La Junta recuerda a las víctimas del franquismo en el refugio antiaéreo de la Plaza de Santiago de Jaén

El director general de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía, Luis Naranjo, y la delegada de la Junta en Jaén, Purificación Gálvez, han descubierto este miércoles la placa que señala al refugio antiaéreo ubicado en la Plaza de Santiago de la capital como Lugar de Memoria Histórica, consideración que recibió por acuerdo del Consejo de Gobierno el 20 de marzo de 2012, al igual que el refugio de la Plaza de San Juan de Dios y otros 13 emplazamientos, y con la que se pretende “homenajear a las víctimas del franquismo y la Guerra Civil”.

Así lo ha subrayado Gálvez en declaraciones a los periodistas antes de descubrir el monolito que desde este miércoles puede contemplarse a la entrada de dicho refugio antiaéreo, que recuerda a las 159 personas que murieron en el bombardeo “fascista” que se produjo sobre la capital jiennense el 1 de abril de 1937, en plena Guerra Civil, y que provocó además “centenares de heridos”.

La delegada ha argumentado que “una sociedad se fortalece a sí misma si recuerda los acontecimientos que en un momento determinado provocaron una destrucción de esa sociedad”, a la vez que ha defendido que “no es el olvido y el silencio lo que deben perdurar” en una población, sino “decisiones encaminadas a poner en valor la justicia, la libertad y los derechos humanos”.

En la misma línea, el director general de Memoria Democrática, Luis Naranjo, ha subrayado que con este acto se cubre “otro paso en el reconocimiento de la verdad de la Guerra Civil y la dictadura” franquista, al tiempo que ha recordado que el artículo cuatro del anteproyecto de Ley de Memoria Democrática de la Junta “define con mucha claridad” los Lugares de Memoria, concebidos como “aquellos territorios que de forma relevante nos recuerdan episodios de represión y resistencia del pueblo defendiendo los valores democráticos”.

Según Naranjo, el refugio de la Plaza de Santiago, de 1.300 metros cuadrados de superficie y con capacidad para unas 1.000 personas, “cabe perfectamente” en esa definición, en tanto que “fue un lugar de resistencia popular a las agresiones que llegaban desde el aire, unos bombardeos a la retaguardia sin ningún valor militar que provocaron centenares de víctimas, no solamente en Jaén sino en el conjunto de la España republicana”, según ha abundado.

Para el director general de Memoria Democrática, “cada monolito” que se inaugura es “un libro abierto grabado en la piel de Andalucía” y “un esfuerzo de divulgación de la verdad”. Se trata, según ha insistido, de “monumentos a la contribución popular al esfuerzo de guerra”, lo que les confiere “un valor inmenso”.

Naranjo también aprecia “valor cultural” en los Lugares de Memoria Histórica, en los que, según ha enfatizado, se unen “memoria y cultura”, porque “un pueblo que olvida su memoria o no la conoce difícilmente puede ser culto, y al contrario, la cultura por la que nos esforzamos incluye también el conocimiento veraz del pasado reciente de nuestros pueblos”.

Al hilo de la utilidad de ese refugio como lugar al que la población acudía cuando había “amenaza de bombardeo”, Naranjo ha señalado que “los presidentes de los gobiernos republicanos, tanto Francisco Largo Caballero como Juan Negrín, insistieron mucho en tratar de llegar a un acuerdo con Franco, con el bando rebelde, para que no se produjeran bombardeos en retaguardia”, algo a lo que éste, según ha criticado, “se negó”.

De esta forma, el bando franquista “usaba los bombardeos como armas para imprimir terror a la población para que no siguiera luchando, como una forma de desmoralizarla”, según ha abundado Naranjo, para quien “lo deseable” es que el refugio permaneciese abierto para que “cumpliesen su papel de divulgación”, si bien ha recordado que “la protección y el mantenimiento de los Lugares de Memoria, por ley, es competencia municipal”.

Además de Gálvez y Naranjo, en el acto de señalización como Lugar de Memoria Histórica del refugio antiaéreo de la Plaza de Santiago han participado, entre otros representantes públicos, las delegadas territoriales de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, Ana Cobo, y de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Ángeles Jiménez; la responsable provincial de la Oficina de la Vicepresidencia, Marisol Gutiérrez; y la diputada provincial de Igualdad, María del Mar Shaw.

CÁRCEL DE ÚBEDA

Por otra parte, el director general de Memoria Democrática ha asegurado, a preguntas de los periodistas, que la Junta “no tiene constancia oficial” del expediente que promovería la declaración de la cárcel de Úbeda como Lugar de Memoria, algo en lo que la Administración andaluza está “muy interesada”, según ha apuntado.

“Sé que hay una iniciativa en ese sentido”, ha apuntado Naranjo, que ha reiterado que para que se produzca ese reconocimiento como Lugar de Memoria es necesario “el acuerdo plenario” que permitiría “poner en marcha el proceso, que tarda meses, porque primero hay un comité técnico y científico, y luego se pasa a un comité interdepartamental”, según ha apuntado.

En ese sentido, cabe recordar que el Consejo de Gobierno del 27 de diciembre de 2013 declaró 34 nuevos Lugares de Memoria Histórica en las ocho provincias andaluzas, entre ellos, las fosas comunes de los cementerios de los municipios jiennenses de Andújar, Martos, Linares y Úbeda, y que en la provincia de Jaén también gozan de esa consideración los vestigios de la Batalla de Lopera.