Torrelavega será declarada Zona de Urgente Reindustrialización
El nuevo Gobierno de Cantabria ha puesto en marcha toda la maquinaria de la Administración autonómica para conseguir revitalizar el mercado de trabajo en Torrelavega y la comarca del Besaya. Como obligación 'autoimpuesta' después de prometer en campaña electoral que la ciudad y su zona de influencia iban a estar en el epicentro de las políticas que desarrollará el bipartito conformado por PRC y PSOE, el Ejecutivo que dirige el regionalista Miguel Ángel Revilla ha anunciado este viernes que trabaja ya para que sea Zona de Urgente Reindustrialización.
La primera consecuencia se dejará notar en los Presupuestos Generales de Cantabria de 2016, en los que el Gobierno incluirá una partida, de una cuantía aún por determinar, que servirá tanto para apoyar a las industrias maduras de la comarca como para trabajar en atraer a otras nuevas. Todo ello con el objetivo final de contribuir a la salida de una situación “realmente preocupante” para la comarca.
Más allá de las consideraciones del actual Ejecutivo autonómico, que pone el foco en las “decisiones erróneas” del Gobierno del PP que lideró Ignacio Diego, al que ha acusado de “boicotear” proyectos previos, y del “abandono sistemático” del Gobierno central que encabeza Mariano Rajoy, algunos datos reflejan la dramática situación que afronta la segunda ciudad de Cantabria. La tasa de paro, por ejemplo, es del 24% frente al 18% de media en la comunidad autónoma, y de los 5.600 parados de la industria que hay en la región, 900 son de Torrelavega.
En este contexto, el Gobierno de Cantabria ha acordado declarar a Torrelavega y a su comarca como Zona de Urgente Reindustrialización, aunque no será hasta el mes de septiembre cuando esté algo más avanzado el presupuesto del próximo ejercicio y se pueda concretar la cantidad exacta que se destinará a este proyecto estratégico.
Es un acuerdo del que ha informado este viernes en rueda de prensa la vicepresidenta del Gobierno, Eva Díaz Tezanos, que espera que dicha declaración se complemente con la ayuda del Gobierno central a través de su Programa de Reconversión y Reindustrialización para zonas específicas, dotado con un total de 760 millones, si bien no figura partida para ello en el borrador de los Presupuestos Generales del Estado de 2016, algo que el Gobierno de Cantabria pretende corregir con una enmienda por importe de ocho millones de euros.
En opinión de la secretaria general de los socialistas cántabros, Torrelavega necesita la “apuesta” de los gobiernos de España y Cantabria, y del primero “la tendrá tras las elecciones de final de año”, ha asegurado, remitiéndose al “compromiso” con la comarca del líder del PSOE y candidato a a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, expresado en su última visita a la ciudad el pasado 24 de julio.
Durante su comparecencia, Díaz Tezanos ha recordado que cuando tomó posesión se dirigió a la vicepresidenta del Gobierno central, Soraya Sáenz de Santamaría, para solicitar que se incluyera a la capital del Besaya en el Programa de Reconversión y Reindustrialización dirigido a las zonas con una preocupante situación laboral y social, pero no ha recibido respuesta.
Petición municipal
Casi de manera simultánea, el Ayuntamiento de Torrelavega ha exigido también este viernes la inclusión de la comarca del Besaya entre las once zonas de urgente reindustrialización en toda España, a las que el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2016 prevé destinar una inversión multimillonaria.
En una comparecencia ante los medios, el alcalde en funciones de la ciudad, Javier López Estrada (PRC), ha asegurado que la comarca “cumple todos los requisitos” para recibir estas inversiones como Canarias, Teruel, Extremadura, Soria, Jaén, Campo de Gibraltar, Bahía de Cádiz, Comarca de El Ferrol, la margen izquierda del Nervión, El Hierro o Lorca.
Por ello, ha pedido al PP de Torrelavega y de Cantabria que apoyen esta reivindicación del equipo de Gobierno PSOE-PRC, y no sean “cómplices” del, a su juicio, “maltrato” que la ciudad recibe en el documento presupuestario, algo “inaceptable” para los más de 5.000 desempleados de la capital del Besaya.