Primer caso de cáncer por exposición al amianto de un maquinista de Metro de Madrid
Un antiguo maquinista de Metro de Madrid, ya jubilado, diagnosticado de cáncer (asbestosis) por exposición a amianto durante su etapa en el suburbano. El sindicato de Maquinistas ha informado de este caso. Es el quinto trabajador del suburbano afectado por esta enfermedad, pero el primero que no es técnico de mantenimiento.
Dicho sindicato informa que el exempleado ya ha dado positivo a finales de mayo en el diagnóstico del mesotelioma pleural maligno, un tumor canceroso poco común que afecta, principalmente, al revestimiento del pulmón y de la cavidad torácica (pleura) debido a la exposición al asbestos (amianto). El informe procede de un facultativo del Hospital Gregorio Marañón.
El afectado fue trabajador del suburbano durante más de 35 años y jubilado ya desde el 2008. La organización ha contactado con la Inspección de Trabajo y la Seguridad Social para informar de este caso.
El sindicato de Maquinistas de Metro de Madrid, al que perteneció la persona afectada, advierte a Metro de Madrid que tomará medidas y pedirá a la Seguridad Social que se reconozca la asbestosis del maquinista afectado como enfermedad profesional, una patología por la que ya está recibiendo tratamiento.
La organización insiste, en declaraciones a Europa Press, en que, aunque Metro de Madrid ha empezado ahora a tomar algunas medidas para el desamiantado, “estas vienen con al menos 15 años de retraso, ya que desde el año 2003 conocían la presencia de amianto en las instalaciones y trenes”.
Además, expone que estas iniciativas se han desplegado tras requerimientos de Inspección de Trabajo después de conocerse el primer caso de un trabajador con enfermedad profesional reconocida por exposición a este mineral, potencialmente cancerígeno.
El sindicato de Maquinistas cree que los casos de trabajadores con enfermedad relacionado con el amianto irán en aumento en próximos años y que ahora solo se ve “la punta del iceberg” sobre este problema.
Por ello, exige vigilancia de la salud “específica” para la prevención del amianto para “todos los trabajadores del suburbano madrileño y para quienes ya están jubilados y se expusieron al amianto en su puesto de trabajo”.
Finalmente, el colectivo de Maquinistas reclama a Metro el reconocimiento de la categoría profesional como 'Maquinistas de Tracción Eléctrica' y que la Seguridad Social reconozca patologías como la asbestosis como enfermedad profesional.
Hasta la fecha, con este caso, hay un total de cinco trabajadores, uno de ellos ya fallecido, que han pasado por el suburbano afectados por amianto y existen otros dos casos más catalogados como sospechosos.
Este maquinista ya jubilado trabajó en “bastantes” líneas del suburbano durante su actividad profesional, según señalan a Europa Press fuentes del sindicato.
Metro insiste en la seguridad en las instalaciones
Por su parte, fuentes del suburbano han explicado a Europa Press que se ha recibido una comunicación desde la unidad técnica de salud laboral que informa de un “posible caso” de asbestosis, pero no se aportan datos concretos del empleado.
En consecuencia, Metro ha solicitado información específica para conocer qué persona es y qué puestos ocupó durante su etapa en la compañía para poder “actuar en consecuencia”.
Por otro lado, desde el suburbano detallan que se han realizado mediciones ambientales sobre partículas en suspensión de amianto en los vehículos y “todas han dado negativa”. Por tanto, recalcan que la seguridad ahora en las instalaciones “está garantizada” tanto para los trabajadores como los usuarios.
A su vez, la compañía está impulsando un plan de desamiantado valorado en 140 millones de euros a desplegar hasta el año 2025 y que se informa de todas las medidas que se adoptan a los sindicatos. En el marco de este plan, se estima que los trenes estén libres de materiales con amianto antes de que finalice el año 2019.
La compañía también ofrece a los trabajadores un TAC gratuito y voluntario para descartar cualquier afección relacionada con el amianto. Esta prueba médica va “más allá” de lo que establece la normativa de Riesgos Laborales para estos casos, que indica la práctica de espectometrías y radiografías.