La pareja desahuciada que la Generalitat quiere enviar a prisión dice que los Mossos les causaron pánico
Ha arrancado el juicio a una pareja del barrio del Clot de Barcelona que fue desahuciada en 2011 y a tres personas que intentaron oponerse al lanzamiento. Verónica L. y Eliseo L. han declarado ante la jueza que sintieron pánico al ver que agentes de los antidisturbios de los Mossos d'Esquadra entraban en su casa por el balcón a través de una escalera para desahuciarles. El marido ha asegurado que un agente le dio un puñetazo. Según la mujer, la comitiva judicial dio cinco minutos a la familia para recoger todas las cosas del hogar donde habían vivido durante 26 años. Todo ello mientras su hijo pequeño estaba en la casa.
Ambos se exponen a 2 años y tres meses de prisión por un presunto delito de atentado a la autoridad de los Mossos d'Esquadra y una falta de lesiones. Es la pena que ha mantenido la Generalitat, que ejerce de acusación particular, antes de empezar la vista oral. La Fiscalía, por contra, rebaja los hechos a una falta contra el orden público y la pena a 20 días de multa. La pareja y los otros tres acusados han sido los primeros en declarar. Les seguirán agentes antidisturbios de los Mossos d'Esquadra y otros testigos.
El desahucio, ordenado por el titular del juzgado de instrucción 37 de Barcelona, es de los más violentos que se recuerdan en Barcelona. Agentes de antidisturbios de los Mossos d'Esquadra dispersaron la concentración frente al portal de Verónica y Eliseo y entraron en su casa a través de un balcón trasero, subiendo por una escalera que plantaron. Según ha declarado el jefe del operativo de los Mossos, se tomó esa decisión por insistencia del propietario, que pidió el desahucio porque quería subir a la pareja el alquiler al terminar su contrato de renta antigua.
“Tenía el niño en casa porqué no sabía que vendrían a desahuciarme. Lloré. Ya no podía más”, ha explicado entre sollozos, Verónica L. La mujer ha afirmado que no pudo coger nada de su casa porque los Mossos paseaban por el hogar. “No pensaba que me destrozarían las fotos”, ha relatado.
Uno de los antidisturbios que ha declarado ha contradicho el relato de hechos de la Generalitat, y ha asegurado que Verónica no intentó impedir que los agentes accedieran a su vivienda a través de la escalera. “La cogí y la aguanté porque se caía”, ha dicho el agente, que ha dado cuenta del estado de nerviosismo de la mujer en aquel momento. Un sargento sí ha dicho recordar que vio a “una mujer de color” mover la escalera policial. El abogado de la Generalitat no ha preguntado a los agentes, algo inusual.
Por su lado, Eliseo L., ha declarado que un agente antidisturbios le dio un puñetazo y que otros mossos le pusieron contra la pared. “Me pegaron, me pusieron esposas y me llevaron a una habitación donde me encerraron 25 minutos”, ha dicho. “Yo no pegué al mosso, fue él quien me pegó”, ha alegado. La versión de los mossos es opuesta: han asegurado que el hombre llegó a poner en vertical la escalera y que cogió por el chaleco y golpeó a un agente. Los vídeos, fotografías y declaraciones de testigos que se mostrarán mañana deben permitir a la jueza ver quién tiene razón.
Asimismo, ninguno de los antidisturbios ha dicho recordar la presencia del hijo de la pareja en la casa durante el desahucio. Respecto a los otros tres acusados, uno de ellos ha negado toda participación en los hechos porque el día del desahucio, según ha dicho, no estaba en Barcelona. Los otros dos acusados han relatado una actuación policial desproporcionada contra las personas que intentaban parar el desahucio.
“Vinieron a pegar a saco, de mala hostia y con malas formas”. Así ha definido la actuación policial uno de los acusados, un vecino del barrio de el Clot que ha asegurado que se fue del lugar de los hechos en cuanto se le pidió la policía. La Generalitat pide para él cuatro años de prisión por un presunto delito de atentado contra la autoridad y desórdenes públicos. La Fiscalía rebaja la pena a dos años.
El último de los acusados, un jubilado para el que la Generalitat pide cuatro años de prisión, ha explicado que se acercó al desahucio porque vio “mucho follón” mientras regresaba del parque con su nieta. “La policía empieza a pegar puñetazos, patadas y rodillazos”, ha declarado. En un vídeo que ha difundido La Directa, se observa que un agente de los antidisturbios, incumpliendo todos los protocolos, le golpea en la cabeza con la porra.
La versión de los Mossos es diferente a lo que se muestra en el vídeo: han asegurado que el jubilado empujó y golpeó a un antidisturbios, y que debido a que el agente cayó al suelo el golpe de porra inicialmente dirigido a las piernas se desvió hacia la cabeza . Este jueves el “juicio a la solidaridad”, tal y como lo han llamado los acusados, quedará visto para sentencia.