El Banco Santander se compromete a ser neutro en carbono este mismo año
Los principales bancos españoles presentaron durante la reciente Conferencia sobre el Cambio Climático de Madrid un compromiso conjunto para reducir su huella de carbono, en línea con los Acuerdos de París sobre descensos de las temperaturas medias. El Santander ha dado un paso más y se ha comprometido a ser este mismo año 2020 que ahora empieza en neutro en carbono, mediante la compensación de todas las emisiones que genere en su actividad diaria.
El primer grupo financiero de España, Europa y Latinoamérica tiene más de 200.000 empleados en 10 mercados principales. Entre 2011 y 2018 ya redujo sus emisiones y su consumo de electricidad un 27% y un 36%, respectivamente. “Santander es uno de los líderes en financiación de energía renovable en el mundo y vamos a ejercer nuestro papel en la lucha contra el cambio climático. El compromiso anunciado es un paso importante. Solo podemos abordar el reto del cambio climático trabajando juntos con mayor ritmo y determinación”, aseguró la presidenta del grupo, Ana Botín, durante la conferencia.
Según datos de la entidad, el 43% de la electricidad utilizada por Santander procede de fuentes renovables, y se ha comprometido a que todo su suministro eléctrico provenga de energías renovables, en la medida de lo posible, en 2025. Además, el 100% de sus instalaciones en todo el mundo contará ese mismo año con la certificación ISO 14001, el estándar para diseñar y aplicar un sistema de gestión medioambiental eficaz en las empresas. Con esta y otras acciones, el banco prevé reducir sus emisiones en un 46% adicional entre 2019 a 2025.
En Chile, la filial del banco ya es desde noviembre la primera entidad financiera del mundo en ofrece a sus clientes un método para compensar la propia huella de carbono de sus transacciones personales. La huella de carbono es el conjunto de emisiones de gases de efecto invernadero, que permite entender y conocer cuánto impactan nuestras acciones en el medio ambiente, en términos de emisiones de CO2 equivalente. Todos generamos una huella de carbono a través de nuestras acciones diarias. En el caso de la iniciativa en Chile, la huella de carbono se calculará utilizando como base un índice desarrollado a nivel internacional y ajustado al contexto local por KPMG Chile. El índice mide el CO2e que se genera en cada una de las compras que el cliente realiza con sus Tarjeta de Crédito y Débito Santander, en cinco categorías: supermercado y alimentos; entretenimiento y viajes; transporte y combustible; shopping (tiendas por departamento), y servicios y salud.
En este sentido, para compensar la huella de carbono, los clientes podrán optar entre adquirir bonos de carbono certificados bajo estándares internacionales o apoyar proyectos ambientales chilenos, que desarrollan, protejan y conserven ecosistemas naturales. Los avances de esta iniciativa estarán visibles en un reporte que dará cuenta del aporte del Banco y de sus clientes en favor de acciones que combaten el cambio climático.
Impulso a la financiación verde a nivel global
La iniciativa de Banco Santander de compensar sus propias emisiones llega en un momento en el que también está intensificando sus programas para contribuir a la transición hacia una economía verde.
La entidad es líder mundial en la financiación de proyectos de energía renovable. Entre sus principales metas de banca responsable, el Grupo se ha comprometido a movilizar 120.000 millones de euros en financiación verde de 2019 a 2025 y 220.000 millones de euros hasta 2030. Además, se ha adherido al Compromiso Colectivo de Acción Climática, promovido por la Iniciativa Financiera del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP FI).
Este compromiso requiere que sus firmantes establezcan y publiquen objetivos específicos por sector y basados en escenarios para alinear sus carteras con el Acuerdo de París sobre el cambio climático.
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