Roberto Polo: “La belleza hay que compartirla, te lo enseña la propia belleza”

Se define como “un amante de la belleza” que se irá de la vida como todos, con las manos vacías, pero que quiere dejar un legado para que todos puedan compartir su pasión. El nombre de Roberto Polo, desconocido todavía para muchos, va a empezar a sonar con fuerza especialmente a partir de 2018, año en el que el Gobierno regional tiene la intención de abrir los dos espacios que acogerán su colección de arte moderno y contemporáneo: el Museo de Santa Fe de Toledo y el Archivo Provincial de Cuenca.

“Yo no busqué a España, pero España me encontró a mi”, dice Polo a eldiarioclm.es. Precisamente, sus orígenes familiares parten de Galicia, donde vivía su bisabuelo, “conocido como el maestro Chané”, a quien en próximas fechas le realizará un homenaje la Xunta de Galicia. “Desde allí mi familia se trasladó a Cuba, donde yo nací. Tras la revolución, finalmente nos trasladamos a Estados Unidos, donde me formé académicamente desde los ocho años. Estudié en varias instituciones, entre ellas la Columbia University”, explica Roberto Polo.

Desde muy joven se ha sentido atraído por el arte y la belleza, y ha coleccionado toda su vida. “Desde que siendo joven trabajé en la Phillips Collection me cautivó la idea de empezar a coleccionar. Formar una colección ha sido una tarea complicada, porque solo busco la excelencia”, apunta el mecenas. “Esta colección está creada con conocimiento y pasión, para ponerla en pie he tenido que renunciar a muchas cosas”. Un camino difícil, apunta Polo, ya que en muchas ocasiones no ha sido fácil hallar las obras que necesitaba la colección para que fuese “rigurosa”.

La Colección Polo, avalada por los más prestigiosos especialistas internacionales, está compuesta por cerca de 7.000 obras y su aportación a España y sus colecciones supone cubrir una laguna en palabras de Daniel Alcouffe, conservador-jefe honorario del Museo del Louvre: “la posibilidad de acceder a una época, especialmente la de vanguardias centroeuropeas y de Europa del Este y del Norte, que no está presente en los museos españoles, de la misma manera que, en su día, el Museo Thyssen-Bornemisza cubrió otro gran vacío con sus colecciones”.

Tras las reuniones mantenidas durante los dos últimos años entre el filántropo cubano-estadounidense y el Gobierno de Castilla-La Mancha, esta “prestigiosa” colección tendrá como destinos definitivos Toledo y Cuenca, “lo que supone una de las operaciones culturales más importantes de España en los últimos años”. “Toledo y Cuenca son dos ciudades maravillosas, patrimonio de la humanidad. Toledo es una ciudad ligada a la cultura, a la convivencia, a la riqueza intelectual pero que no tenía importantes conexiones con el arte contemporáneo internacional”, señala Roberto Polo. Respecto a Cuenca también apunta a que es una ciudad referente en el arte español, “pero le faltaba el contexto internacional, que gracias a este proyecto puesto en marcha por la Junta de Castilla-La Mancha alcanzará ahora”.  

Pero, ¿Qué nos vamos a encontrar en esta colección que llegará a Toledo y Cuenca? Roberto Polo asegura que la colección la componen alrededor de 7.000 piezas que comienzan a finales del siglo XIX hasta la actualidad. “Es una colección amplia, por lo que su procedencia es muy variada, desde sonadas subastas hasta compras a herederos de los artistas. Actualmente están fuera de España, pero pronto una importantísima selección estará en Toledo y Cuenca”.

7.000 piezas elegidas por el propio coleccionista, bajo dos premisas: la mirada y la pasión, dos ingredientes “imprescindibles”, por el propio Roberto Polo a la hora de comprar una obra. De hecho, nunca se ha arrepentido de comprar ninguna de sus obras pero si de haber vendido alguna, “aunque si lo he hecho fue para comprar otras piezas que también me han hecho muy feliz. Donde muchos no intuían que había talento, yo lo descubría”.

Eso sí, no podría quedarse sólo con una obra de la colección. “Eso es como preguntar a un padre cuál de sus hijos es el favorito. Es imposible de contestar. Me gusta cada una de las piezas de mi colección, cada una de ellas tiene una historia ligada a mi vida”. 

Por último, también ha querido hacer una valoración positiva sobre la apuesta del Gobierno de Castilla-La Mancha por impulsar una ley de Mecenazgo que regulará iniciativas de patrocinio dentro de la industria cultural. “Me parece una noticia fantástica que demuestra el gran compromiso y sensibilidad por la cultura que tiene la Junta. Es la manera de avanzar hacia el futuro, como ya han hecho otros países”.  

Por el momento, habrá que esperar para conocer la fechas exacta en la que se expondrá esta colección en Toledo y Cuenca. El presidente regional, ha anunciado que el Gobierno está trabajando para que Cuenca, acoja una exposición que exhiba, con carácter previo, lo que será la llegada de la colección de arte de Roberto Polo a la ciudad. “La Viceconsejería de Cultura ya está trabajando para concretar esta posibilidad, pues hay mucha gente que ve esto en los medios de comunicación, pero no es consciente de la envergadura del proyecto” apunta García-Page.

El currículo filantrópico de Roberto Polo es extenso e intenso: es patrono de The Metropolitan Museum of Art de Nueva York, Gran Mecenas del Museo del Louvre, Commandeur des Arts et Lettres de Francia, patrono de la iniciativa norteamericana Save Venice Inc. (que, hasta la fecha, ha donado más de 25 millones de dólares para preservar el patrimonio artístico de Venecia), patrono de The New Art Gallery (Walsall), mecenas “Platinum” del Museo de Artes Decorativas de París, “Gran Mecenas” del Musée Condé (Château de Chantilly), mecenas del Théâtre Royal de la Monna en Bruselas y “Gran Mecenas” de los Musées royaux d’Art et d’Histoire de Bélgica.

Entre sus muchas donaciones, algunos museos han querido reconocer públicamente su acción filantrópica, y entre ellos está la Maison européenne de la photographie, Minneapolis Institute of Arts, Philadelphia Museum of Art, Musée Horta (Bruselas), The Nelson-Atkins Museum of Art (Kansas City), Carnegie Museum of Art (Pittsburgh), The Museum of the History of Polish Jews (Warsaw), National Museum (Gdańsk), y el londinense Victoria and Albert Museum.