Rock contra el fascismo alerta de que aún se desconoce si el festival ultra Galerna Fest cumple con la normativa
A pocos días de la fecha prevista para la celebración del festival de música ultra Galerna Fest en Santander, la asociación Rock contra el fascismo ha vuelto ha expresar su “preocupación” por la naturaleza de un evento “que pretende dar voz a grupos musicales y discursos abiertamente nazis y fascistas”, al tiempo que ha alertado de que aún se desconoce la ubicación exacta y si cumple con la normativa local.
“Hasta ahora no se ha confirmado que los organizadores posean los permisos legales necesarios para realizar el evento, lo que pone de relieve la falta de diligencia del Consistorio en hacer cumplir la normativa local”, ha denunciado el colectivo, recordando “a todos los implicados que la organización de este festival sin autorización no solo es ilegal, sino también un grave atentado contra los valores democráticos que sustentan nuestra sociedad”.
“Es importante recordar que cualquier intento de evadir la legalidad o de llevarlo a cabo en un espacio sin la pertinente autorización es una violación de las normativas locales vigentes”, ha insistido la asociación, instando a la ciudadanía “a estar vigilantes y, si fuera necesario, a informar a las autoridades competentes para que actúen en consecuencia, y que tanto organizadores, como responsables del local que pudiera albergarlo, asuman las consecuencias legales y sociales”.
Rock contra el fascismo, que alertó hace semanas a la sociedad de la celebración de este evento promovido por la asociación ultraderechista Alfonso I, ha llevado a cabo un análisis de los comunicados difundidos por organizaciones de esta índole, en concreto sobre el que publicó este colectivo ultra en relación al evento en cuestión.
“Una vez más, vemos cómo los movimientos de extrema derecha y neofascistas recurren a tácticas victimistas, presentándose como perseguidos por un supuesto 'sistema que los reprime', cuando en realidad lo que hacen es promover discursos de odio, exclusión y violencia. Bajo un disfraz de lenguaje patriótico, buscan legitimar ideas que atentan contra los principios fundamentales de la democracia, la justicia y los derechos humanos”, ha explicado en una nota de prensa Rock contra el fascismo, resaltando que el intento de victimización frente a una supuesta 'máquina liberticida' no es nuevo.
“Es una estrategia burda que estos movimientos han utilizado a lo largo de la historia para desviar la atención de sus verdaderas intenciones. No hay persecución ni represión, sino una defensa legítima de los valores democráticos frente a ideologías que han causado, y causan, enorme sufrimiento en nuestro país y en Europa”, han subrayado.
“Intentan deslegitimar a quienes los critican o se oponen a sus propuestas, recurriendo a insultos y descalificaciones personales. Estas actitudes no son sino una expresión de su desprecio por la diferencia y la dignidad humana. En contraste, quienes defendemos la justicia social lo hacemos desde el respeto, el diálogo y la construcción de una sociedad inclusiva, donde el odio no tiene cabida”, han defendido desde la agrupación antifascista.
Además, ha alertado sobre otra táctica que emplean estas organizaciones de ultraderecha, que consiste en “la apropiación de figuras históricas y culturales para 'justificar' sus posturas”. “Ejemplos como Quevedo son citados de forma manipulada para legitimar un discurso que va en contra de los valores universales de humanidad y justicia”, han resaltado.
Sin embargo, Rock contra el fascismo ha puesto como ejemplos “más poderosos” en historia literaria y cultural que “celebran la diversidad y el encuentro entre culturas”. “En 'La gran sultana', Cervantes nos presenta a Catalina de Oviedo como símbolo de resistencia y también como puente entre mundos supuestamente opuestos. Frente a la xenofobia que promueven los fascismos actuales, esta obra nos recuerda que el encuentro entre diferentes pueblos no solo es posible, sino profundamente enriquecedor y pacificador”, han explicado desde la asociación.
“Seguiremos defendiendo una sociedad democrática y plural, donde las voces que promueven el fascismo sean desmanteladas no con odio, sino con el poder de la música, la solidaridad y la justicia”, han concluido.
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