Una nueva Ley de la Viña y el Vino que revolucionará y modernizará el sector regional antes del verano

La próxima Ley de la Viña y el Vino “revolucionará” y modernizará el sector vitivinícola regional, así lo ha señalado hoy el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, en la rueda de prensa para dar cuenta de la aprobación del anteproyecto de esta Ley por el Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha.

Este anteproyecto de Ley es “el resultado de un trabajo previo realizado con el sector vitivinícola de la región, que parte del Plan Estratégico del Sector que se presentó en febrero de 2019, y en el que se recomendaba el Gobierno elaborar una Ley con la especificidades del sector en la región, ha recordado el consejero.

El borrado estuvo en exposición pública la primavera pasada y se recibieron 50 alegaciones, tras lo cual pasó por Consejo Asesor Agrario. Tras su aprobación por el Consejo de Gobierno se remitirá a Consejo Consultivo para su dictamen para volver a Consejo de Gobierno e iniciar su tramitación en las Cortes regionales, con el objetivo de que sea aprobado en este periodo de sesiones.

Esta normativa flexibilizará y adaptará varias cuestione con el fin de “adaptarse a la realidad hoy del sector vitivinícola”, ha señalado Martínez Arroyo, en aspectos como por ejemplo flexibilizar los procesos de autorización de plantación de nuevas variedades de uvas, “que se adapte a lo que los consumidores están demandando”, flexibilizará también lo relativo a las prácticas enológicas y los procedimientos para la tramitación de indicaciones geográficas.

Entre lo más destacado está que se incorporan opciones en el etiquetado de las botellas para que las Denominaciones de Origen (DO) y las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) puedan incluir referencias a unidades geográficas menores como municipios, parajes o grupos de municipios y ,“de manera especial, incorporamos un concepto nuevo que es el vino de finca”, como referencia a vinos producidos en parajes que alrededor de la bodega puedan proveerse de la uva y elaborar el vino sin renunciar a la DO en la que estén acogidos.

Esta nueva denominación es, según Martínez Arroyo, una novedad en la región y “posiblemente en todo el país”, y adapta una referencia que permite la normativa comunitaria porque “hay muchas bodegas que quieren seguir en la DO o IGP y diferenciar el producto porque se elabora en un paraje determinado”, ha señalado.

El consejero además ha señalado que la normativa “apuesta por el viñedo de secano en vaso, para mantener nuestro viñedo más tradicional, más social”, y por ello se pone en marcha una medida agroambiental especifica que entrará en vigor en 2023 en la nueva PAC para el viñedo de secano en vaso, a la que se van a dedicar 26 millones de euros para proteger 50.000 hectáreas con compromisos a 5 años con los viticultores.

Trazabilidad y digitalización

Martínez Arroyo ha señalado que la Ley establecerá que toda la promoción de vino hecha con fondos públicos se dirigirá a los vinos embotellados vinculados a algunas de las figuras de calidad de Castilla-La Mancha, ya que estos vinos generan entre 4 y 5 veces más renta que vino a granel.

La próxima Ley incluye de manera específica la necesidad de garantizar la trazabilidad del vino para todo los eslabones de la cadena. Para ello también se trabaja en la digitalización de vinos de bodega y en la tecnología ‘blockchain’ para que las relaciones con las bodegas se hagan a través de un código QR ya sea para la relación con la administración o con el propio consumidor. “Vamos a ser la comunidad autónoma que más trazabilidad va a garantizar en los productos vitivinícolas y vamos a digitalizar todos los registros”, ha señalado.

“La Administración va a relacionarse con todos los eslabones de la cadena a través de este código, esto nos va a permitir revolucionar el sector del vino”, ha manifestado el consejero. Para poner en marcha esta digitalización, se van a invertir 2 millones de euros con el objetivo de que en el 2022 “tengamos completamente aplicada esta tecnología que garantizará la trazabilidad del producto”.

Interprofesional regional

Además, la nueva normativa establece las bases para la vertebración sectorial y representatividad del sector, para ello el texto de la ley propone que sea el propio sector el que se autorregule, diversifique las producciones y alcance acuerdos de campaña para garantizar mayor competitividad y mejor adaptación del sector al mercado.

Se persigue, como ya ha señalado el consejero en otras ocasiones, la puesta en marcha de la Interprofesional regional del vino “objetivo en el que venimos trabajando desde hace años”.

Se creará además el Comité Regional Vitivinícola que será el foro de interlocución entre el sector y la administración.

El consejero ha recordado que esta es “una Ley muy esperada por el sector, ya que ya que en la Castilla-La Mancha no existe esta ley desde que en el 2013 el PP derogase la ley que estaba en vigor desde el 2003”, con el mismo nombre.