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Aragón mantiene la precaución ante un día con aviso amarillo por precipitaciones en zonas de Teruel y Zaragoza

ElDiarioAragón

31 de octubre de 2024 11:05 h

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Tras las riadas y desbordamientos vividos ayer en muchos puntos de Teruel y Zaragoza, la situación en Aragón es ahora “de calma” aunque manteniendo la precaución. Asó lo ha dicho el consejero de Hacienda, Interior y Administración Pública del Gobierno de Aragón, Roberto Bermúdez de Castro, tras la reunión del Centro de Coordinación Operativa (CECOP) celebrada este jueves. Preocupa especialmente la situación en varias zonas de las provincias de Teruel y de Zaragoza, donde se esperan hasta 100 litros por metro cuadrado desde las 12:00 a las 18:00.

En la provincia de Castellón, vecina de Teruel, se ha activado la alerta roja por precipitaciones muy intensas. La Dirección General de Tráfico (DGT) ha solicitado a los ciudadanos que no se desplacen a la provincia de Valencia durante este puente ya que, a pesar de la ausencia de lluvias en la provincia, muchas de las carreteras no están habilitadas para circular.

La zona del Matarraña, donde ya ha llovido mucho y el suelo no puede absorber el agua, es una de las que mantiene controlada el Gobierno de Aragón por riesgo de desbordamientos. También en el Bajo Aragón-Caspe y en la zona del Maestrazgo. Las lluvias que se esperan este jueves en los Puertos de Beceite y el Maestrazgo, que podrían localmente superar los 100 litros por metro cuadrado, pueden provocar crecidas importantes en el Matarraña, Algás, Bergantes (Teruel y Castellón) y barrancos del Bajo Ebro (Tarragona), según ha informado la Confederación Hidrográfica del Ebro.

Se extreman las precauciones también en la zona del Huerva, donde han trabajado los bomberos aunque la Confederación Hidrográfica del Ebro considera que el río va a poder soportar la carga de agua. En los ríos Mesa y el Piedra, que provocaron este miércoles inundaciones, los niveles van a reducirse mucho más lentamente que otros ríos por las características geológicas especiales de estas dos cuencas.

Los embalses han tenido un efecto laminador fundamental. Cueva Foradada redujo los caudales del tramo bajo del Martín de 120 metros cúbicos por segundo a 20; el sistema Santolea-Calanda redujo los caudales del tramo bajo del Guadalope de 400 metros cúbicos por segundo a 10, y Torcas-Mezalocha está reduciendo el caudal del Huerva de 50 metros cúbicos por segundo a 20.

En el entorno del balneario del Jaraba las carreteras están cortadas, 80 personas permanecen atrapadas y, por el momento, continuarán allí. Sería posible su evacuación si fuese necesario, pero por el momento se mantienen en el balneario. Los bomberos de la Diputación de Zaragoza se desplazaron ayer hasta el complejo que se vio afectado por la crecida del río Mesa. Por otro lado, se procedió al rescate de los cuatro ocupantes de un coche que se encontraba en las inmediaciones del balneario y que también están a salvo.

La situación en las carreteras se va solucionando “poco a poco”, Bermúdez de Castro ha explicado que no ha habido roturas de carreteras, sino que han sido desprendimientos e inundaciones, que se van solucionando conforme suceden. Piden también que se eviten los desplazamientos, especialmente en zonas rurales por caminos y cauces de barrancos, porque las venidas de agua son muy súbitas.

Tres carreteras de la provincia de Teruel permanecen cortadas por lluvias e inundaciones: la N-330 entre Libros y El Campo, la TE-V-4301 y la TE-28. La Diputación de Teruel evalúa los daños que se han producido en distintos puntos de la provincia tras una noche de intensas tormentas. Los principales daños se han dado en municipios como Olba, Montalbán, Blancas, Odón, u Orihuela del Tremedal, donde ha habido desbordamientos de ríos y daños en infraestructuras.

Además de estas carreteras nacionales, están cortadas al tráfico las autonómicas A-202 a la altura del Monasterio de Piedra; la A-1105 entre Pina de Ebro y Gelsa; la N-2 entre Pina y Bujaraloz (kilómetros 364 al 390) y la A-1506 en Badules y en Virgen de Herrera.

En Aragón no se han notificado daños personales, pero sí que ha fallecido en Valencia un guardia civil nacido en Teruel. El consejero ha enviado el pésame a la familia y a todos los afectados y han reiterado la oferta a la Comunidad Valenciana para los equipos que se necesiten.

Afecciones durante la noche

Los bomberos de la Diputación de Teruel estuvieron trabajando anoche en labores de limpieza y achique de agua en la localidad de Libros, después de que el Turia se desbordara y afectara principalmente a las calles de la localidad y comenzara a meterse agua y barro en la iglesia. Los bomberos colaboraron en los trabajos de retirada de barro y agua y en labores de prevención, desde las 21:30 hasta pasada la medianoche.

Efectivos de bomberos también están llevando agua de boca a las localidades de Navarrete e Híjar, cuyos abastecimientos se han visto afectados por las lluvias.

La Diputación ha desplazado maquinaria del Área de Caminos Rurales hoy de nuevo a Montalbán, y también se incorporará este jueves un equipo de maquinaria a La Hoz de la Vieja para realizar labores de limpieza, trabajo en el que también colaboran en Montalbán los bomberos de la DPT. 

Los vecinos de la localidad turolense de La Hoz de la Vieja prosiguen este jueves las tareas de limpieza de sus casas y calles, tras los estragos causados por una tormenta torrencial que desbordó el cauce de la rambla que la atraviesa y arrasó las pasarelas que comunican las dos partes en las que está dividido el casco urbano. La población, que no alcanza el centenar de habitantes, permaneció este miércoles sin suministro de agua corriente, pero mantiene el de la luz y ha recuperado la cobertura telefónica en una jornada en la que la principal tarea es limpiar el barro que lo cubre todo en las plantas bajas y garajes de las viviendas más próximas al cauce desbordado.

“Afortunadamente aquí no ha habido daños personales ni desaparecidos como estamos viendo en la tele, pero los destrozos han sido enormes”, comparte José Antonio, vecino de la localidad, a la que Protección Civil y el Ayuntamiento suministraron agua potable embotellada para salvar las primeras horas de caos. El pueblo entero se remangó para echar una mano en las zonas comunes y propiedades particulares, tal y como destaca este vecino: “Llegamos más que menos porque aquí casi todo el mundo tenía alguna zona afectada por el agua y en todo caso había que echarse una mano para limpiar los cerros de los vecinos. Mucha gente que tiene allí segundas viviendas y que se iba enterando de lo sucedido acudió a lo largo del día, para ver los daños y limpiar su casa”.

La fuerza del agua de bajada, según ha recordado, “deshizo” las pasarelas y “las arrastró” y llevó diversos materiales a las propias viviendas situadas junto al cauce. Unas infraestructuras que han dejado incomunicadas ambas zonas de La Hoz de la Vieja: “Para ir de una orilla a otra es una película, porque hay otro puente, un puente mucho más alto ya de la carretera, pero, claro, hay que desplazarse y hacer una caminata tremenda para pasar de un lado a otro”, comenta este vecino, que recuerda otro episodio incluso peor ocurrido hace más de una década.

“Tuvimos una tromba parecida en 2013, que nos pareció que fue muy gorda y esta ha sido, quizá, un poquito menos, pero de las mismas características”, ha apuntado.

Desde ayer trabaja en Montalbán un equipo compuesto por máquina giratoria y dos camiones, retirando materiales para que el agua dejara de entrar en las viviendas. A lo largo de la tarde el agua volvió al canal y a lo largo de esta jornada, están colaborando con el Ayuntamiento en la retirada del material acumulado.

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