Condenado a 35 años de cárcel el asesino de los empresarios canarios José Antonio Perdomo y Miguel Untied
El Segundo Tribunal Superior de Justicia del Primer Distrito Judicial de Panamá ha condenado, en una sentencia del pasado 28 de septiembre, a 35 años de cárcel a René Oliver Antioco, Pirru, por ser el autor del homicidio y robo de los empresarios canarios José Antonio Perdomo (57 años) y Miguel Untied (67 años), y a 11 años y tres meses de prisión a sus dos cómplices, Emenegildo Prestán, Menocito, y Luis Alfredo Ramos.
Los hechos se remontan al 13 de diciembre de 2012 cuando los tres procesados, cazadores furtivos, se personaron en la vivienda de Untied y realizaron el crimen. El día anterior estaban cazando gatos en las proximidades de la finca Caño Ciego, propiedad del ciudadano tinerfeño, y que estaba situada en Isla Grande, en la provincia de Colón. Los perros de los cazadores se adentraron en la propiedad de Untied y este decidió matarlos.
Tal como recoge la sentencia adelantada este miércoles por el periodista Antonio José Fernández, de Canarias Radio La Autonómica, una de las trabajadores de la finca explicó en el juicio que 15 minutos después de los disparos llegaron los dueños de los perros, “gritaron una serie de obscenidades” y se marcharon.
Al día siguiente, con alevosía en un “arranque de ira y deseos de venganza”, Pirru disparó en la cabeza y el tronco de Untied y en la cabeza de Perdomo. Además, el ciudadano de origen alemán fue despojado de unas escopetas que guardaba en el coche, su cartera y el teléfono móvil, solamente recuperándose la cartera.
Para la justicia del país centroamericano queda probado que Pirru fue el autor del homicidio y el robo, mientras que Menocito y Luis Alfredo Ramos fueron cómplices secundarios porque estaban presentes e intentaron esconder pruebas.
Las crónicas de la época recogen que Untied era una persona acaudalada y poseía una propiedad con grandes extensiones de cultivos, cabezas de ganado y hasta un embarcadero. Había vivido toda su vida en Tenerife, en la década de 1980 se trasladó a Panamá y fijó su residencia en su finca de Caño Ciego, a unos 140 kilómetros al noreste de la capital.
Por su parte el empresario José Antonio Perdomo Cebrián, originario de Telde, regentaba un negocio de hostelería rural en Ojos de Garza y era esposo de la exconcejal del Ayuntamiento de Ciuca en esta ciudad Laly Sánchez.