El paro sube en 25.572 personas en septiembre después de seis meses a la baja
El paro registrado ha vuelto a subir: después de seis meses de bajadas –que coincidieron con los que tradicionalmente son los mejores meses para el mercado de trabajo español–, septiembre trajo un aumento de 25.572 desempleados. En términos absolutos, hay 4.724.355 personas apuntadas en los servicios públicos de empleo. La Seguridad Social también perdió afiliados el mes pasado: 22.242, un 0,1% menos que en agosto.
No obstante, es el mejor dato de paro registrado en un mes de septiembre desde 2007. En términos desestacionalizados (eliminando los efectos del calendario), los datos también mejoran su aspecto: el paro registrado baja en 35.631 personas, y la Seguridad Social gana 5.637 afiliados, algo que no sucedía desde abril.
En lo que llevamos de año, la evolución del paro registrado y de la afiliación es dispar. Por un lado, el desempleo ha bajado en 124.368 personas; por otro, la Seguridad Social ha perdido 504.358 trabajadores. Es decir, se han destruido medio millón de puestos de trabajo, pero el paro no solo no ha subido en la misma medida, sino que ha descendido.
Hay que recordar que el paro registrado solo contabiliza a las personas que están inscritas en las oficinas de empleo. Muchas personas están en paro, pero no están apuntadas, por ejemplo, porque saben que no tienen derecho a una prestación por desempleo. También hay que tener en cuenta la significativa caída de la población activa que se está produciendo, que el propio Gobierno ha reconocido, y que afecta a los datos: hay gente que desaparece de los registros no porque haya encontrado un empleo, sino porque abandona el mercado laboral, emigra o trabaja en la economía sumergida.
La evolución de los datos es peor entre las mujeres que entre los hombres: tanto en septiembre como en términos interanuales, el paro femenino sube (un 2,3% respecto a septiembre de 2012) mientras que baja el masculino (un 1,5%). De hecho, la subida de septiembre se concentra íntegramente entre las mujeres.
Esta diferencia se explica, por un lado, en que es el sector servicios -fuertemente feminizado- el que más paro arroja en septiembre y en el último año; por otro, en la destrucción de empleo público, que se ha acelerado en el último año y que afecta especialmente a las mujeres.
Más precariedad y menos protección social
La contratación ha repuntado en septiembre: el mes pasado se registraron 1.392.429 contratos, un 33,5% más que en agosto y un 9,3% más que en septiembre de 2012. Detrás del aumento están los contratos temporales, a tiempo parcial, y de formación.
Los contratos indefinidos representan solo el 7,6% de todos los que se formalizaron en septiembre. En el último año, la contratación estable ha caído un 8,9%, mientras que la temporal ha crecido un 11,1%.
Dentro de los indefinidos, en términos interanuales caen tanto los contratos a tiempo completo como a tiempo parcial. Sin embargo, dentro de los temporales, suben más lo de tiempo parcial (un 11,4%) que los de tiempo completo (un 9%). La última reforma laboral flexibilizó los contratos a tiempo parcial y permitió por primera vez que se les añadieran horas extraordinarias, además de las horas complementarias propias de estos contratos.
Los contratos de formación han crecido un 73% en lo que llevamos de año y los de prácticas, un 23,5%.
La protección social no deja de caer: la tasa de cobertura del sistema fue del 64,4% en agosto (estos datos se ofrecen con un mes de retraso respecto a los de paro y afiliación), tres puntos por debajo que hace un año y lejos del 71% de agosto de 2011.
En agosto, 2.879.784 personas percibían alguna prestación por desempleo, un 0,1% más que en agosto y un 2,7% menos que un año antes. Los beneficiarios extranjeros son solo el 9,8% de todos los perceptores.
El gasto en prestaciones ha bajado un 7% en el último año. También ha caído el gasto medio por beneficiario (un 4,6%); esto quiere decir que las prestaciones que se cobran ahora son, en general, más bajas.