La investidura de Fernández Mañueco marca el arranque al primer bipartito en Castilla y León
La investidura de Alfonso Fernández Mañueco (PP) marcará el arranque del primer gobierno bipartito de Castilla y León. Ciudadanos, con la Portavocía de la Junta y la Vicepresidencia concentradas en Francisco Igea, intentará poner fin a la hegemonía que el Partido Popular siempre ha tenido en la Comunidad.
Queda por determinar quiénes estarán al frente de las consejerías de la Junta. De momento, la decisión de las direcciones nacionales de ambos partidos ha tumbado una de las muchas pretensiones de Igea: el veto a destacados políticos del PP salpicados por la Operación Enredadera –el hasta ahora consejero de Fomento, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y el ya exalcalde de León, Antonio Silván–. Cada partido va a nombrar a sus consejeros sin que el otro pueda intervenir. Además, las dos formaciones tendrán que resolver la paridad en el Gobierno. En las comisiones negociadoras no hubo una sola mujer.
En el caso de Ciudadanos, las propuestas pasarán por el comité nacional de nombramientos. El que ya está prácticamente descartado es el del exparlamentario Manuel Mitadiel, el único integrante del grupo parlamentario que apoyó a Igea cuando decidió presentarse a las primarias. Mitadiel, a quien algunos medios señalaron como futuro consejero de Sanidad, es quien firmó, en representación de Ciudadanos, la denuncia que todos los grupos de la oposición presentaron a la Fiscalía Anticorrupción por los delitos presuntamente cometidos durante la construcción y posterior gestión del Hospital de Burgos.
Este lunes, Francisco Igea descargaba toda la expectación en el debate de investidura en el futuro presidente. “Es a Fenández Mañueco a quien hay que escuchar”, dijo a la prensa. La jornada de este martes será intensa: arrancará a las 11 de la mañana con el discurso del futuro presidente, que no tendrá límite de tiempo.
Así, no será hasta las 16:00 horas cuando los demás grupos intervengan. El primero de la tarde será el Grupo Parlamentario Socialista, con 30 minutos de intervención. Le seguirá el Grupo Parlamentario Mixto, integrado por cuatro formaciones y que tienen que repartirse la media hora de la que disponen. La primera será el partido local Por Ávila (XAV). Pedro José Pascual Muñoz dará un discurso de 6 minutos, al igual que Luis Mariano Santos, de Unión del Pueblo Leonés (UPL), y Jesús García Conde del Castillo (Vox). Al tener mayor número de diputados, dos, Pablo Fernández, de Podemos, tendrá una intervención más larga, de 12 minutos.
Ciudadanos y el Partido Popular, los últimos en intervenir, contarán con media hora cada uno para explicar su programa de gobierno. Alfonso Fernández Mañueco podrá hacer uso de la palabra cuantas veces lo solicite. Cuando conteste individualmente a uno de los intervinientes, éste tendrá derecho a réplica por 10 minutos. Si el candidato les contestara de forma global, cada uno de ellos tendrá derecho a una
réplica de diez minutos. En el caso del Grupo Mixto, este tiempo estará
repartido en 2 minutos de réplica para cada interviniente, excepto para
Juan Pablo Fernández Santos, que dispondrá de 4 minutos.
En cuanto a la hora en la que producirá la votación, se conocerá al inicio de la sesión de la tarde y la anunciará el presidente de las Cortes, Luis Fuentes (Ciudadanos).
Según el artículo 17.3 del Estatuto de Autonomía de Castilla y León, para ser elegido presidente Alfonso Fernández Mañueco deberá obtener la mayoría absoluta en primera votación, algo que se da por seguro al sumar el PP sus 29 escaños a los 12 de Ciudadanos. Pero el voto es secreto, lo que implica la posibilidad de que algún diputado se salte la disciplina de partido. En el caso de que no se alcanzase la mayoría absoluta, la Mesa de las Cortes, oída la Junta de Portavoces, fijará el momento de la segunda votación, y el candidato resultará elegido si obtuviese el voto favorable de la mayoría simple.
Antes de proceder a esta votación, el candidato podrá intervenir por tiempo máximo de diez minutos y los grupos parlamentarios por cinco minutos cada uno para fijar su posición.
Una vez nombrado Fernández Mañueco, cosa que ocurrirá con toda probabilidad en la primera vuelta, empezará a configurarse el primer gobierno a dos en Castilla y León. El PP seguirá al frente de la Junta 32 años después.
