Binter une Cádiz y Gran Canaria a través de sus sabores
48 horas llevan Binter y la Diputación de Cádiz hermanando las Islas Canarias a través de la gastronomía. Si el miércoles en Tenerife fue el Hotel Mencey y la cocina de Seve Díaz (El Taller de Seve), este jueves ha sido Muxgo, en lo alto del Hotel Catalina Plaza Sostenible, el lugar elegido para ello. Usando las palabras de Pepe Ferrer (Embajador para la gastronomía de los vinos de Jerez) “hemos elegido MuXgo para comernos Gran Canaria a bocados y bebernos Cádiz por soleares”.
En un encuentro donde se compartía mesas entre compañeros de los medios de comunicación como son Carla Larrabeiti (Cope Gran Canaria), Sergio Miró (Onda Cero Canarias) o Roberto Herrera (RTVE), Vanessa Santana (GastroHUB ULPGC), o influencers de las redes sociales como Marta Ibrahim (@martaibrahim) o Patricia García (@masquegastro) y entre otros miembros destacado de la sociedad grancanaria dedicados profesionalmente al mundo del turismo como Sergio Maccanti (Gran Canaria Convention Bureau) transcurrió una velada de lo más agradable.
Borja Marrero quiso apostar por el menú que está trabajando en MuXgo durante las últimas semanas y que tiene al despiece de la oveja como parte central. Comenzamos por los snacks, delicados pero sabrosos donde sobresalía una almendra tierna de temporada en su propia sopa. “Esta almendra es como nuestro caviar, se encuentra solamente en este punto durante unos 20-30 días al año y se acaba. Su textura y sabor es algo inconmensurable e incomparable y por eso no quería que faltara en el día de hoy” detallaba el chef sobre ese bocado en concreto. La sopa de queso con bienmesabe, roca de gofio y perlas de mandarina son esa vuelta de tuerca a un plato “que siempre abrirá el menú de MuXgo, me gusta que los comensales vuelvan a los platos de cuchara, ya que están desapareciendo de las mesas y yo no quiero perderlos”.
La lubina Aquanaria la tendremos en dos pases, primero curada y más adelante con una veluté de hierbas silvestres de Tejeda, apuntalada con elegancia la berenjena a la brasa con holandesa y para dar la vuelta al ruedo el cherne con caldo corto y mojo verde. Todo ello antecedía al pase estrella de la velada, el despiece de la oveja.
La oveja forma parte del menú de Borja desde el primero de los bocados, con el snack de queso. El chef está empeñado en conseguir demostrar que de este animal se puede aprovechar hasta los andares como solemos decir del cochino canario. Aquí nos lo presenta en mesa a vista del comensal con las partes bien diferenciadas, incluido el corazón. Porque así es esta propuesta, arriesgada y atrevida pero con sentido, jugando con las partes nobles pero también invitando al comensal a que cruce los renglones preestablecidos y se atreva a jugar y probar cosas que no imaginaría. El resultado es sobresaliente por los cuatro costados y por si fuera poco el ejercicio, se guarda un as en la manga como prepostre en forma de taco de steak tartar de solomillo de oveja, una golosina en boca.
Para cerrar, en la parte dulce también vuelve a aparecer la oveja, aquí en forma de espuma y que sirve de nexo de unión para que el bizcocho de millo, la mermelada de naranja, la sopa de pinocha y el helado de tundra brillen en conjunto.
Como en los mejores partidos de tenis, Borja tenía un compañero a la altura como es Pepe Ferrer, que trajo una alineación ganadora y preparada para salir por la puerta grande y a hombros. Manzanilla pasada en rama de Sanlúcar de Barrameda, Fyno Inocente (aunque de esto no tenía nada), el Amontillado del Tío Diego, la Nave Trinidad de los sueños en forma de manzanilla baratillo en rama, también de Sanlúcar de Barrameda, un Palo Cortado en rama con nombre nombre español y apellido inglés, Don Zoilo Williams & Humbert al que acompañó un Dry Sack de la misma bodega para terminar con un bonus track en forma de brandy solera Gran Reserva don Fernando de Castilla. Si el menú del cocinero grancanario es motivo suficiente para que el gaditano venga a Gran Canaria, los vinos de jerez son la excusa para que el grancanario le devuelva la visita.
Tras el gran servicio ofrecido por parte del equipo de sala y cocina de MuXgo, la majestuosa clase de historia sobre los vinos de Jerez impartida por Ferrer, ahora solamente queda cuadrar fechas para volar hacia Cádiz o desde Cádiz, enamorarnos de nuestros respectivos rincones, descubrir las gastronomías que nos identifican, bebernos el territorio que nos envuelve y sobre todo, recuperar las ganas de volar y de vivir. Para eso, nada mejor que subirnos en nuestra “guagua con alas”, Binter, y pasar de los sueños a la realidad.
Ya avanzada la tarde, la murga Los Chancletas y la chirigota del Canijo del Carnaval de Cádiz amenizaron a los asistentes, en esta ocasión en el Hotel Santa Catalina A Royal Hideaway, con unas actuaciones donde el humor, el buen rollo, la ironía y las ganas de carnaval pusieron el broche de oro a dos días llenos de actividades gracias al esfuerzo de los equipos de Binter Canarias y la Diputación de Cádiz.
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