España, entre los países europeos con más mujeres “inactivas” debido a los cuidados no remunerados
Los cuidados no remunerados lastran la incorporación de las mujeres al mercado formal de trabajo. En España esta “carga” es mayor que en otros países de su entorno como determinante para que las mujeres no tengan un empleo remunerado. Según un estudio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el 25,1% de las mujeres inactivas en España afirman que no están disponibles para un empleo ni lo buscan debido a estas tareas de cuidado, lo que sitúa al país como el quinto con mayor porcentaje en la Unión Europea. La media de los 28 países de la UE es del 19,3%.
Los datos corresponden a la investigación El trabajo de cuidados y los trabajadores del cuidado para un futuro con trabajo decente del organismo de las Naciones Unidas. El trabajo de cuidados comprende dos tipos de actividades: aquellas de “cuidado directo”, como dar de comer a un niño pequeño o atender las necesidades de una persona mayor, y las de “cuidado indirecto”, como cocinar y limpiar.
Estas actividades son reconocidas como “trabajo” por la organización internacional desde 2013, y por tanto estudiada en sus análisis estadísticos, pero la mayor parte de las necesidades de cuidado en el mundo las asumen personas –mayoritariamente mujeres– que no cobran ni reciben ninguna remuneración por ello.
Y no solo son un trabajo extra para muchas mujeres tras sus jornadas de trabajo remunerado, sino que el factor “cuidados” se erige como “el principal obstáculo para la participación de las mujeres en los mercados de trabajo”, explica la OIT.
Motivo para no tener trabajo remunerado
Los datos de media mundial de la OIT sitúan los cuidados no pagados como la causa más alegada por las mujeres (41,6%) para justificar por qué permanecen fuera de la fuerza formal de trabajo, mientras que los hombres inactivos solo la señalan en un 5,8%.
En el caso de los varones, el principal motivo para estar inactivos son los “motivos personales” (44,1%), en los que se incluyen “estar estudiando, enfermo o tener discapacidad”.
La investigación muestra que en general los cuidados son la principal motivación de las mujeres para quedar fuera del mercado laboral, excepto en los países con altos ingresos. En este grupo, en el que se incluye España, las tareas de cuidados en el hogar siguen siendo importantes, pero pasan a ser la segunda causa que explica la inactividad de las mujeres por detrás de los “motivos personales”.
Aunque en España “los motivos personales” también constituyen el principal motivo (33%) para la inactividad de las mujeres, el porcentaje de las que afirman estar fuera del mercado de trabajo debido a los cuidados en el hogar (25,1%) es muy superior a la media de los países ricos (19,6%) y la de los 28 estados de la UE (19,3%). Las mujeres en España se sitúan en este punto lejos de sus vecinas de Francia (9,8%) y Portugal (13%) y a mucha distancia de los países con menores tasas (Dinamarca, 3,7% y Suecia, 4,5%).
En el caso de los hombres en España, los cuidados son el motivo menos recurrente para justificar su inactividad (2,6%) y en este caso la cifra es inferior a la media de los países ricos (3,4%).
La “penalización” de la maternidad
Las respuestas de las mujeres sobre su situación de inactividad, y las diferencias con los argumentos de los hombres, radican en gran parte en un hecho: la brecha de género en los cuidados. En el presente, las mujeres soportan el 67,6% del total de horas de cuidados no remuneradas en España. En el conjunto del mundo, esta cifra asciende al 76,2% y la OIT destaca que “ningún país registra una prestación de cuidados no remunerados igualitaria entre hombres y mujeres”.
Ellas son las que asumen mayoritariamente estas tareas y las evidencias son múltiples. Por ejemplo, “la penalizacion en el empleo vinculada a la maternidad” que analiza el organismo de la ONU mediante las tasas de empleo de los progenitores de niños con menos de 6 años. En España, la tasa de empleo para las madres con hijos pequeños es del 66%, mientras que las de los padres alcanza el 83%, casi 20 puntos porcentuales por encima.
La directora del departamento de Condiciones de Trabajo e Igualdad de la OIT, Manuela Tomei, destacó este lunes en la presentación del informe como la maternidad supone en muchos países una “penalización” mientras que la paternidad constituye un “premio de inserción en el mercado laboral”: los padres con hijos de menos de 6 años presentan las mayores tasas de empleo, por encima de las que tienen los hombres sin hijos, mientras que en el caso de las mujeres suele ser al revés.
Desde la OIT recomiendan a España avanzar en la inversión en políticas públicas de cuidado, como la ampliación de los permisos de paternidad y la universalización de la escuela de 0 a 3 años, así como impulsar iniciativas privadas para lograr la transferencia de gran parte de los cuidados al mercado laboral remunerado, “pero debe ser un empleo de calidad”, subraya Tomei.