“Todo habrá valido la pena si conseguimos el hito de una renta garantizada como derecho subjetivo”

José García Molina (Barcelona, 1969) hace balance de los tres últimos años, los más intensos en su corta vida política a la que llegó, dice, por el “trauma” de la legislatura en la que gobernó Dolores de Cospedal.

Han sido meses de tira y afloja con los socialistas con los quienes ahora comparte “gobierno”. Un término que ya no le cuesta tanto pronunciar como hace algunos meses y al que llegó en mitad de las críticas de un sector de Podemos, los Anticapitalistas. Unas críticas que se mantienen y que se agudizan conforme llega el momento electoral regional. Son sonadas sus discrepancias con David Llorente.

En una entrevista hablamos del papel de Podemos en el Gobierno regional, de su relación con el diputado de Podemos por Guadalajara, de las confluencias electorales para dentro de un año y hasta del polémico chalet de Iglesias y Montero.

Tercer año de una legislatura con dos partes muy diferenciadas para Podemos dentro y fuera del Gobierno. ¿Cuál es su balance?

Creo que en algunas cosas no se diferencian tanto. Es verdad que estar en el legislativo y en la oposición tiene protocolos y retóricas concretas en el debate. Uno habla básicamente en nombre de su partido y de la gente que le vota. En el gobierno el papel es distinto.

Son dos momentos distintos pero las ideas que nos trajeron aquí siguen siendo las mismas. El primer año fue de entendimiento cordial porque había que superar una etapa terrible, la de Cospedal, y había que remar en una dirección. Fue uno de los motivos que me llevó a entrar en política. A muchos nos traumatizó en nuestro trabajo.

Después empezaron las complicaciones con un acuerdo de investidura muy exigente y esperanzador, con incumplimientos sin justificación clara que llevaron a la ruptura.

Un acuerdo de investidura que parece olvidado en buena parte de su contenido…

No, una parte del acuerdo está incorporado a lo que estamos haciendo. Otras se han quedado en el tintero como la modificación del Estatuto de Autonomía que para nosotros es importantísimo. Pero creo que después del momento de inestabilidad, lanzamos el mensaje de que queremos estabilidad pero que las cosas que hemos venido a hacer las podamos hacer. Necesitamos garantías. Y qué mejor garantía que intentar hacerlas nosotros.

Este tiempo ha tenido sus más y sus menos. Era obvio. El balance en general es bueno pero hay que hacerlo cuando acabe la legislatura. Los que hemos venido a hacer se representa muy bien en la Ley de Garantías Ciudadanas. Veremos si nadie pone palos en las ruedas en el trabajo que realizamos a velocidad y compromiso inusitados.

Si lo logramos todo habrá valido la pena. Habremos conseguido un hito que es que haya una renta garantizada en la región como derecho subjetivo.

¿No conseguirlo sería un fracaso del Gobierno PSOE-Podemos?

Habría que analizar por qué no se consigue. Se están dando todos los pasos en tiempo y forma para que sea realidad pero no me gusta lanzar las campanas al vuelo. No tiene por qué haber ningún problema, las cosas se están haciendo con normalidad.

Las condiciones están, tanto para la Ley de Ingreso y Garantías Ciudadanas como la de Participación Ciudadana. Espero que puedan pasar por Consejo de Gobierno antes del verano y que puedan aprobarse en otoño, antes de que lleguen los presupuestos de 2019 porque se necesitan.

¿Qué ha sido lo más difícil de gobernar? ¿Le ha supuesto tragar muchos sapos?

Creo que hay gran diferencia entre gobernar y estar en las Cortes de Castilla-La Mancha. Antes lo decía. Cuando uno gobierna debe hacer el ejercicio de pensar que lo hace para todos. Uno modula su discurso pero no porque deje de creer en lo que piensa.

Me molesta mucho cuando el presidente o los miembros del Gobierno hablan en nombre de su partido. Lo vemos mucho, también a nivel regional. Y la diferencia hay que cultivarla.

¿Ha tenido que nadar y guardar la ropa en su doble condición de secretario general de Podemos y vicepresidente de un Gobierno con el PSOE?

O por lo menos explicar en calidad de qué estaba hablando. Sé que no es fácil pero tenemos que saber hacerlo. Uno no habla igual en el trabajo y en casa. Es sano si no te lleva a renunciar a tus convicciones y yo creo que no lo he hecho.

Pero su compañero David Llorente le ha afeado en ocasiones sus silencios sobre ciertos asuntos: macrogranjas, el proyecto Puy du Fou al que se opone Podemos Toledo, por ejemplo…

No he guardado silencio nunca. Hemos sido muy claros. Y he sido contrario al modelo de las macrogranjas de manera nítida porque hay otro más sostenible, el de granjas medianas que no es tan agresivo con el medio ambiente. Quien me ha querido escuchar, sabe. Quizá alguien que no grite ni haga demasiados espectáculos cuando se posiciona.

Sobre Puy du Fou, uno de los temores es qué pasa con este proyecto si es durante un tiempo un éxito y luego fracasa como tantos y te quedas con una instalación mamotreto de la que nadie se hace cargo. Impacto ambiental, económico y también en la vida de la gente…Suelo ser cauto. Si los proyectos están avalados técnicamente, nunca hay que escupir contra el viento pero han de darse todas las garantías.

¿Le preocupa una posible aportación de fondos públicos?

No suelo posicionarme en temas sobre los que no tengo claridad. Me gustaría que los fondos públicos vayan a la gente que lo necesita, incluso para emprender. En el Consejo de Gobierno comento mi posición, igual que Inmaculada la suya…A partir de ahí, mi posición es que con el dinero público hay que hacer cosas que le sirvan a la mayoría o si no, para los que tienen más dificultades.

El caso de los veterinarios de Incarlopsa, un tema recurrente en las Cortes regionales por parte de su compañero David Llorente… Y ha pedido la dimisión de un compañero suyo en Consejo de Gobierno… caso de los veterinarios de Incarlopsa

Sí, el consejero le ha respondido ya en dos ocasiones. Hay dos versiones. Sinceramente, cuando las cosas se han judicializado, que se cumpla lo que la ley dice. Opinar…No hago como Cospedal: “Esto no es así aunque lo diga un juez”.

Es evidente la falta de sintonía entre usted y Llorente. ¿Cuál fue el detonante?

No creo que haya ninguno. En Podemos tenemos varias formas de ver la política y que se debe hacer. Él se ha posicionado en lugares distintos a los del secretario regional, el Consejo de Coordinación o incluso el Consejo Ciudadano. A quién hay que preguntarle por qué es a él. ¿Por qué se ha posicionado en contra de lo que mayoritariamente se vota en las consultas? O sobre la entrada en el Gobierno...

Estoy muy preocupado por hacer política en Castilla-La Mancha y cuando hay dudas, preguntamos en el Consejo. Y cuándo hay dudas en el Consejo, preguntamos a las bases y votan. Una vez que eso ha pasado, no tengo más que decir. Hago lo que digan las bases y el Consejo Ciudadano.

Pero se ha puesto mucho el foco en David Llorente al ser incluso acusado de prácticas machistas por compañeras de Podemos en las Cortes regionales. Internamente, algunas voces critican cómo se ha manejado este tema desde la Dirección de Podemos. ¿Usted qué opina?acusado de prácticas machistas por compañeras

Desde la Dirección no se ha manejado nada. Hay un problema de algunas trabajadoras. El Consejo Ciudadano o el de Coordinación no tienen nada que ver. Es que no tengo nada que decir. Que se resuelva, espero que bien porque es muy desagradable.

Y las diferencias entre ustedes, aunque estén dentro del funcionamiento democrático de los partidos…¿Les pueden perjudicar de cara a la opinión pública?

No lo sé. Es verdad que uno desearía que hubiera más unidad, no un discurso homogéneo…Me encanta la pluralidad, vengo de la calle, de las Ciencias Sociales y hace mucho que entendí que el mundo es diverso. Pero creo que también hay algo que tiene que ver con la lealtad. Lo que la mayoría dice…Eso es la democracia. Hablo por mí. Yo intento hacer eso.

Siempre se ha preguntado en todo. Y la gente habla claramente. Ahora lo que tendría que hacer todo el mundo es remar en la misma dirección y que los debates sean debates internos. Ante la mayoría, me guste más o menos, hay que asumirlo y no seguir lanzando mensajes que no entiendo a qué vienen.

En cuanto a la acción de Gobierno, ¿satisfecho de lo que se ha avanzado en el ámbito legislativo?

Podría responder al final de legislatura porque también tiene que salir la Ley de Vivienda, la de lucha contra la Violencia contra las Mujeres…O la reforma del Estatuto, no solo la Ley Electoral que es tan desproporcionada que ha hecho que formaciones con gran cantidad de votos no estén representados. Es un atentado a la pluralidad.

Hay que hablar de blindaje de derechos, el agua, la financiación autonómica… Necesitamos un debate sosegado que no se ha dado.Parece que se ha acabado el tiempo de las mayorías absolutas. Se abren tiempos de negociación y debate.

En febrero presentaron su ‘Estrategia 9/19. Medidas para gobernar’ como “agenda social y hoja de ruta” a implementar a través de las decisiones del Consejo de Gobierno. ¿Cuántas de estas medidas han tenido ya algún avance?‘Estrategia 9/19. Medidas para gobernar’

Estamos tan metidos en la Ley de Garantías, la de Participación y el Acuerdo por la Paz y la Convivencia que es verdad que lo he hablado con algunos consejeros pero hemos avanzado poco. Unos las ven con mejores ojos que otros. Es verdad que se empieza a sentir la inercia electoral, cosa que no comparto porque nos queda casi un año y tenemos que sacar adelante muchas cosas. Vamos a seguir insistiendo.

¿Condicionarán su aprobación de los Presupuestos para 2019?

No, más o menos tienen que seguir la senda de los de 2018. Hay que aprobar la Ley de Garantías que es el plato fuerte. El resto, si tienen cabida, los propondremos. En verano conoceremos la disponibilidad presupuestaria y veremos a qué se destina.

“El PP está siempre en una lógica destructiva que no creo que entienda ni su electorado”

¿Cómo definiría el papel del PP en esta legislatura?

Coincido con lo que dijo María Díaz hace poco. Están desorientados y desbordados. Los espectáculos absolutamente lamentables que estamos presenciando en las Cortes…Un día creo que hablamos de ‘kale borroka’ parlamentaria. Como mínimo es extraño porque no están haciendo aportaciones a ninguna ley importante. Están siempre en una lógica de oposición destructiva. No he visto al PP marcar ninguna política y últimamente menos. Se han lanzado por una pendiente infame. No creo que ni su electorado lo entienda.

¿Y el del PSOE?

Creo que su papel se ha limitado a sostener al Gobierno. Podrían haber sido más ambiciosos en las políticas sociales y públicas en general. La entrada de Podemos en el Gobierno creo que ha hecho que el PSOE haya tensado su posición. Algunas cosas si no estuviéramos, no las harían. Me gustaría que el PSOE pudiera recuperar valores que le hicieron un partido progresista.

En los mentideros hay apuestas sobre cuándo volverán a plantear una ruptura con García-Page para tomar impulso (y distancia) electoral. ¿Usted qué dice?

¿Y cómo están las apuestas? (risas). Por apostar algo yo también….Nuestra intención, si se cumplen los acuerdos, es seguir. Cuando dijimos que íbamos a generar estabilidad…Luego los ciudadanos que decidan con su voto. No entiendo por qué estropear las cosas que funcionan.

¿Lo que ha ocurrido a nivel nacional, con la moción de censura, les puede condicionar a usted y a Emiliano García-Page?

Creo que no. No debe hacerlo. Me gustaría pensar que se generase un gobierno muy distinto al del PP. Lo importante es que los hitos que nos hemos marcado en la política regional se cumplan. De momento no nos va mal. Muchos colectivos nos dicen que lo de Castilla-La Mancha es lo nunca visto.

Las Elecciones Autonómicas y Municipales

Unidas Podemos-IU-Equo, la marca electoral que propone Podemos para 2019 ¿Le cuadra para Castilla-La Mancha después de experiencias similares como Ganemos o Ahora?

La confluencia me cuadra siempre pero la pregunta es para qué. Tenemos situaciones muy distintas en Castilla-La Mancha a muchos niveles. Lugares con más o menos potencia, pueblos pequeños donde será casi imposible generar listas…Después de las primarias en cada partido se irá configurando. Creo que debemos trabajar todos por encontrar el lugar que nos haga sentir cómodos a todos.

¿Ve viable la fórmula de primarias conjuntas con otras fuerzas políticas? ¿Ha hablado ya con IU de este tema? ¿Con Equo?

No, aquí no lo vamos a hacer. Cada partido tiene que hacer las suyas, al menos a nivel regional.

¿Cómo resolver un candidato autonómico único?

Es lo que tendremos que negociar. Ya se han iniciado las conversaciones. María Díaz está en ello. Hasta donde lleguemos está por ver.

¿Se plantea volver a presentarse?

Mi deseo si todo va bien es seguir. Luego la gente vota y te dice sí o no. Lo que percibo es que la gente tiene ganas de que sigamos, hablo de equipo, no de José García Molina. A ver qué pasa.

Las encuestas hablan de Ciudadanos como fuerza emergente en el Parlamento regional que puede ser decisoria en el futuro Gobierno de la Junta. PP y PSOE ya hablan de ‘entenderse’ con la formación naranja. ¿Le preocupa?

No, eso es una decisión del PSOE, legítima. Ellos sabrán el tipo de política que quieren hacer y con quién quieren entenderse. Habrá una aritmética parlamentaria y como no habrá mayorías, cada cual deberá decidir.

En cuanto al PP, se evita hablar del candidato o candidata a la Presidencia de la Junta. ¿Por dónde cree que pasa su estrategia?

No tengo ni idea. Yo creo que es que no quieren presentar a nadie. Todos están haciendo méritos para no venir de candidato o candidata. Es un tema del PP y supongo que presentarán a quien crea que tenga más posibilidades. Me encantaría poder tener un debate electoral con María Dolores de Cospedal.

¿Repetiría en un Gobierno conjunto con García-Page?

Depende. De los números, el programa y para hacer qué.

El chalet de Pablo Iglesias e Irene Montero

¿Cuál es su opinión sobre el chalet de Pablo Iglesias e Irene Montero?

No lo he visto. Como no estoy en esa situación…

¿Ha faltado coherencia entre el mensaje y el hecho, como dicen algunos, incluidos miembros de Podemos?

No, creo que las cuestiones privadas deberían ser privadas. Le hacemos todos un flaco favor a la política convirtiendo cosas de la vida privada, cuando no hablamos de ninguna ilegalidad sino de una elección personal, en una especie de gran show, entre el linchamiento público, la moralina menos reflexiva…

Hablamos a veces del descrédito de la política. No me extraña que con cosas como estas la gente desconfíe. Esto no ha pasado con nadie más. No entiendo por qué o a lo mejor sí, y con esta virulencia.

¿Era para tanto como para hacer una consulta a las bases?

Hay dos formas de mirarlo. Somos el partido más democrático con diferencia. Si lo que hacemos lo hacemos tan mal, si estamos deslegitimados, pues preguntamos. Me gustaría que otros políticos tuvieran el coraje que tenemos nosotros. Algunos no lo van a hacer nunca. Insultarán desde su tribuna pero sin ponerse nunca en juego.

¿Y usted que votó?

El voto es secreto pero, vaya, era evidente.

¿Cree que el resultado con un tercio de votos en contra despeja cualquier duda?

Lo importante es haber hecho la consulta y una mayoría muy amplia ha dicho: “Tiremos para adelante”. La discrepancia va a existir siempre. Y me parece buena si se sabe canalizar bien. A veces no lo hacemos.