El segundo polideportivo de Chamberí acabará obras en enero después de encarecerse en 1,2 millones

Chamberí está cerca de tener nuevo polideportivo con piscina, que se unirá al ya existente en Vallehermoso. La constructora Cyopsa-Sisocia está a unos 30 días de terminar las instalaciones del futuro Centro Deportivo Municipal del Parque Móvil después de 21 meses de obras, tres años después de que el Ayuntamiento aprobara su edificación y a siete años vista del último uso de la antigua piscina ubicada en este terreno junto a la calle Cea Bermúdez. Según estimaciones del área de obras, estará acabado a finales de enero.

Los motivos de los retrasos han sido variados. El último fue el de una acometida para el saneamiento mal planificada y rechazada por el Canal de Isabel II, que obligó a aumentar mes y medio el plazo de los trabajos y a gastar 354.617,74 € más de lo previsto, según los documentos municipales a los que ha tenido acceso Somos Chamberí. Antes se había aprobado un gasto extra de otros 883.671,82 € por la aparición en el movimiento de tierras de varios depósitos de combustible no previstos, que obligó a alargar los trabajos otros once meses.

En total, la factura que acabará pagando el Ayuntamiento a la empresa adjudicataria será de 5.938.719,11 euros, 1,2 millones más de lo inicialmente previsto en la adjudicación, cuando se calculó que el polideportivo estaría acabado el 13 de julio de 2020.

Ahora solo resta saber cuándo se llenará la piscina y empezará a funcionar el polideportivo. Una vez acabadas las obras, el consistorio tiene que revisar el edificio para comprobar que todo funciona correctamente y organizar su futura gestión, lo que podría alargar los plazos todavía varios meses. El área de Obras explica que será la Junta de Chamberí la que se encargue de poner en marcha el equipamiento.

También queda la duda del modelo de gestión con el que operará el CDM Parque Móvil. Durante la pasada legislatura se especuló con la posibilidad de que la acometiera de forma directa el Ayuntamiento de Madrid, pero los últimos planes municipales pasan por la privatización de todas las nuevas instalaciones deportivas.

La equipación deportiva recién llegada a Chamberí cuenta con una pista polideportiva y vestuarios en la planta sótano, además de instalaciones comunes en la entraplanta y entrepiso. La piscina cubierta está situada en la primera planta y tiene unas dimensiones de 25x12,50 metros. Además se ha construido un vestíbulo recepción, aseos de planta (incluyendo aseo adaptado), el núcleo de comunicación con escalera y ascensor para bajar a la pista polideportiva y sus vestuarios.

Tres piscinas en 2023... que iban a estar operativas en 2020

El antiguo polideportivo del Parque Móvil cerró en junio de 2014, después de más de siete décadas de servicio primero a los trabajadores de este parque y luego a los vecinos de Chamberí. Los terrenos fueron cedidos al Ayuntamiento por Patrimonio del Estado justo después del cierre, para que ejecutara las obras de construcción de una nueva instalación deportiva. Esta se levanta en un área de Madrid peculiar, enclavado en la Colonia de San Cristóbal, junto al Parque Móvil del Estado, el enorme edificio que usa el Gobierno nacional para aparcamiento y reparación de vehículos.

Con la construcción del Centro Deportivo del Parque Móvil serán tres las piscinas municipales de las que puedan disfrutar los vecinos de Chamberí. La ya citada, la del Centro Deportivo de Vallehermoso (en Islas Filipinas) y la que se va a construir junto a Cuatro Caminos, a un paso del distrito, que iba a contar también con pista polideportiva y gimnasio pero que en el proceso de privatización iniciado por el equipo de Almeida perdió la cancha para practicar fútbol o baloncesto a cubierto.

Los polideportivos del Parque Móvil y de Cuatro Caminos fueron aprobados en la época de gobierno de Manuela Carmena, con la intención de que estuvieran disponibles en la segunda mitad de 2020, pero los retrasos constructivos en el primer caso y la anulación del concurso para otorgar la construcción y explotación durante 25 años a una empresa privada en el segundo retrasarán su puesta en marcha hasta una fecha aún no concretada.