El rodillo del líder no discrimina rivales

El Barcelona disipó las dudas, si las había. 37-27. Fue una lucha desigual. El BM Logroño se aplicó hasta que el dominador de Asobal quiso. Cuando los de Xabi Pascual metieron una marcha más, los franjivinos temblaron. Ocurrió durante la segunda parte. De manera paulatina, casi sin darse cuenta a los de Jota González les costaba un mundo sumar, mientras que el conjunto culé lo hacía con suficiencia. Demasiada. Apenas importó el buen nivel de los riojanos durante los primeros 30 minutos, donde nunca le perdieron la cara al encuentro, lo pelearon. Fueron intranscedentes para los locales. Una sucesión de paradas de Ristovski, varias pérdidas visitantes, y el rodillo catalán salió a escena para ir ampliando la diferencia de manera progresiva hasta un esclarecedor 29-19 pasado el ecuador de la segunda mitad.

Y eso que no hubo miedos de partida. Así salió el BM Logroño al Palau. No fue a ver qué pasaba. Intentó ser protagonista. El Barcelona tomó las riendas desde el arranque gracias a un parcial de 3-0 que dejaba un 4-1 a los 6 minutos, después de dos goles del pivote Syprzak. Los franjivinos buscaban la velocidad para sorprender a su rival en cuanto marcaba gol. A veces daba sus frutos y otras, no. El caso es que un doblete de Paredes en menos de 20 segundos y un tanto de Paredes sirvieron para que los de Jota devolvieran el 0-3 para estar ahí, 6-5, minuto 12.

Hubo alternancia en el juego con goles para los dos equipos. Los de Xabi Pascual querían escaparse, pero el BM Logroño, con un inspirado Miguel Sánchez-Migallón, se estaba rebelando. Dos goles de diferencia tenía el cuadro catalán hasta que apareció Ángel Fernández. El cántabro encadenó goles hasta el 14-13 a falta de 5 minutos para el descanso. Incluso Miguel Sánchez-Migallón pudo empatar. Fue desde un 7 metros, pero Ristovski se hizo muy grande. Espabiló el Barcelona para recuperar los tres tantos de diferencia, 16-13, pero Castro, erigiéndose en protagonista de los riojanos ajustó el marcador para firmar el 17-15 en el intermedio y eso que le señalaron área a Kusan en la última jugada.

FRENO AL ATAQUE FRANJIVINO

La segunda mitad tuvo un protagonista inicial, Ristovski. El portero fue dilapidando las opciones de éxito. Lo hizo colapsando mentalmente a sus adversarios. Quizá también ayudó que la defensa blaugrana se había puesto algo más seria. De esta manera, al BM Logroño le fue imposible continuar el ritmo anotador que marcaba un Barcelona que cogió la directa. Los riojanos se diluyeron en ambos lados de la pista y eso lo acusó de manera definitiva. En un visto y no visto se pasaba al 21-16 y al 25-19 que derivó a un concluyente 29-19 a los 48 minutos.

El trabajo realizado previamente no había servido para nada. El mísero guarismo ofensivo de los riojanos en la segunda parte, 4 tantos en 18 minutos, hizo mella en un conjunto que acudía al Palau lastrado por la ausencia de Del Arco, pero que comprobó que ante un equipo no terrenal para esta Asobal como es el Barcelona hay que mantener la intensidad, el orden y la concentración en las tareas defensivas durante los 60 minutos del encuentro. De lo contrario, cualquier mínimo desvió de la atención genera que pese a cuajar buenos momentos la derrota sea mayúscula.

El duelo estaba sentenciado así que la única esperanza del BM Logroño era intentar que la renta no se disparara en exceso. El problema estaba en que los franjivinos acumulaban errores en ataque. La cabeza ya no estaba en la cancha. El 33-22 era un hecho. Hasta la conclusión, aluvión de goles hasta el 37-27. Como era de esperar, derrota ante el poderoso Barcelona. Quizá se intuía una diferencia menor y durante bastante tiempo se logró. Justo hasta que unos siguieron con su ritmo crucero y los otros había abandonado sus funciones. De lo contrario es difícil de explicar que el BM Logroño acabara con 9 paradas, ni un 20% de efectividad -la defensa tendrá algo que ver-. Ahora en la tabla, lo lógico es que tras esta jornada se retroceda alguna posición, pero no debería hacer mella en las aspiraciones del bloque logroñés.

FICHA TÉCNICA

Barcelona Lassa: Ristovski (p), Sorhaindo (1), Ariño (3), Dolenec (2), Viran, Lenne (3) y Palmarsson (3), siete inicial, Tomás (2), Entrerríos, Rivera (6, 3p), N'Guessan (4), Syprzak (4), Pérez de Vargas (p), Hernández, Mem (7) y Jallouz (2).

BM Logroño: Aginagalde (p), Montoro (3), Chiuffa, Garabaya, Kukic (3), Paredes (3) y Ángel Fernández (4), siete inicial, Miguel Sanchez-Migallón (4), Kusan (2), Garciandia (1), Muñoz (3), Castro (4), Cadarso y Krupa (p).

Parciales cada 5 minutos: 3-1, 6-2, 8-6,11-8, 14-13, 17-15 (descanso), 21-16, 24-18, 26-19, 30-21, 34-23 y 37-27(final).

Árbitros: Sebastián Fernández Molina y Alberto Murillo Castro. No hubo exclusiones.