Los sindicatos llevan a la Inspección de Trabajo los nuevos coches de la Ertzaintza

Los sindicatos de la Ertzaintza han criticado duramente las propuestas contempladas en un informe encargado por el Departamento de Seguridad para paliar la falta de espacio de los 150 nuevos coches-patrulla modelo Seat León con habitáculo trasero para detenidos, entre ellas la necesidad de hacer “estiramientos” antes y después del turno de trabajo y descansos posturales cada 20 ó 30 minutos. “No exageramos. Con 1,75 ya tienes problemas”, defiende las organizaciones sindicales, que piden una solución definitiva y no paliativa. Una de ellas, Erne, ha denunciado las “múltiples deficiencias” de este automóvil ante la Inspección de Trabajo, con la que se ha reunido este lunes en Bilbao.

En un comunicado, la organización Euspel apunta a que la Administración “dio el visto bueno” al Seat León cuando las bases del contrato de adquisición por el sistema de 'renting' dejaban claras que los modelos con mampara para detenidos en los asientos traseros no debían suponer una merma de espacio en los asientos detenidos, “en concreto de 11 centímetros”. Lamenta también que cualquier acondicionamiento que toque realizar “sería a cargo del erario público”.

El secretario general de Erne, Roberto Seijo, ha calificado de “chiste de Gila” la situación generada. El propio delegado sindical ha salido en un vídeo en informativos televisivos para mostrar el interior de los vehículos. Erne plantea directamente prescindir de estos coches, que curiosamente sustituyeron a los primeros que se compraron, Seat Altea, porque se vieron afectados por el 'dieselgate' del grupo Volkswagen. En la misma línea, Esan entiende que los informes “deberían haberse realizado antes de la adquisición”.