Aragonès pide a Sánchez reunir la mesa de diálogo y dice desconocer qué opinan Díaz y Sumar sobre Catalunya
El presidente catalán, Pere Aragonès, ha enviado este sábado sendos mensajes al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y a la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. Al primero le ha pedido reunir la mesa de diálogo pese a ser año electoral, mientras que a la segunda le ha retado a explicar su propuesta para Catalunya.
En una entrevista con la agencia EFE, Aragonès ha instado a Sánchez a “no arriar la bandera del diálogo” por motivos electorales y a convocar la mesa de negociación este año: “Nosotros estamos a plena disposición para las reuniones que haga falta y avanzar en la resolución del conflicto”.
La última reunión pública de la mesa de diálogo fue en julio del año pasado. En el encuentro se sentaron las bases del acuerdo que en otoño cerraron el Gobierno y ERC para derogar la sedición y reformar la malversación para beneficiar a los condenados y procesados por el procés (objetivo frustrado en parte por el Supremo y la Fiscalía) a cambio del apoyo de los republicanos a los presupuestos.
Tras los últimos acuerdos concretados en la reforma del Código Penal, Aragonès ha considerado que la mesa de diálogo no debería quedar en punto muerto en 2023, a pesar de ser un año marcado por elecciones locales, autonómicas y generales. “El diálogo no debería estar sometido a incentivos de táctica política de los partidos”, ha sugerido.
“Si Pedro Sánchez, que ha hecho bandera del diálogo y de la mano tendida, ahora esconde, retira y arría esa bandera del diálogo porque tiene elecciones municipales y autonómicas, deberá dar explicaciones de por qué no quiere dialogar”, ha aseverado Aragonès.
Este mismo sábado, el ministro de Cultura, Miquel Iceta, ha contestado a Aragonès. “Quien izó la bandera del diálogo fue Pedro Sánchez y la mantendrá siempre levantada”, ha recordado Iceta, que ha hecho hincapié en que ahora mismo, gracias a la actitud dialogante desde la Moncloa, “hay una situación radicalmente diferente” a la de 2017.
Según Iceta, “nadie ha hecho tanto por el diálogo como Pedro Sánchez”, quien ha sido “mano de santo para el diálogo”. “Por lo tanto, me alegra mucho que otros se sumen a ese esfuerzo”, ha afirmado Iceta, que ha asegurado no tener “ni idea” de si se convocará la mesa de diálogo durante este 2023.
Aragonès y Sumar
Por otro lado, Aragonès ha tirado de ironía para referirse al lanzamiento de Sumar y ha sugerido que él aún desconoce qué propuesta tiene Yolanda Díaz sobre Catalunya, pero sí le ha planteado dos peticiones: que sea “valiente” y que “se aleje del jacobinismo de la izquierda estatal”.
“Es un proyecto que tiene muchas propuestas pero no he visto ninguna propuesta sobre el futuro político de Catalunya”, ha mantenido Aragonès. Los comuns, referente catalán de Sumar y uno de los rivales de ERC por el voto de las próximas generales, están a favor de un referéndum pactado.
El acuerdo de claridad
En clave catalana, independientemente de cómo avance este año el proceso de diálogo, Aragonès tiene previsto centrar sus esfuerzos en su propuesta de “acuerdo de claridad”, siguiendo la vía canadiense con el Quebec, para pactar las condiciones mínimas para celebrar una eventual consulta de autodeterminación en Catalunya.
Antes de intentar pactar esa consulta con el Estado, Aragonès pretende sumar fuerzas en Catalunya mediante un gran acuerdo con agentes políticos, sociales, económicos, sindicales y culturales que sirva para fijar las condiciones concretas de ese referéndum. El president ya lanzó esta propuesta de claridad en septiembre y recibió el rechazo tanto del Parlament como del Gobierno central.
“No se puede demorar en exceso la puesta en marcha de este procedimiento, más que nada porque el conflicto no puede seguir estancado”, ha dicho el president, que ha explicado que “en próximas semanas” habrá un trabajo de “contenido” por parte de un grupo de académicos.
Cuando esos trabajos del grupo de expertos estén “suficientemente maduros”, se iniciarán los contactos con fuerzas políticas catalanas, algo que según Aragonès no ocurrirá hasta después del 28 de mayo, para “no interferir” en las elecciones.
Su voluntad, ha asegurado, es lograr “grandes acuerdos” en el Parlament, a pesar de que partidos como el PSC, CUP o JxCat avanzaron ya su oposición frontal a esta propuesta, respecto a la que solo los comuns han mostrado predisposición. Aragonès resta importancia a esas negativas, ya que no ha habido “oportunidad” aún de “debatir en profundidad” su propuesta.
Aun así, ha advertido de que quien se “oponga” a su planteamiento estará entonces “obligado” a poner sobre la mesa su alternativa; y ha aprovechado para dirigirse, uno a uno, a PSC, Junts y la CUP, para retarles también a posicionarse sobre el acuerdo de claridad.
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