El arquitecto Jean Nouvel presenta en París su “rosa del desierto”

El arquitecto francés Jean Nouvel presentó hoy en París su nueva megalómana creación, el Museo Nacional de Catar en Doha, que abrirá sus puertas el 28 de marzo de 2019 con un diseño inspirado en la rosa del desierto.

Nouvel, que ha trabajado en el proyecto desde 2010, encontró su musa arquitectónica catarí en esta roca sedimentaria que se cristaliza en formas que recuerdan a la de una flor.

“Basando mi proyecto en este símbolo nacional, creado de manera aleatoria pero siempre bajo las mismas reglas, quise dar cuenta de la dimensión ancestral y del dinamismo actual de Catar”, destacó Nouvel en la presentación ante los medios.

Con la superposición de discos que evocan estas cristalizaciones, el arquitecto conocido por edificios emblemáticos como el Museo Louvre de Abu Dhabi o la Torre Agbar de Barcelona, pretende conectar el pasado y el presente de este país del Golfo Pérsico.

“El museo permitirá a los visitantes conocer mejor la histórica cultura beduina y la modernidad global de la sociedad catarí, además de contribuir a un mejor entendimiento entre naciones”, afirmó el embajador de Catar en París, el jeque Ali Bin Jassim Al Thani.

El museo, construido a base de acero y hormigón, recorrerá la historia de Catar desde 700.000 años atrás hasta la actualidad con colecciones antiguas, obras contemporáneas de artistas nacionales e internacionales, objetos preciosos y fondos documentales.

Las otras cifras del museo son igualmente vastas: 52.000 metros cuadrados de superficie útil, 7.000 de los cuales para exposiciones permanentes y 1.700 dedicados a muestras temporales, además de un auditorio de 200 plazas y un centro de investigación.

Uno de sus puntos fuertes, según señaló la especialista del museo Karen Exell, será la interactividad con el visitante, que podrá contemplar centenares de ejemplares de animales autóctonos mientras escucha los sonidos de su hábitat natural.

Aunque su inauguración estaba prevista originalmente para abril de 2015, un incendio menor y la instalación de piezas de arte obligaron a retrasar la fecha.

La alusión al desierto se refleja también en un parque de 112.000 metros cuadrados que rodea el edificio y que reinterpreta el árido paisaje del país y en los pabellones interiores, inspirados en los caravasares, una antigua edificación propia de Oriente Medio donde las caravanas paraban para descansar y pernoctar.

Teniendo en cuenta el clima intenso de la región, Nouvel ha previsto numerosos espacios con sombra y ha pensado para los jardines en plantas autóctonas como el árbol Sidra, el nacional de Catar, con bajo consumo de agua.

El edificio se erige alrededor del palacio restaurado del jeque Abdullah bin Jassim Al Thani, hijo del fundador del Catar moderno, que fue el hogar familiar y la sede del gobierno durante 25 años.

El Museo Nacional de Catar ha contado con un presupuesto de 434 millones de dólares (382 millones de euros) y el patrocinio del emir del país, Tamim bin Hamad bin Khalifa Al Thani, quien inaugurará el complejo el próximo año.