Santander y Castro Urdiales se preparan para una posible marea extraordinaria este jueves
Los municipios de Santander y Castro Urdiales se están preparando ante una posible marea extraordinaria que podría tener lugar el jueves, día 19, cuyos efectos dependerán de la climatología, que puede hacer que el nivel del mar previsto por este fenómeno aumente pero también que disminuya.
Según han indicado fuentes del Ayuntamiento de Santander a Europa Press, en la capital cántabra están pendientes de la evolución climatológica “por si fuera necesario tomar medidas”, si bien, “por precaución”, ya se han retirado los elementos móviles de las playas, tales como pasarelas, duchas o lavapiés, entre otros.
Santander está en contacto con el Instituto de Hidráulica Ambiental (IH Cantabria) desde hace días y además el Ayuntamiento cuenta con un dispositivo específico para alertas marítimas, ha señalado el Consistorio.
Por su parte, el Ayuntamiento de Castro Urdiales cerrará al público desde este miércoles y hasta el viernes 20 los accesos al rompeolas, Santa Ana y Muelle Don Luis, para prevenir los riesgos derivados de posibles “mareas extraordinarias, con niveles de agua en dársena, tanto en pleamar como en bajamar, que pudieran generar incidencias en las instalaciones portuarias”.
Además, el Consistorio castreño ha pedido precaución a la población durante estas jornadas.
En concreto, la costa cántabra espera para el jueves una marea astronómica, que está vinculada a la gravedad y a las interacciones entre la Tierra, la Luna y el Sol.
Esta marea es una pleamar “importante”, a la que hay que sumar el efecto meteorológico, que puede hacer que ese nivel aumente o disminuya.
En el Puerto de Santander, su presidente, César Díaz, explicaba que algunos muelles están situados a cota más 6 metros y otros a más 6,50, mientras que la mayor marea registrada hasta la fecha alcanzó los 5,38. Por tanto, todavía “existe un resguardo suficiente” si la marea astronómica provoca un aumento del nivel del mar superior al conocido hasta el momento.
Sí que podría “en algún momento” generarse “algún desajuste” con la pleamar en lugares como los pantalanes, marinas deportivas o marinas de embarcaciones de recreo.
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