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Protesta vecinal en Madrid por una multa de 601 euros a un manifestante que usó un megáfono

Un momento de la manifestación de hace un año en Carabanchel

Somos Madrid

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Multa a un vecino en Madrid por gritar consignas a través de un megáfono durante una manifestación autorizada. Lo que es una imagen habitual en cualquier protesta se ha traducido en una multa de 601 euros, impuesta por el Ayuntamiento de Madrid, que se ampara en la ordenanza municipal de contaminación acústica y en la conocida como Ley Mordaza.

Los hechos ocurrieron hace casi un año, el 29 de marzo de 2023, durante una protesta autorizada para pedir la apertura de un Centro de la Memoria ante la antigua cárcel de Carabanchel. Participaron en la manifestación un centenar de personas. Una de ellas fue Pedro Casas, conocido activista de la zona, que gritaba consignas como “verdad, justicia y reparación” a través de un megáfono, explica a El País. Un agente de Policía Municipal le exigió que dejara de usar el aparato, a lo que se negó.

Ocho meses después llegó una multa procedente de la Junta Municipal de Latina informando del inicio de un expediente sancionador por “resistencia a la autoridad” por la Ley de Seguridad Ciudadana y también alegando “molestias al vecindario”. La protesta se desarrolló en un lugar donde no hay viviendas alrededor y sin mayor incidente que el de la petición de que se dejara de usar el megáfono.

El Ayuntamiento de Madrid ha rechazado todas las alegaciones presentadas y ya se encuentra pendiente de respuesta a un recurso de alzada. Los vecinos de Carabanchel que convocaron la protesta consideran que un megáfono es “un instrumento imprescindible para el buen desarrollo de la manifestación, tanto al inicio como al finalizar la marcha, y para la lectura del comunicado final”. Además, señalan que “las ordenanzas municipales distinguen claramente lo que es una publicidad comercial de la que tiene finalidades sociales o políticas”, por lo que consideran que su protesta “queda al margen” de sus limitaciones.

Por último, añaden que “la supuesta resistencia a la autoridad se produjo una vez finalizada la manifestación, por lo que difícilmente se pudo producir tal desobediencia”. Por el contrario, consideran que la actuación de la Policía Municipal en este caso “resulta un claro abuso de autoridad inaceptable”. 

Manifestación por la anterior protesta

Una veintena de colectivos vecinales, de memoria democrática, sociales y políticos se han unido a una protesta convocada este jueves por la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) para protestar por una multa que, consideran, “pone en peligro el ejercicio del derecho fundamental de la libertad de expresión y manifestación”.

La concentración tendrá el lema “El Ayuntamiento de Almeida recorta la libertad de expresión” y se celebrará a las 17.30 horas ante la Junta Municipal de Latina, en Aluche, que este jueves celebra un pleno en el que los vecinos indignados por esta protesta tendrán voz.

La multa por la protesta tuvo lugar en una época en la que la agentes de la Policía Municipal impuso varias multas a protestas ciudadanas, algunas de las cuales fueron enmendadas por sus superiores. Fue el caso de las dos sanciones que imputaron a varios activistas que repartían folletos sobre marchas en favor de la Sanidad Pública. En Chamberí, su concejal de distrito ordenó también sancionar a una asociación que recogía firmas de protesta contra un desalojo. El consistorio acabó siendo condenado por estos hechos.

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