El madroño ibérico

Con un tamaño mediano

el madroño es popular

típico en particular

del terruño castellano.

En el Madrid cortesano

el madroño es referente,

estimado por la gente

como símbolo genuino

del Atlético divino,

segundón impenitente.

Jócamo, 23.XI.2024

NOTA: El madroño ibérico (Arbutus unedo) extiende su distribución natural por toda la cuenca mediterránea, desde la península ibérica hasta Asia Menor. Es muy popular en la comunidad de Madrid, donde hermanado con el oso son símbolo de la ciudad. Animal y planta figuran representados en el escudo de la capital de España y, también, en el anagrama del Atlético de Madrid, que contribuye a su popular difusión.

Cuando joven, crece como arbusto, para llegar a hacerse un árbol de hasta 10 m de alto, con tronco grisáceo de corteza estriada y escamosa. Las hojas son perennes, lanceoladas finamente aserradas de color verde oscuro. Las flores, agrupadas en racimos péndulos, tienen una corola blanquecina globosa (urceolada), y los frutos son bayas esféricas de unos 2 cm de diámetro, verrucosas de color anaranjado, que se tornan rojas al madurar. Aunque comestibles, deben consumirse con prudencia, como expresa su epíteto específico (unedo = comer sólo uno) debido a que contienen alcoholes y alcaloides.

Como el laurel noble (Laurus nobilis) se relaciona con las laurisilvas previas a las glaciaciones que poblaban el sur de Europa y norte de África, lo mismo que su congénere (Arbutus andrachne) de Grecia y Asia Menor, más parecido a nuestro Arbutus canariensis, tanto por el aspecto de su tronco rojizo, como por la morfología de sus hojas coriáceas.

En Canarias está considerado como especie invasora, propenso a hibridarse con A. canariensis (A. x androsterilis), motivo por el que figura en el Catálogo Español de Especies Invasoras (Real Decreto 630/2013).