La chundarata de Gema Igual al frente del Ayuntamiento de Santander
Nadie dijo que gobernar fuera fácil, pero la travesía de Gema Igual (PP) a los mandos del Ayuntamiento de Santander está siendo especialmente convulsa. Y es que, a pesar de que solo lleva diez meses en el cargo, la regidora municipal ha tenido que hacer ya frente a varias crisis de gobierno muy sonadas, entre ellas, una moción de censura.
Igual (Santander, 1973) tomó posesión de la alcaldía el pasado mes de noviembre en sustitución de Íñigo de la Serna, llamado por Mariano Rajoy para ostentar la cartera de Fomento. En su primer discurso, garantizó “trabajo y entrega absoluta” y prometió un proyecto continuista.
Aquel pleno de investidura no estuvo exento de sobresaltos. En el recuento, salieron más votos (30) que concejales (27), con lo que la votación tuvo que repetirse. Un pequeño escollo para las adversidades que se están sucediendo durante su breve pero intenso mandato, en algunos casos por su responsabilidad directa y en otros por la de sus fieles.
La primera gran crisis llegó el pasado mes de marzo a raíz de la exclusiva publicada por eldiario.es. Tal y como desveló este diario, la alcaldesa modificó su perfil oficial, en el que figuraba como “Diplomada en Magisterio”, horas después de que la entonces directora general del Observatorio de la Salud del Gobierno de Cantabria, Estela Goikoetxea (PSOE), dimitiera por haberse atribuido un título universitario que no tenía.
La alcaldesa se justificó asegurando que desconocía el “error” y afirmó que se percató del mismo cuando dimitió Estela Goikoetxea y ordenó a su equipo revisar su perfil para comprobar si había algún dato incorrect . Sin embargo, además de en la biografía publicada en la web del Ayuntamiento, dicho título también figuraba en las comunicaciones oficiales de su partido, la mayoría de las cuales fueron borradas.
¿Es posible que Gema Igual no supiera que durante años la web del Ayuntamiento y su partido le atribuía una formación académica de la que carecía? La oposición no creyó su versión y pidió insistentemente una dimisión que no se produjo. Para arropar a Igual, el PP movilizó a un grupo destacado de militantes, a quienes convocó al Pleno ordinario en el que se debatió la moción de censura. Durante el transcurso de una iniciativa previa sobre la 'Querella Argentina', uno de los asistentes gritó “¡Viva Franco!”, sin que la regidora ordena su expulsión, pese a las reclamaciones hechas por el edil socialista, Javier Antolín.
Igual tampoco ha mostrado, a juicio de la oposición, la contundencia que requería en otro de los escándalos más recientes, la islamofobia expresada por el jefe de Cultura del Consistorio, Enrique Álvarez, quien en un artículo publicado en El Diario Montañés tildó el Islam como “perverso” y, entre otras cosas, responsabilizó a este religión de haber traído al mundo “un sinfín de guerras”. El “respeto absoluto” manifestado por la dirigente a una “opinión personal” ha suscitado las críticas de varios partidos y asociaciones. El debate llegará al próximo pleno municipal.
El derrumbe de Sol
También reciente ha sido el derrumbe de parte de un edificio en la calle Sol, junto al barrio de Tetuán. El suceso, ocurrido el 19 de julio, no ha ocasionado víctimas debido a que el inmueble fue desalojado horas antes gracias a que los vecinos dieron la voz de alerta, pero sí ha supuesto un terremoto político en la 'Casona'.
La agilidad en la concesión de las licencias y la falta de diligencia de los servicios municipales en la supervisión y control de las obras llevadas a cabo en el local de hostelería situado en los bajos del bloque ha provocado una cascada de críticas por parte de la oposición, que denuncia un posible “trato de favor” del concejal de Urbanismo, César Díaz, a la empresa promotora -Dos Imanes Producciones-.
Todos los partidos han exigido la dimisión de Díaz, a quien consideran el principal responsable por ignorar las advertencias vecinales, mientras que Igual ha defendido su “valía” y ha sostenido que “lo más fácil es que se vaya alguien” y “lo más difícil es trabajar, el día a día, saber qué ha pasado y a partir de ahí, buscar responsabilidades”. La oposición volverá a pedir la dimisión del concejal de Obras en el próximo pleno, en el que también demandarán abrir una comisión de investigación.
La alianza con C's
Otra de las cuestiones que más polvareda ha levantado en la política de la capital es un supuesto pacto oculto entre el PP, que gobierna en minoría, y los dos concejales de Ciudadanos, David González y Cora Vielva, quienes han pasado a la condición de no adscritos tras abandonar el partido por una disputa interna.
González y Vielva facilitaron la investidura de De la Serna a cambio de un acuerdo que no incluía exigencias palpables y este apoyo, heredado ahora por la nueva alcaldesa, se ha mantenido inquebrantable en todo lo que llevamos de legislatura, incluso llevando a estos ediles a votar en el pleno en contra de iniciativas que ellos mismos habían presentado.
La última de las medidas adoptadas por ambas formaciones que alimenta esta sospecha es el cambio en el reglamento orgánico que pretendía dejar fuera de las comisiones al otro edil no adscrito, Antonio Mantecón. El portavoz de Santander Sí Puede aseguró que la medida presentada por el PP y apoyada tan solo por los dos concejales tránsfugas suponía “prevaricación de libro” y anunció que acudiría a los tribunales. Finalmente, una semana más tarde el PP tuvo que dar marcha atrás y acordar una nueva reorganización municipal para evitar dicha denuncia, estableciendo por primera vez en el Consistorio un sistema de voto ponderado.