‘Los Yunteros de Extremadura’, un documental inédito que narra la miseria del campo en los 30
“Curtidos en el campo, del color de la tierra, rudos, veteranos (…) Solo a fuerza de labrar una y otra vez la yunta deja la tierra en condiciones de producir”.
Así describe la película ‘Los Yunteros de Extremadura’ las duras condiciones de vida de los jornaleros de los años 30. Se trata de un trabajo documental inédito, perdido y desconocido hasta 2012, que grabó Francisco González de la Riva, Marqués de Villa-Alcázar, para el Instituto de Reforma Agraria de la Segunda República.
Tiene un gran valor histórico porque es el único documento audiovisual de la época del que se tiene constancia que trate la problemática de los yunteros. Aborda el conflicto latente del campo extremeño y lo hace con un afán didáctico. “Se dirige a un público analfabeto para mostrar la miseria, el hambre que se pasa en el campo extremeño, explica Ángel Olmedo, de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica en Extremadura.
La Diputación de Badajoz y la asociación de memoria extremeña proyectan este documento inédito en 10 localidades de la provincia, dentro del proyecto “Extremadura en el espejo de la memoria”. La iniciativa conmemora el 80 aniversario de la Guerra Civil española y la recuperación, conservación y difusión del documental ha sido posible gracias a la Filmoteca de Extremadura.
¿Cómo aparece?
Durante la guerra civil la oficina de propaganda republicana en París pidió material audiovisual para la defensa de la causa republicana. Parece que “Los Yunteros de Extremadura” fue uno de los documentales enviado, detalla el colectivo extremeño de memoria histórica. Al finalizar la guerra es probable que fuera depositado en la Embajada rusa en París y posteriormente enviada desde allí a Moscú.
En 2012 la Universidad Estatal Rusa de Humanidades entregó a la Xunta de Galicia un DVD con el título ‘The Documentary Film-chronicle of Spain (1936-1939)’. Un documento de 36 minutos de imágenes que contenía dentro el documental de los yunteros extremeños, que aparece sin los créditos finales.
¿Qué muestra?
Ofrece una visión antropológica del problema de la tierra en Extremadura. Se rodó entre marzo y mayo de 1936 y aborda la dureza de la vida en el campo y el hambre.
Así muestra detalles de las viviendas y de las carencias de los jornaleros para fijarse en la vida de niños y ancianos. Una de las escenas muestra la alegría de una familia que va a comer carne porque han encontrado un cerdo muerto de rabia.
Narra también la presencia de nueve matrimonios que habitan en la misma casa de la Extremadura rural, acompañados de un viejo candil y un agujero como modo de ventilación. Otros que lo hacen directamente lo hacen en chozos, “como los pastores de la Biblia”.
El trabajo audiovisual aborda cuestiones como la distribución de las rentas obtenida de la tierra, y cómo los beneficios se van fuera de la región, a manos de grandes terratenientes. En el análisis, más detalles como las herramientas de los labradores, con yuntas completamente rudimentarias, los mismos aperos que dos milenios atrás utilizaban los romanos.
Analiza las causas de tanta miseria, para fijar la mirada en aquellos pueblos metidos en grandes fincas abandonadas, que no se labran y que solo sirven para alimentar a los animales, mientras “el pueblo sin jornales, ahogado por falta de tierra vive en la miseria”.
Una visión institucional del problema
Algunos han hecho comparaciones con este documento con ‘Tierra sin pan’, que graba Luis Buñuel en Las Hurdes, aunque no son documentos comparables porque el de los yunteros lo graba un organismo oficial, en este caso la II República.
Así lo explica el historiador Ángel Olmedo, que apunta que aunque sí se muestra la problemática del campo, no hace lo mismo con las reivindicaciones que se dan en aquella época en el campo. El documental no hace alusión a las ocupaciones de los campesinos y la lucha por cambiar la situación de miseria que se está narrando.
Siendo un documento elaborado por la II República, no deja de ofrecer una visión institucional del problema, sin mostrar por ejemplo las ocupaciones colectivas del 25 de marzo de miles de yunteros que se echan al campo. Sin embargo es un trabajo que coincide en el tiempo con las ocupaciones campesinas.
Hay que tener en cuenta que en este contexto se trata de una cuestión que desborda los cauces institucionales.
Perdido hasta 2012
‘Los Yunteros de Extremadura’ es un documento perdido hasta 2012 y un trabajo completamente desconocido hasta entonces. De hecho su autor, Francisco González de la Riva, Marqués de Villa-Alcázar, ni siquiera reivindica su autoría. Quizás también porque poco tiempo después éste se pasó al bando de los sublevados cuando comenzó la guerra, y con ellos continuó realizando documentales durante la dictadura franquista.
La Asociación de Memoria Histórica de Extremadura recuerda las palabras del autor, que señalaba que no hace películas como espectáculo, sino como “enseñanza”. Otros de sus trabajos son Abonos (1934), Semillas (1934), El Barbecho (1935), Seda en España, 1941, Lana de España, 1943, Industrias lácteas, 1945, Abejas y colmenas, 1948, El Jerez (1959).