Los inmigrantes aportan a la economía vasca casi el doble de las ayudas que reciben: 810 millones de euros más en 2018

La población migrante aporta a la economía vasca más de lo que recibe. Así lo ha determinado el último estudio de Ikuspegi- Observatorio Vasco de Inmigración, que ha analizado la contribución que realizaron durante el año 2018 concluyendo que en términos de consumo, aportaron 810 millones de euros más de lo que recibieron de la Administración Pública. Mientras que las ayudas que recibieron a lo largo ascendieron a los 714 millones de euros, lo aportado superó los 1.525 millones.

El estudio 'La aportación de las personas de origen extranjero en la CAE a través del PIB. Una aproximación desde el lado del gasto' determina que la contribución a la riqueza de esta población es del 2,06 % del PIB de Euskadi. Datos que se han obtenido analizando la información facilitada por los organismos oficiales relacionados con el gasto público, es decir, el departamento de Vivienda, de Educación y Salud del Gobierno vasco, así como de Lanbide. 

“Este estudio viene a romper los estereotipos y rumores sobre una población inmigrante subsidiada y dependiente de ayudas públicas. Nunca más lejos de la realidad. Frente a los rumores confusos y los fake news están los datos claros y las cifras obtenidas por fuentes fidedignas”, ha señalado durante la presentación del estudio este jueves en Bilbao la viceconsejera de Políticas Sociales del Gobierno vasco, Lide Amilibia. 

La viceconsejera, que ha presentado los datos junto a Arkaitz Fullaondo, investigador principal del estudio y miembro de Ikuspegi, Álvaro Fierro, responsable de proyectos e investigación de Cultumetria (empresa que ha colaborado en el análisis) y Simón Peña, decano de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación de la UPV/EHU, ha querido recalcar que los datos han sido obtenidos de tiempo antes de la crisis sanitaria causada por la COVID-19 y sin tener en cuenta la economía sumergida. 

Los expertos han señalado que “el dato más sensible”, que han analizado es el que tiene que ver con las prestaciones sociales destinadas a la población de origen extranjero. Una cifra que ha sido obtenida tanto de la parte proporcional de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) en la Comunidad Autónoma Vasca, destinada a este colectivo, como de las Prestaciones Complementarias de Vivienda y el acceso a los Servicios Sociales. En este sentido, en 2018, el 39% del total de perceptores de RGI era de origen extranjero, según Lanbide y, de los 54.580 expedientes que estaban abiertos, 21.646 pertenecían a inmigrantes.

“No nos sorprenden las cifras”

“Es un dato importante el dinamismo económico que generan los extranjeros en la economía vasca, pese a que siempre se pone el foco en lo que perciben cuando incluso esas percepciones son consumo, activación de comercio”, ha indicado Fullaondo, quien ha recalcado que son cifras que no les sorprenden “porque es lo que se observa a nivel de todo el planeta y casi siempre dan el mismo resultado: que aportan más de lo que reciben”.

Preguntado por si la crisis económica derivada de la pandemia va a mostrar un comportamiento similar a la de 2008, Fullaondo ha afirmado que “la anterior crisis fue muy profunda y muy larga” y en la actual, “las bases para la recuperación van a estar ahí y, aunque vienen tiempos complicados, la balanza a favor de su aportación, cambiará pero la diferencia no será muy grande porque hay un colchón importante, pero dudo que lo suficiente como para darle la vuelta a esta tendencia”.