La epidemia de coronavirus casi dobla la mortalidad media en estas fechas en varias zonas de España
El impacto en vidas y salud de la epidemia de coronavirus en España es muy alto y aún no remite. Aunque la velocidad de fallecimientos ha frenado en todas la comunidades, este sábado se llegó a los 5.690 fallecidos oficiales al sumar 832 en 24 horas. La COVID-19 se ha dejado sentir con mucha fuerza y casi ha duplicado la mortalidad habitual en muchas zonas de España como Castilla y León, Castilla-La Mancha, Madrid, Aragón o Navarra. A nivel nacional, el exceso de muertes respecto a la serie histórica entre el 21 y el 25 de marzo fue de un 16,7%, según el último informe publicado por el Instituto de Salud Carlos III.
En esos días, las muertes esperables en España (que se obtienen de medias históricas basadas en la mortalidad observada el 1 de enero de 2008) eran 5.661. Fallecimientos por todas las causas: la observación no distingue causas al basarse en los datos remitidos por 3.900 registros civiles. Las finalmente observadas alcanzaron las 6.609, un exceso de 948. Pero el panorama es muy diferente según comunidades autónomas. Hubo “excesos de mortalidad” en Aragón, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Catalunya, Comunitat Valenciana, Comunidad de Madrid y Navarra según el informe de situación de 26 de marzo de 2020.
Estos informes ofrecen cómo se comporta la mortalidad en cada época del año. Primavera es el momento en el que menos muertes se producen en España (frente al pico que se produce en el invierno). La entrada de una epidemia como la COVID-19 ha tenido consecuencias, al alza, en la estadística. La directora del Instituto de Salud Carlos III, Raquel Yotti, ha dicho este sábado que “hay que tener mucha precaución para sacar conclusiones sobre un infradiagnóstico y reporte de este enfermedad concreta”.
Las dos castillas son las que han padecido un acelerón en la mortalidad. Ambas superan el 93% de exceso. En Castilla y León, la estadística estimaba que, del 18 al 25 de marzo, podían esperarse 498 fallecimientos y se observaron 964. En Castilla-La Mancha (entre el 15 y el 25 de este mes) fueron 1.137 decesos reales frente a la media de 558. Otro aspecto que apunta al efecto de la COVID-19 es que los grupos más afectados por el incremento de la mortalidad fueron los hombres (con más de un 100% de exceso) y las edades de más de 74 años en Castilla y León y de 65 a 74 en Castilla-La Mancha, que han más que doblado el volumen de fallecimientos. El colectivo de varones y el de personas de edad avanzada son los que presentan peor diagnóstico al ser infectados, según los estudios que se realizan desde que se presentó el primer brote en Wuhan (China).
En Aragón, del 23 al 25 de marzo, indica el Instituto de Salud Carlos III, el exceso llegó al 75% y el grupo peor parado fue el de 65 a 74 años, que dobló largamente su mortalidad: de 12 estimados a 25 reales. En la Comunidad Foral de Navarra se saltó de una estimación histórica de 48 decesos a los 90 registrados. Una vez más, la edad entre 65-74 años observó una subida del 133% (de 6 a 14) y la de más de 74 años de 97%: 70 fallecidos frente a la media de 36.
Sin embargo, en el epicentro de la epidemia en España, la Comunidad de Madrid, los datos van mucho más atrasados. El sistema ha detectado un exceso la mortalidad entre el 10 y el 17 de marzo del 71%: 1.548 muertos frente a los 904 esperables.
El sistema de Vigilancia de la Mortalidad Diaria (MoMo) se aplica a todas las causas de muerte y al ofrecer los resultados no especifica si los fallecidos habían sido incluidos en el recuento oficial del coronavirus, que solo se alimenta de los registros en los que un caso ha sido confirmado por una prueba como positivo por COVID-19. Es decir, puede haber decesos de pacientes con coronavirus sin atribuir oficialmente a esa estadística.
Además, el informe detalla que “en el momento actual observamos un retraso en la notificación de defunciones en los registros civiles de varias comunidades autónomas, siendo notable en Galicia, Comunidad de Madrid y La Rioja”.
11