Los sindicatos convocan las primeras protestas para exigir al Gobierno de Sánchez que cambie ya la reforma laboral
La presión de los sindicatos para que el Gobierno tumbe ya varios de los elementos clave de la reforma laboral del PP llega a la calle. UGT y Comisiones Obreras han anunciado este martes movilizaciones en los próximos meses para que el Ejecutivo socialista apruebe “de inmediato” modificaciones sustanciales en la normativa laboral que impuso el Gobierno de Rajoy en su mandato, así como en la reforma de las pensiones de 2013. Hasta ahora, las centrales sindicales han apostado por la negociación, pero consideran que ha llegado el momento de trasladar las palabras “al Boletín Oficial del Estado”.
“Llamamos a que el Gobierno mueva pieza, que no se escude en minorías parlamentarias”, ha afirmado el secretario general de CCOO, Unai Sordo. En el mismo sentido, el líder del UGT ha recordado al Ejecutivo que las centrales sindicales “no vamos a esperar a que acabe la legislatura para abordar esta situación”, ha apuntado Pepe Álvarez. Sordo ha añadido que el Gobierno se arriesga a “perder la credibilidad” si este mandato concluye sin que las prometidas modificaciones legislativas vean la luz.
Las protestas se concretan en un primer acto el 8 de febrero en Madrid, al que están llamados a acudir unos 10.000 delegados sindicales de toda España de ambas organizaciones. Se trata de la primera protesta de presión contra la política laboral del Gobierno de Pedro Sánchez, aunque los sindicatos ya han convocado algunas movilizaciones sobre conflictos concretos, como las celebradas en Correos y en Adif.
A esta asamblea de delegados sindicales se sumará un “proceso de movilización que culminará el próximo 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer”, en el que los sindicatos mayoritarios vuelven a apostar por convocar paros parciales de dos horas de manera general, que podrá ampliarse hasta las 24 horas en “algunos sectores, por sus particularidades y reivindicaciones”.
“Que no se otorgue a la CEOE derecho de veto”
Los secretarios generales de UGT y CCOO han recordado que los sindicatos tenían antes de concluir 2018 “muy avanzados” varias de estos cambios normativos, como la prevalencia del convenio sectorial sobre el de empresa, la recuperación de la ultraactividad de los convenios (su prórroga indefinida cuando termina su vigencia sin que haya un nuevo convenio) y del subsidio para desempleados mayores de 52 años.
Pepe Álvarez ha recordado que estas cuestiones habían quedado reflejadas en documentos “prácticamente cerrados”, que habían sido “intercambiados con el Gobierno en presencia de la CEOE”. En UGT y en CCOO consideran que, si la patronal de empresarios no quiere sumarse a estas modificaciones, el Ejecutivo debe aprobarlas por su cuenta. “Pedimos al Gobierno que no otorgue a la CEOE derecho de veto”, ha defendido Unai Sordo.
En opinión de UGT, dado el estado de fuerzas en el Parlamento, estas modificaciones en la reforma laboral deberían aprobarse a través de un real decreto-ley dada su “urgencia”. “Creo sinceramente que la vía es esta, porque la vía de reforma legislativa se duerme en la mesa del Congreso de los Diputados”, ha sostenido Pepe Álvarez.
Desde CCOO defienden que la manera de aprobar estos cambios no es lo más determinante, sino “el resultado final”, por lo que instan al Gobierno a llevar lo pactado con las organizaciones sindicales a las negociaciones con el resto de partidos o al BOE por la vía del decreto.
Las movilizaciones de los sindicatos mayoritarios también tienen como destinataria a la patronal, a la que UGT y CCOO reclama que haga efectivo lo pactado en el IV Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), como el salario mínimo por convenio de 1.000 euros y el aumento salarial de hasta un 3%.