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Euskadi lanza un mensaje de prudencia: “No estaremos libres de riesgo hasta que la pandemia finalice en todo el mundo y va a pasar mucho tiempo hasta que ocurra”

Sagardui, a la izquierda de la imagen, antes de la comparecencia ante los medios de comunicación

Iker Rioja Andueza

18 de mayo de 2021 14:06 h

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Este martes, el Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) ha notificado que han aparecido 280 nuevos casos positivos de COVID-19 de un total de 9.812 pruebas diagnósticas realizadas. Ese 2,9% de positividad es el mejor dato desde finales de julio, cuando ni siquiera había emergencia sanitaria oficialmente. Coincide también con la salida de Euskadi de alerta naranja, ya que la tasa de incidencia a 14 días por cada 100.000 habitantes es ya claramente inferior a 300. En la UCI, además, ha habido una caída de la ocupación del 9% en 24 horas y la media de ingresos (46) es del 50% en relación a este pico de la pandemia, que ha sido el quinto en Euskadi después de los de marzo, agosto y noviembre de 2020 y el que siguió ya en 2021 a Navidad. Pero la buena tendencia se acompaña de mensajes claramente de prudencia en todos los foros. “No estaremos libres del riesgo hasta que la pandemia finalice en todo el mundo, y va a pasar mucho tiempo hasta que eso ocurra”, ha asegurado en el Parlamento Vasco la directora de Salud Pública, Itziar Larizgoitia, mientras que ante los medios de comunicación la consejera, Gotzone Sagardui, ha parecido mantener una distancia de seguridad con las declaraciones de Fernando Simón en torno al posible fin del uso de las mascarillas, al menos en espacios abiertos. Y ha añadido: “[El de la positividad] Es un dato positivo pero no puede sacarse una conclusión definitiva de un único dato, de un único indicador y de un único día”.

“Tenemos motivos para la esperanza, pero estamos todavía muy lejos del objetivo”, ha recordado Sagardui. De hecho, el nivel de incidencia que se considera asumible es de 60 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días, casi cinco veces menos que la transmisión actual. En Euskadi, solamente Mutriku y Lekeitio -ni 13.000 habitantes en conjunto en una comunidad de casi 2,2 millones- están en esos parámetros. La consejera ha enfatizado, además, que el final del estado de alarma ha acarreado menos restricciones y más movilidad y contactos y ha emplazado a “seguir siendo prudentes” en lo “familiar, laboral y social” porque la pandemia sigue existiendo.

Con más crudeza ha explicado la falsa sensación de menor riesgo que se está extendiendo la responsable de Salud Pública, Itziar Larizgoitia, que ha comparecido este martes en el Parlamento. Mostrando la gráfica de la positividad, ha subrayado que Euskadi aún no ha llegado al “valle” de esta oleada, es decir, que no ha llegado al nivel de descenso que se ha producido tras otras escaladas. Y ha enfatizado que ese “valle” ha sido en el entorno de 200 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días, “algo muy alto, muy muy alto”. “No hemos bajado de ese nivel desde el verano pasado”, ha lamentado para recordar que, en cada ocasión que se alcanzaba ese punto, la curva repuntaba hacia arriba prácticamente de forma automática. Además, ha insistido en la especial dureza de esta ola en cuando a presión hospitalaria. “Estamos en el día 65 desde que empezó este brote. Y nunca hemos estado tan altos en este momento en términos de ocupación de UCI como ahora. Es un dato absolutamente importante. Esperemos que sobrevivan la mayoría, pero supone dos dimensiones de efectos negativos. Por un lado las secuelas; por otro lado la ocupación de las camas, que es altísima. Limita la capacidad del sistema sanitario para atender otras necesidades sanitarias que continúan existiendo”, ha explicado.

Este lunes, precisamente, se ha retomado la actividad quirúrgica ordinaria en Osakidetza después de tres semanas de parón para liberar espacios y recursos con los que reforzar las UCI, que han alcanzado niveles más propios de la primera ola. Son 389 los pacientes totales ingresados en este momento por COVID-19 después de una jornada con 43 hospitalizaciones. “La caída en el número de ingresos ha permitido que los centros vayan recuperando su actividad”, ha destacado Sagardui.

Larizgoitia ha admitido que los expertos albergan esperanzadas de que esta caída de la pandemia sea más acentuada por el efecto importante de la vacunación. De hecho, en Álava ya se ha visto un descenso más pronunciado, aunque también lo hubo hace unos meses en Donostia y no freno un fuerte repunte posterior. “Podría ser que continúe bajando [al llegar a 200], lo cual sería una grandísima noticia. Esperamos que la vacunación nos suponga un antes y un después”, ha señalado. Eso sí, ha pedido mirar más allá del ombligo de Euskadi, España o Europa ante un fenómeno global. Ha sido muy clara. Si no hay vacunas en todo el mundo, seguirá habiendo brotes “y la epidemia podrá volver de otra manera y de una manera, además, inesperada, con un brote de otra variante diferente procedente de una parte del mundo no vacunada”. “Nos supondría un descalabro. No tendríamos tiempo de reaccionar. Es una situación perfectamente plausible”, ha explicado Larizgoitia en la Cámara.

Once casos de la variante india y seis de la nigeriana; se dan por controladas las de Sudáfrica y Brasil

Precisamente en cuanto a la monitorización de las variantes, la consejera Sagardui ha indicado que las de origen brasileño y sudafricano están ya en recesión después de haber acumulado 462 y 98 casos, respectivamente. Hay también seis casos de la mutación nigeriana y suben a 11 los de la variante india, aunque del subtipo que, en principio, no escapa a las vacunas. “No tiene representatividad y no se puede decir que esté implantada en el territorio”, ha tranquilizado Sagardui sobre esta variante procedente de un país con una muy crítica situación epidemiológica.

Los positivos del día, 280, se reparten en 157 en Bizkaia, 91 en Gipuzkoa y 23 en Álava, además de nueve personas o de fuera o sin residencia conocida. La caída de la incidencia es del 28% en el conjunto del territorio en una semana y el R0 marca 0,80, lo que indica que cada infectado no esparce el virus a más de una persona. Son 48 los centros educativos en los que hay casos de COVID-19, lo que mantiene cerradas 64 aulas. Es el 0,36% del total de la red no universaria.

En cuanto a la campaña de vacunación, Sagardui ha indicado que esta semana han llegado o llegarán algo menos de 80.000 dosis de Pfizer, 14.400 de Moderna y 7.700 de Janssen, mientras que no hay ninguna previsión respecto de posibles remesas nuevas de AstraZeneca. La consejera ha confiado en que, desde junio, Pfizer envíe 127.000 semanales. Actualmente, se completan las franjas de edad de 60 a 70 y de 70 a 80 años y se ha iniciado el proceso de 50 a 60 años, ahora también con los viales monodosis de Janssen. Sagardui ha confiado en que se despeje con celeridad el horizonte de las más de 50.000 personas menores de 60 años con una dosis de AstraZeneca ya recibida y que esperan instrucciones para la segunda.

En nuestros especiales interactivos, se pueden consultar todos los datos sobre la evolución de la pandemia en Euskadi, sobre los positivos y fallecidos en todas y cada una de las residencias de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa y el avance día a día de la campaña de vacunación. También tenemos mapas con los brotes más destacados.

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