Los fondos de pensiones privados siguen perdiendo partícipes pese a alcanzar una rentabilidad récord en 2019
Ni con rentabilidades récords se supera la sangría de salidas de los planes de pensiones privados, continua desde 2010. El año pasado, el de mayor rentabilidad desde hace 20 años en el sector, como ha destacado este miércoles la patronal Inverco, los fondos de pensiones perdieron 75.041 partícipes, una caída del 0,8%. Desde el año 2010, han salido 1.273.270 partícipes de estas herramientas de ahorro privado para la jubilación.
En total, 2019 cerró con 9.555.911 cuentas de partícipes en fondos de pensiones privados, tras las que se estima que hay siete millones y medio de personas, ya que muchos partícipes tienen abierto más de un plan “con el objetivo de diversificar sus inversiones”, apunta el informe anual de Inverco, la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones.
La patronal ha presentado este mediodía sus resultados de 2019 y sus previsiones para este año. Ángel Martínez-Aldama, presidente de la organización, ha destacado como hecho más relevante que el pasado ejercicio ha sido “excepcional, con muy buenas rentabilidades”, las más altas de las últimas dos décadas. “Lástima que no nos acompañe en las suscripciones”, ha reconocido.
Mientras que 2018 los planes de pensiones registraron una rentabilidad negativa, la de 2019 alcanzó el 8,8%, “la mejor rentabilidad de la serie histórica”. La renta fija, que concentra casi la mitad del total de carteras de fondos de pensiones (45,2%, fue muy inferior: del 0,65% a corto plazo del 2,91% al largo plazo. Las mayores rentabilidades se alcanzaron en los fondos con renta variable, de un 23,6%.
Si se sigue la serie histórica se comprueba que este 2019 ha sido atípico, ya que los fondos de pensiones suelen registrar rentabilidades más modestas. La estimación de la patronal para este año 2020 está situada entre el “2,5% y el 3,5%” de rentabilidad.
Pese a la reducción del número de partícipes, el dinero acumulado en los fondos de pensiones aumentó un 8,4% el año pasado, hasta los 116.419 millones de euros, según los datos de la patronal. Este aumento se debe sobre todo al incremento de la rentabilidad, han explicado los responsables de Inverco, y en mucha menor medida al aumento de las cantidades depositadas por los ahorradores. De hecho, dos de cada tres partícipes no aportan nada de dinero a sus planes.
Para este 2020, la patronal pretende que los fondos de pensiones sumen un total de 120.000 millones de euros, un 3,1% más que en 2019.
Reticencias a la Tasa Tobin
Este 2020 está marcado por la formación del Gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos. Este último, con una postura muy crítica con los fondos privados de pensiones, que considera que no hay que incentivar fiscalmente desde el Estado. El área de pensiones en el Gobierno ha quedado no obstante en manos del PSOE, que ha confiado la reforma del sistema al independiente José Luis Escrivá, exresponsable de la AIReF.
Desde Inverco se han mostrado cautos sobre sus expectativas respecto al nuevo Gobierno, para el que Martínez-Aldama ha pedido “tiempo” para que se compruebe cuáles son las medidas que aplica finalmente el Ejecutivo. “No creemos que sea muy diferente al resto de gobiernos anteriores”, ha respondido el presidente de la patronal sobre la política de fomento del ahorro, “que es cosustancial a cualquier Gobierno”.
La medida que sí está confirmada por la ministra de Hacienda es la implantación de un impuesto a las trasacciones financieras, la llamada Tasa Tobin, a la que se oponen los fondos de inversión. “Ya lo hemos dicho, va a hacer más caro invertir en activos de renta variable españoles”, ha advertido Ángel Martínez-Aldama, que considera que “será un coste adicional para los partícipes.
Dada la voluntad del Gobierno de aprobar el impuesto, la patronal apuesta por que este no se aleje del aprobado en otros países como Francia y, en el mejor de los casos, que se implemente de manera conjunta y conforme en varios estados para no generar diferencias entre países.
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