oleg Naydenov cuando el incendio que sufría se volvió incontrolable ha recibido numerosas críticas, pero tiene un precedente idéntico en el mismo puerto que la Audiencia Nacional consideró “razonable”.
Hace 15 años, el pesquero María Teresa Rodríguez sufrió un fuego mientras estaba atracado en el puerto de La Luz que no se pudo atajar y que llevó a la Capitanía Marítima a ordenar que lo remolcaran lejos del puerto, hasta que se hundió en el mar, lo mismo que le pasó al Oleg Naydenov entre los días 11 y 14 de abril.
Su aseguradora, Allianz, demandó tanto a los bomberos de la ciudad como a la Capitanía Marítima de Las Palmas para exigirles el pago de 2,10 millones de euros de indemnización, al considerarles responsables de que el pesquero finalmente se perdiera en el mar.
Sin embargo, primero el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (en la parte que concierne a los bomberos) y después la Audiencia Nacional (en lo que atañe a Capitanía Marítima, un organismo dependiente del Ministerio de Fomento) rechazaron su demanda.
En el caso del Oleg Naydenov, la Capitanía Marítima de Las Palmas tomó esa decisión ante el riesgo de que el fuego se extendiera a otros barcos y para evitar que, si se producía un derrame de las 1.400 toneladas de fuel que llevaba el pesquero, el vertido acabara afectando a la desaladora que abastece de agua potable a la capital grancanaria, situada a pocos kilómetros.
Tanto el Ministerio de Fomento como el presidente de Canarias, Paulino Rivero, han defendido que se resolviera sacar al Oleg Naydenov del puerto, pero la decisión ha recibido numerosas críticas por parte de algunos partidos y grupos ecologistas.
Fuentes de la Fiscalía han indicado a Efe que el caso tiene un precedente muy similar resuelto por la Audiencia Nacional con una sentencia que avala el proceder de Capitanía Marítima.
Ese fallo, publicado en junio de 2006, dictamina que remolcar fuera del puerto a un barco con un fuego imposible de apagar no solo entra en las competencias de la Capitanía Marítima, sino que además es “un ejercicio razonable, mesurado y no arbitrario”.
La Sala de lo Contencioso Administrativo de la Audiencia Nacional consideró entonces que no cabe culpar a la Capitanía Marítima de que un barco así acabara hundiéndose luego en el mar, porque cuando se ordenó su alejamiento de la costa “estaba irremisiblemente perdido”.
Por ello, añadían los magistrados, en esas circunstancias no resulta “admisible imputar a la Administración el hundimiento del barco”, cuyo origen fue el incendio que se declaró en su interior.
En el caso del Oleg Naydenov, la Fiscalía de Medio Ambiente de Las Palmas ha abierto un procedimiento de oficio para investigar si existe alguna responsabilidad penal en los hechos, en la que ha interrogado tanto al capitán del arrastrero ruso, Igor Dorofieyev, como al capitán marítimo de Las Palmas, Pedro Mederos, que tomó hace quince años la misma decisión con el María Teresa Rodríguez.
La defensa de este última ha aportado al fiscal los informes técnicos y precedentes que justifican su decisión, entre los cuales figura el caso del año 2000 avalado por la Audiencia Nacional.
La Fiscalía seguirá tomando declaración a varias personas relacionadas con la gestión de este siniestro en las próximas semanas.
