Alerta alimentaria “grave” por presencia de pesticidas en naranjas procedentes de España
La Unión Europea (UE) ha emitido una alerta alimentaria recientemente que ha calificado como “grave”. En este caso, la alerta afecta a fruta cultivada en España, en concreto se trata de naranjas en las que se ha detectado una sustancia denominada Imazalil, un pesticida que podría generar problemas de salud derivados de su consumo.
El Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF, por sus siglas en inglés) ha emitido una notificación en la que especifica que las cantidades de Imazalil detectadas en esas partidas de naranjas superaban los límites permitidos. El Imazalil es un fungicida empleado en el control de plagas de algunas cosechas para evitar enfermedades por hongos tanto en árboles frutales, como ornamentales. Se emplea también para el tratamiento de semillas.
Los límites establecidos por las autoridades europeas no pueden superar más de 4 mg/kg y en las partidas de naranjas bloqueadas se halló una cantidad de más del doble de Imazalil, 8,5 mg/kg.
El caso fue detectado por las autoridades galas el pasado 20 de diciembre. Francia es uno de los países receptores de naranjas procedentes de España. Los lotes fueron retirados del mercado inmediatamente.
En el caso de los cítricos es muy importante consultar qué tipo de pesticidas y otros productos químicos se han utilizado para su cultuvo y conservación. Se trata de un información que debe estar claramente indicada en las etiquetas del paquete o malla de naranjas, mandarinas, limones o pomelos. En el caso de compra a granel, puedes consultar al establecimiento.
Entre los nombres y siglas que aparecen en el etiquetado, se encontrará con toda probabilidad alguno de estos:
- Algunos conservantes como el sorbato potásico o E202.
- Las ceras como la E901, la E904, la E912 o la E914.
- Y antifúngicos como el IMZ o Imazalil; el PM o Pyrimethanil (pirimetanil en castellano); el TBZ o Thiabendazol (tiabendazol en castellano) o el OPP u Orthophenylphenol (ortofenilfenol en castellano).
Son sustancias y productos cuyo uso no está prohibidido por las autoridades sanitarias de la Unión Europea, pero sí que se obliga a que se declare en el etiquetado y que se respeten unos límites de cantidades para garantizar que no son dañinas para el ser humano cuando se consumen.
Los fungicidas como el Imazalil, el Pirimetanil, el Tiabendazol o el Ortofenilfenol son un cóctel para frenar la aparición de hongos en las frutas tras su recolección, y se suelen aplicar en el momento del lavado o encerado.
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