El PNV enfría la pretensión de Montoro de aprobar ya los presupuestos: “El 155 es una línea roja”
El líder del PNV, Andoni Ortuzar, tiene una relación “buena y fluida” con el líder del PP y presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy. Así lo admiten fuentes próximas al presidente peneuvista, que añaden a esa 'línea caliente' política entre ambos líderes una “confianza personal” que les ha permitido a ambos poner las cartas boca arriba en todo lo relacionado con el desafío soberanista catalán y el ahora inviable apoyo de los peneuvistas a las Cuentas que el Ejecutivo pretende aprobar este martes en un Consejo de Ministros extraordinario, tras pactarlas con Ciudadanos.
Y en ese clima de confianza, Ortuzar ya le ha explicado a Rajoy que el PNV no va a ceder en materia presupuestaria -de hecho, los peneuvistas mantienen su negativa incluso a ponerse a discutir sobre aspectos concretos de las Cuentas de 2018- mientras la espada de Damocles del 155 siga sobrevolando por encima de las cabezas de los políticos catalanes y sus instituciones de autogobierno. “Ya le hemos dicho a Rajoy que vamos a cumplirlo a rajatabla. Nosotros no somos como Rivera, que cambia de opinión cada día. Con la excepcionalidad del 155 sobre Catalunya no es posible empezar a negociar los Presupuestos. No estamos dispuestos a legitimar la aplicación del 155 en Catalunya sumando nuestros votos a los del PP y Ciudadanos”, remarcan las mismas fuentes.
Esta máxima ha sido discutida (y revalidada) este lunes en la reunión habitual de la Ejecutiva del PNV, en Sabin Etxea, sede central del partido, después de que el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, hubiera anunciado los términos del acuerdo presupuestario con el PP y dado también por hecho que Rajoy contaba con el apoyo del PNV. El pacto entre la formación naranja y el partido del gobierno incluye una rebaja en el IRPF que afectará a más de 7,2 millones de pensionistas, un sector de los cuales -los que ingresen entre 600 y mil euros y las pensiones de viudedad más bajas- también verá incrementada su pensión un 2%, un porcentaje por encima del IPC.
Un pacto aderezado, además, con esta declaración por parte de Rivera: “Sería increíble que después de haberles concedido el privilegio del cuponazo no tuviera atado ese apoyo a los PGE”. Algo que en Sabin Etxea ya no quieren ni valorar, más allá de desautorizar y negar, como han hecho en varias ocasiones durante todos estos meses en Madrid (Aitor Esteban) o en Euskadi.
Los de Ortuzar -con un argumento que también ha utilizado el líder independentistas vasco Arnaldo Otegi: “hoy es Catalunya y mañana será Euskal Herria” tras los encarcelamientos de políticos independentistas catalanes- no descartan que la onda expansiva del 155 llegue a Euskadi. “Y que se pueda aplicar también a Euskadi, lo mismo que antes se han producido las sentencias del Tribunal Constitucional que cercenan nuestro autogobierno o la normativa básica estatal”, en un tono con cierto deje de sobreactuación, al menos en lo que tiene que ver con futurible 155 en Euskadi.
De hecho, no hay desafío alguno en Euskadi en torno a su autogobierno y la relación futura entre Euskadi y España. Ni lo hay en ciernes, máxime cuando el lehendakari ha dejado claro en todas sus exposiciones públicas y privadas sobre el futuro “nuevo estatus político” para el País Vasco que será “pactado”, nunca unilateral, “buscando el máximo consenso entre diferentes” y “tramitado de acuerdo con las normas y los procedimientos legales vigentes, respetando el ordenamiento jurídico, los métodos democráticos y los derechos y las libertades de la ciudadanía”. Condición ésta última que está incluida en el pacto sellado al inicio de la legislatura entre PNV y PSE-EE.
Pensiones y transferencia de la Seguridad Social
Hay otra realidad, además, relacionado con el pacto sellado entre el Gobierno del PP y Ciudadanos que no ha pasado desapercibido al PNV. Es la que tiene que ver con las pensiones y la respuesta que se ha dado en las Cuentas para 2018 a las masivas movilizaciones de los pensionistas, cuya mecha se encendió muy pronto en Bilbao y donde ha prendido la marea indignada de pensionistas. Entre otras cosas porque el PNV y el Gobierno vasco han colocado como prioritaria en la negociación con el Gobierno central dos transferencias pendientes como las Prisiones y, sobre todo, el Régimen Económico de la Seguridad Social, competencia esta última íntimamente ligada con del futuro de las pensiones.
Para los peneuvistas, no se entiende muy bien que Rajoy haya ligado el tema de las pensiones a la aprobación de los Presupuestos para este año, sabiendo sobre todo que el Régimen Económico de la Seguridad Social forma parte de la negociación que debe estar encima de la mesa entre las administraciones central y vasca. “Esta sería una segunda parte de la que deberíamos hablar, una vez que superado el 155 y abierta oficialmente la negociación”. Un escenario, la apertura de una negociación, difícil de fijar temporalmente, visto cómo se suceden los acontecimientos desde el encarcelamiento el viernes de los políticos independentistas en España por orden del juez del Supremo Pablo Llarena y la detención el domingo de Carles Puigdemont en Alemania.