Los niños con diversidad funcional “tienen que estar en aulas normalizadas”

La Consejería de Educación, Cultura y Deportes acatará y ejecutará la sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Ciudad Real que acaba de estimar el recurso que habían interpuesto los padres de una niña con diversidad funcional que luchaban por su inclusión en un colegio ordinario con los correspondientes apoyos educativos.

La menor, que tiene hoy 12 años, estaba escolarizada desde los cuatro años en un colegio público de la localidad de Miguelturra (Ciudad Real) y sus progenitores, apoyados por la Asociación para la Solidaridad Comunitaria de las Personas con Diversidad Funcional y la Inclusión Social (Solcom) lucharon contra la decisión de la Junta de Castilla-La Mancha de trasladar a la pequeña a un centro de educación especial.

Fue en julio del pasado año, en pleno trasvase de poderes entre la Administración Cospedal y la Administración García-Page cuando, la Comisión de Escolarización de la Consejería de Educación de la Comunidad de Castilla La Mancha, decidió que la menor fuese a un centro de educación especial.

La titular de Educación, Reyes Estévez decía hoy, en una entrevista con eldiarioclm.es que se publica mañana martes, no saber “cómo se pudo llegar a aquello. Estos niños tienen que estar en un aula normalizada”. En este sentido, anunciaba que su departamento impulsará un cambio relacionado con los alumnos con necesidades educativas especiales que favorezca la educación inclusiva. Algo que se estudiará junto con los sindicatos en la Mesa Sectorial de Educación que se celebra este martes, junto a otros asuntos.

“Algunos alumnos tienen una merma en la capacidad cognitiva que puede llegar al 70% pero se les evalúa de la misma manera que al resto. Dado que tienen bastante complicado titular, lo que vamos a hacer es, si el claustro lo entiende así, que puedan continuar con el mismo grupo, con sus amigos. No es que se les vaya a dar el título pero para qué vamos a hacerle repetir curso si el niño, desafortunadamente, no va a ser capaz. Buscamos que, al menos, desde un punto de vista socio-educativo se beneficie de poder seguir con su grupo de amigos”.

La consejera cree que será una manera de evitar que se repitan casos como el de Miguelturra aunque reconoce que “desde el punto de vista del docente es complicado, por el elevado número de alumnos en las aulas, atender a las necesidades especiales en 50 minutos”.

Preguntada por si su departamento tiene intención de reforzar la atención a este tipo de alumnado, Estévez confirma que así será. “Sí, tienen que recibir más apoyos. Existe una figura que es la del profesor de Pedagogía Terapéutica (PT). Donde más problemas tenemos es en Secundaria porque el desfase en el progreso es mayor. Necesitan un refuerzo académico”.

Explica que en el presente curso Educación ha sido “muy sensible” a esta problemática a través del servicio de Atención a la Diversidad pero, aclara, “no damos recursos de forma arbitraria y apostamos por ganar en atención precisa de lo que se necesita en cada caso. No le puedes dar de menos pero tampoco de más porque creas un bastón que no fomenta la autonomía”. Anuncia que la partida destinada a la atención a la diversidad se incrementará en los presupuestos de este año 2016 pero, comentaba, “aún no sé decirle en cuanto”.