Suma y sigue en el descalabro del 'unicornio' Domestika: anuncia un tercer ERE con 46 despidos

Más despidos e incertidumbre en el 'unicornio' Domestika, que hace solo un año y medio era una historia de éxito de las empresas digitales españolas. Este lunes, la empresa de cursos online ha comunicado un nuevo despido colectivo, el tercer ERE en cuestión de meses, al que los trabajadores suman uno más “encubierto”. La propuesta de expediente de regulación de empleo afecta a algo más de la mitad de la plantilla, a “46 personas de un total de 87” de su filial DMSTK, explican desde el bufete Colectivo Ronda, que está asesorando a los trabajadores en los sucesivos despidos de este año.

“Otro más, es una tortura”, lamentaban desde el bufete de abogados hace unos días, a la espera de conocer el alcance de los despidos, que la empresa ha dado a conocer este lunes.

El recorte de personal afecta a 46 personas y llega apenas un mes después de otro despido colectivo en esta misma filial de Domestika, dedicada a las finanzas de la compañía, marketing, diseño de producto y programación de los cursos. “DMSTK despidió el 3 de mayo a 88 personas, quedaron 87”, recuerda Esther Comas, laboralista de Colectivo Ronda que está asesorando a la plantilla.

A finales de mayo, la empresa aplicó otro despido colectivo, este en la filial dedicada a la realización de cursos (Estudios de Grabación Digital), por el que echó a 89 personas, el 65% del total.

Las causas alegadas por la start up española dirigida por Julio G. Cotorruelo, CEO de Domestika –que se llevó rápidamente su sede a California–, en este nuevo ERE en DMSTK son “económicas y organizativas, pero hay mucho que leer”, apunta la abogada.

Ahora comienza el proceso de negociación del ERE, que en los pasados despidos colectivos en Domestika no han logrado reducir el alcance de despidos, pero sí mejorar las indemnizaciones que proponía la empresa.

Misterio del auge y caída de Domestika

Siguiendo los peores temores de los trabajadores de Domestika, la sangría de personal no cesa y la inquietud en la plantilla ante un próximo cierre o venta es muy elevada. “Hay una sensación de que esto no acaba aquí”, lamentaba a elDiario.es una trabajadora a finales de mayo. Hace un año y medio, las noticias que transmitían en la redacción eran antagónicas, de gran éxito internacional.

En enero de 2022, tras una ronda de financiación que logró 110 millones de dólares (unos 97 millones de euros), la compañía de cursos online se convertía en 'unicornio', el club de las compañías valoradas por encima de la barrera de los mil millones de euros. El año anterior, Domestika había crecido muchísimo, disparando su negocio, plantilla y estudios en el extranjero. Pero poco después de alcanzar este hito de inversión, “empezaron a desmantelarlo todo”, explicaron desde su plantilla en España en este reportaje.

“Cerraron todas las sedes que habían abierto en el extranjero. Perú, Chile, Colombia... todas las de Latinoamérica y luego también las europeas: Reino Unido, Italia, Francia y Alemania. Algunas llevaban solo unos pocos meses abiertas. Después de invertir en hacer reformas en los locales, los cerraban, todo rarísimo”, explicaban a elDiario.es miembros del personal de Domestika, que pidieron guardar su anonimato.

Desde el personal critican la mala gestión de la dirección de la empresa, porque recuerdan que el crecimiento en el consumo de cursos online se preveía claramente temporal, muy vinculado a las restricciones y confinamientos de la pandemia. También advierten de sus sospechas de una posible venta de Domestika, para lo que creen que se fomentó un crecimiento “salvaje” más pensado en atraer inversores hasta lograr el título de 'unicornio' que en la propia compañía. elDiario.es ha tratado de contactar con la dirección de Domestika, sin éxito.

En el caso de que perdure la compañía, los trabajadores de Domestika destacaban en mayo su inquietud por “la calidad de los cursos” tras este proceso de desmantelamiento de las plantillas que los elaboran. “A nivel económico puede que les funcione, pero a nivel del producto, ¿van a seguir siendo buenos los cursos de Domestika?”, se pregunta una trabajadora.

Despidos a embarazadas y en bajas de maternidad

Domestika se enfrenta además a cinco demandas de trabajadoras embarazadas o en procesos de bajas de maternidad tras el nacimiento de sus hijos que fueron despedidas en el primer ERE de DMSTK, que también defienden desde Colectivo Ronda y cuyos testimonios recogió El Periódico. La única mujer embarazada en Estudios de Grabación Digital también fue incluida en el despico colectivo aplicado en esta otra filial, explica Esther Comas.

Las trabajadoras denunciantes y su defensa consideran que el despido de estas afectadas es nulo por discriminatorio, ya que critican que la presencia de personas embarazadas y en bajas de maternidad o paternidad era muy elevada dentro del ERE, por lo que entienden que se las ha perjudicado a través de una discriminación indirecta.