Un informe de Osakidetza cuantifica en 311 los fallecidos en residencias cuando las diputaciones han informado de más de 600
Los datos del Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) sobre el perfil de los fallecidos en la pandemia aluden a 311 decesos entre internos de residencias y a 1.166 entre el resto contagiados, 1.477 en total hasta el 22 de mayo. Ésa es una cifra coincidente con los informes diarios de Osakidetza en aquel momento, que hablaban de 1.487. Sin embargo, a tenor de la información recopilada por este periódico durante los más de 100 días de pandemia, esa cifra negra en las residencias llega hasta como mínimo las 612 personas finadas y sin contar casos sospechosos no confirmados (un mínimo de 32 más). En concreto, Bizkaia informó de 285 fallecimientos el 31 de mayo, Gipuzkoa marca ahora 168 -y apenas se ha confirmado un caso en las últimas semanas- y en Álava eran en aquel momento más de 150 casos sumando los centros forales y municipales.
Los informes de Osakidetza muestran que 570 de 3.096 ancianos -excepcionalmente también hay algunos dependientes más jóvenes- que estaban internos en residencias con positivo confirmado en COVID-19 fueron ingresados en los hospitales, un 18%. Entre el resto de 16.674 enfermos, fueron 4.963 los hospitalizados (31%). El matiz es que otro 13% de los residentes fueron derivados a centros especiales habilitados como alternativa hospitalaria, Zadorra en Vitoria, Birjinetxe, Unbe y Santurtzi en Bizkaia y Cruz Roja y ahora el área sociosanitaria de Eibar en Gipuzkoa.
Lo que sí cambia es la tipología de atención hospitalaria recibida. Solamente 11 ancianos han entrado en las UCI (menos del 2%) frente a 470 pacientes no residentes (casi 10%). Además, la estancia media en cuidados intensivos es de unos 12 días por 15 para el resto de infectados. Por el contrario, en planta la duración del ingreso es muy similar, de entre 10 y 11 días. Un 96,43% de los enfermos de COVID-19 ha recibido el alta, pero la proporción baja hasta el 92,11% en el caso de internos en residencias, lo que supone que la mortalidad es más elevada.
Sin casos activos en Álava
Por otro lado, este martes la Diputación de Álava ha anunciado que no quedan casos activos de coronavirus en ninguno de los centros bajo su dependencia, que son las residencias públicas forales, los centros privados y los municipales de poblaciones diferentes a Vitoria (unas 3.900 plazas). En Vitoria, concretamente en el centro Sanitas del barrio de San Martín, se detectó el primer brote en una residencia de ancianos en Euskadi y la primera cuarentena allá por el 8 de marzo. Por el camino, en estos centros se han quedado 140 más las 14 de la residencia San Prudencio del Ayuntamiento de Vitoria y otros casos en hogares de discapacitados o de la diócesis. Por el contrario, 415 personas han superado la enfermedad.
En Gipuzkoa solamente el centro GSR de Aretxabaleta tiene positivos. Son tres y han sido derivados al hospital de Eibar. Lo fueron cuando surgió un caso hace unos días por vez primera en semanas, una interna que dio positivo en el hospital de Txagorritxu de Vitoria. Ha fallecido en las últimas horas, una de las pocas defunciones registradas en junio debido a la COVID-19. En Bizkaia, son aún 25 los casos de dos residencias afectadas.
0