Retratados con 'o' de señoros

Que sí que es chocante que no haya ninguna mujer entre los representantes empresariales, los gordos, que han ido a lo suyo y a por lo suyo al retratarse con Javier Milei, conducidos por el presidente de la patronal Antonio Garamendi; pero eso no es culpa del argentino, será su culpa y de los que lo votan, lo que pase en Argentina, de lo que está pasando aquí con la patronal y los señoros de Garamendi es responsabilidad nuestra, solo nuestra. Es más, si hubiera habido alguna mujer, la foto sería igual de indecente. Ni siquiera era una visita oficial. 

Machismo, sí, hediendo, pero la foto apesta más a extrema derecha desbocada, a ataque a la convivencia de las democracias europeas, a un futuro que los demócratas no deberían desear ni para España ni para Europa. Pero ellos a lo suyo y con los suyos, con la mejor encarnación de Antonio Garamendi, muy fotogénico, se le veía a gusto, lo mismo está alegre en esa foto que recibido con carantoñas por la ministra de Trabajo y Economía Social para luego ponerse al frente contra las reivindicaciones de los trabajadores, de los intereses de los pequeños empresarios y la economía social, pongamos solo como ejemplo el SMI o la negativa a contribuir vía fiscal a las cargas del Estado, contra lo público. Amplia coincidencia con el discurso del estrafalario presidente argentino.  

Se sienten seguros, otros de los suyos no salen en la foto pero saben que no los retratarán tan mal. Al fin y al cabo, controlan una buena parte de los medios españoles, o en su capital o gracias a las ingentes sumas en publicidad que jalonan muchas veces las malas noticias y los bulos.

Los medios públicos también están controlados por otras vías. No se hará mucha sangre. Los mejores maestros de la economía siempre afirman que con la democracia política siempre viene  la económica en el mismo paquete, además de una ética, estética y responsabilidad corporativa. Poco caso por estos lares.

La foto de la infamia ha coincidido con el manifiesto de más de treinta empresas alemanas, públicas y privadas, llamando a la resistencia activa frente al auge de la extrema derecha. El peligro más inmediato lo detectan en los próximos comicios al Parlamento europeo, para eso, para asaltar Europa, se ha reunido la internacional ultraderechista en Madrid, últimamente el parque temático elegido por los extremistas antidemocráticos europeos y ultramarinos. “Defendamos nuestros valores”, así se titula el manifiesto de las empresas alemanas, pero ¿cuáles son los valores del Ibex 35 y de la patronal de Garamendi?

En Alemania tienen mucha experiencia, algunas de esas empresas ya apoyaron el advenimiento de Hitler y el nazismo durante la República de Weimar y durante el nazismo en el poder y la guerra: hoy se arrepienten. A Garamendi le gusta la estabilidad, le molesta la inestabilidad, teme a la extrema izquierda pero se masajea con la derecha extrema y comparte sus prédicas. Otra asignatura pendiente más de la joven democracia española.