El comisario Herranz Torrubia, nuevo jefe de la Policía Nacional en Euskadi

El comisario principal Jesús Herranz Torrubia es el nuevo jefe superior de la Policía Nacional en Euskadi en sustitución de José Moisés Pérez Cornejo. La toma de posesión ha estado presidida por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y en ella el delegado del Gobierno de España, el socialista Denis Itxaso, ha afirmado que la eficacia de la labor de este cuerpo en esta comunidad autónoma “es reconocida por la sociedad vasca”, que “no distingue entre uniformes” si se es capaz de “resolver sus problemas”. También ha señalado que es “la coordinación y el contacto permanente” entre diferentes cuerpos policiales lo que conduce “al éxito o al fracaso en materia de seguridad”. Itxaso ha pedido al nuevo mando policial en su intervención “trabajo, diálogo y consenso” con todas las instituciones y colectivos sociales para trabajar por una sociedad “más justa, tolerante e igualitaria”.

El acto, que se ha desarrollado en la jefatura Superior de Policía de Basauri, ha contado con la presencia del director general de la Policía Nacional, Francisco Pardo, del director adjunto operativo, José Ángel González, del general-jefe de la Guardia Civil en la región, Antonio Campos, y del jefe de la Ertzaintza, Josu Bujanda, así como de representantes de Defensa, miembros de la judicatura y los tres subdelegados del Gobierno en las provincias vascas.

Itxaso ha agradecido la labor de Pérez Cornejo, así como su “lealtad, profesionalidad y colaboración en muchos niveles, especialmente en estos últimos dos años marcados por la emergencia sanitaria”, y ha dado la bienvenida al comisario Jesús Herránz Torrubia, quien ingresó en 1981 en la Policía Nacional y cuyo primer destino fue precisamente Euskadi. En 1988 se incorporó a la Unidad de Intervención Policial de Valencia, donde ascendió a inspector jefe. Desde entonces ha subido “peldaños en una trayectoria jalonada con varias condecoraciones, entre ellas la Cruz al Mérito Policial con distintivo rojo y tres Cruces al Mérito Policial con distintivo blanco hasta su último destino, la Jefatura Superior de La Rioja, donde se encontraba hasta su nuevo nombramiento a mediados de noviembre”. “Cuarenta años después vuelves de nuevo a una comunidad que te costará reconocer desde aquellos lejanos y sombríos años 80 sacudidos por el terrorismo de ETA”, le ha dicho. Y ha seguido: “ETA ya intentó expulsar a la Policía Nacional y a la Guardia Civil de nuestra sociedad durante una etapa tenebrosa que conociste”. Acto seguido, ha recordado a los 112 agentes de este cuerpo asesinados.

Herranz Torrubia ha afirmado que asume su cargo con responsabilidad, entrega y humildad para trabajar, “como un vasco más” en el mejor servicio público a esta comunidad. Tras recoger el bastón de mando en sustitución de su predecesor Pérez Cornejo, Herranz ha señalado que afronta este nuevo cargo “con ilusión”, porque supone su regreso al lugar donde dio sus primeros pasos como policía en 1981. Años, ha añadido, que vivió “con intensidad y a la que regreso ahora, afortunadamente, sin la presión terrorista de aquellos años”. En este punto ha pedido a sus nuevos subordinados “compromiso sin ambages” en la defensa de la seguridad porque la Policía Nacional “ha demostrado en esta tierra hasta dónde llega su capacidad de entrega y sacrificio”.

Tras recordar también a las víctimas de ETA, en sus primeras palabras como nuevo jefe superior, ha remarcado que hay “mucho trabajo por hacer porque vivimos tiempos complejos con grandes retos en materia de seguridad pública, terrorismo, crimen organizado, ciberdelincuencia narcotráfico, tráfico de personas, que exigen prevención, investigación y anticipación. Ha mostrado también su ”predisposición a colaborar con Ertzaintza, Policías Locales y Guardia Civil para alcanzar mayores techos de seguridad. “Creo firmemente en la necesidad de sumar esfuerzos para servir a los ciudadanos, para lo que debemos realizar entre todos un proyecto de trabajo en colaboración moderno, también desde la colaboración internacional coordinada, de cara a lograr eficacia mayor en un mundo donde la seguridad y el delito no tienen fronteras” ha detallado. “Desde hoy, como un vasco más, espero trabajar y estar a la altura del cuerpo de policía y lo que se espera de mi, conduciéndome con entrega y lealtad en el mejor servicio publico a esta comunidad”, ha concluido.