El prior del Valle de los Caídos fue candidato de Falange a las generales de 1993 y las europeas de 1994
Santiago Cantera Montenegro. El actual prior del Valle de los Caídos fue candidato de Falange Española Independiente (una de las siglas vinculadas al movimiento fundado por José Antonio Primo de Rivera) en las elecciones generales de 1993 y las europeas de 1994, según ha adelantado Infolibre.
En ambas ocasiones, Cantera ocupó puestos de cola, sin resultar elegido. En 1993, Cantera tenía 21 años, y terminaba sus estudios de Historia en el CEU, donde se vinculó al entorno neofalangista. Uno de sus profesores de aquella época lo define como “un falangista no franquista”, que era conocido entre los colegiales como “uno de los azules”. Al parecer, su vinculación con la Falange venía por su hermano mayor.
Pocos meses después de las europeas de 1994, Cantera culminó sus estudios de Historia Medieval, y en 2002 ingresaba en el Valle de los Caídos. “Era un hombre muy inteligente, que si finalmente no hubiera optado por la vida religiosa hoy seguramente sería catedrático”, destaca su antiguo profesor, quien sostiene que “a los 20 años se forma el carácter” para explicar que el pensamiento político del actual prior de Cuelgamuros se forjó durante aquellos años.
A los treinta años, y tras haber pensado en casarse sin éxito, Santiago Cantera quiso entrar en la vida religiosa. Al principio eligió la Trapa, un monasterio contemplativo donde no podría continuar con sus investigaciones históricas. “Le convencimos para optar por el Valle”, relata su ex profesor.
Desde 2014, Santiago Cantera es el máximo responsable del Valle, y como tal se ha negado a cualquier intento de exhumar los restos del dictador y de su admirado José Antonio. Ya ocurrió en el caso de los hermanos Lapeña, pero en esa ocasión la jerarquía eclesiástica fue inflexible, y el cardenal Blázquez le obligó a obedecer las resoluciones judiciales.
En este sentido, su antiguo profesor, con quien mantiene todavía el contacto, subraya que en los últimos meses se ha sentido “muy solo”, con la sensación de “no contar con los apoyos que antes daba por sentados” en relación a Franco. Hay que recordar que cuando, en 2011, la comisión de estudio de la Memoria Histórica recomendó el traslado de los restos del dictador, el entonces cardenal de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal, Antonio María Rouco, se negó en redondo. Algo que, como informó eldiario.es, no se da en la jerarquía eclesiástica actual, que presiona al prior para que dé su brazo a torcer y permita el cumplimiento de la ley.