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La vacuna erradica la COVID-19 de las residencias vascas después de 1.053 fallecimientos

Personal de los Bomberos, desinfectando la residencia Berra de Donostia en la primera ola

Iker Rioja Andueza

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La batalla ha sido ganada, aunque con resultado pírrico. La llegada de las vacunas contra la COVID-19 ha dejado este viernes 13 de marzo de 2021 un titular histórico en Euskadi: no queda ni un solo caso activo de coronavirus en ninguna de las residencias vascas. Este viernes se ha confirmado la recuperación satisfactoria de los tres últimos positivos, todos de la residencia de Yécora, en la Rioja Alavesa, el último de los brotes activos y que surgió precisamente después de administrada la vacuna de Pfizer. La pandemia ha durado un año y unos pocos días.

La importancia de la desaparición de la enfermedad de estos recursos asistenciales se mide en el efecto devastador que ha tenido desde que Esteban, un octogenario natural de Amurrio interno del centro de Sanitas en el barrio de San Martín de Vitoria, fuese el primero en contraer el Sars-Cov-2 a primeros de marzo de 2020. Según las estimaciones de este periódico -nunca ha habido un recuento oficial-, 1.052 mayores y un trabajador de una residencia de Vitoria han perdido la vida, lo que equivaldría el 27% de las 3.912 defunciones conocidas hasta ahora durante la pandemia. Son 522 vizcaínos, 322 guipuzcoanos y 209 alaveses, aunque hay al menos 34 casos sospechosos más de los primeros meses. A partir de ahí, no hay más datos. No se sabe su edad ni la proporción de hombres y mujeres. Sí que es público que muchos han fallecido en los propios centros, sin llegar a ser hospitalizados.

A falta de los datos completos, son tres residencias guipuzcoanas las que más decesos han acumulado: Iturbide de Arrasate-Mondragón registró 26 en la primera, San José de Ordizia 25 también entonces y 24 en GSR Debagoiena de Aretxabaleta, repartidos en ambas fases de la pandemia. Se pueden consultar aquí datos centro por centro y por territorios, un estudio fruto de 431 actualizaciones con base en los partes de las diputaciones de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa, así como del Ayuntamiento de Vitoria y de la Diócesis de Álava.

Si hace unas semanas Bizkaia y Gipuzkoa quedaron ya sin casos de COVID-19, el brote de Yécora ha retrasado unos días el fin definitivo de la pandemia en las residencias vascas, con prácticamente el 100% de los usuarios y trabajadores protegidos. Con todo, el diputado alavés de Políticas Sociales, Emilio Sola, ha acompañado la noticia de una advertencia sobre “la importancia de no bajar la guardia ahora”. “Tenemos que mantener las medidas preventivas de distancia física y de uso de mascarillas y geles para que el virus no vuelva a entrar en los centros”, ha enfatizado. En verano ya hubo algunas semanas sin positivos, pero el virus se coló de nuevo en agosto en el complejo Hermano Garate-San Ignacio de Donostia.

Sola -que popularizó la frase de “prefiero mayores tristes que muertos” para justificar algunas medidas duras para proteger a los ancianos del coronavirus-, ha felicitado también el comportamiento de los usuarios de las residencias, que han vivido un año semiencerrados y con muchas menos visitas. Cientos o miles de trabajadores de estos centros también se han contagiado, aunque tampoco hay estadísticas oficiales. Este periódico ha calculado en 7.708 los casos totales en un colectivo de unos 20.000 mayores residenciados.

Precisamente este viernes el Gobierno de Iñigo Urkullu ha hecho público un informe sobre el aniversario de la declaración de la emergencia sanitaria y del estado de alarma. En él hay un apartado para las residencias, pero no incorpora ningún dato más allá de la constatación de la “desgarradora y dolorosa” situación vivida. Se añade que el “marco de coordinación” entre el Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) y las diputaciones ha conseguido “reducir y acotar mes a mes el impacto inicial”. Destaca como una de las claves de la gestión la existencia de centros de referencia para derivar los casos más leves y garantizar el adecuado aislamiento de los positivos, así como para aliviar la presión hospitalaria. Han sido siete los centros de este tipo y han acogido a 1.521 mayores.

En nuestros especiales interactivos, se pueden consultar todos los datos sobre la evolución de la pandemia en Euskadi, sobre los positivos y fallecidos en todas y cada una de las residencias de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa y el avance día a día de la campaña de vacunación

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