El 'Grupo Lobo Euskadi' reúne en dos días 4.000 firmas en defensa de esta especie
Segundo intento de Grupo Lobo Euskadi para conseguir que el Gobierno vasco incluya a esa especie en el catálogo vasco de especies amenazadas. En enero registraron en el Gobierno Vasco una solicitud para la inclusión del lobo en el Catálogo Vasco de Especies Amenazadas. De momento no han obtenido respuesta a cerca de esa petición que estaba apoyada por veinticinco organizaciones de ámbito ambiental.
En vista del nulo movimiento por parte del Ejecutivo de Iñigo Urkullu, Grupo Lobo Euskadi pretende que el Gobierno vasco se sienta presionado cuando la propia ciudadanía sea quien le exija una defensa inequívoca de la especie. Han iniciado una campaña de recogida de firmas en la plataforma Change.org y en apenas 48 horas han reunido más de 4.000 apoyos a su causa. “Lo cierto es que nosotros ya percibíamos el asombro de la gente al conocer que el lobo no era una especie catalogada, sí protegida pero no catalogada. Y cuando lo comentamos no entienden las reticencias de las Administraciones”, relata Andrés Illana.
La única notificación que recibieron del Gobierno es que lo conveniente era esperar al censo sobre el lobo pendiente de publicar en junio. Tres meses después y habiéndose conocido a través de ese estudio que en Euskadi queda tan solo un grupo reproductor frente a los cuatro que existían en el 2003, no se ha producido ningún pronunciamiento por parte del Ejecutivo. “Se ha desentendido y estos datos avalan nuestros argumentos. No importa el número de individuos sino el grupo reproductor. Pueden que haya siete ejemplares y solo una loba entre ellos que va a garantizar su continuidad”, asegura Illana.
Estudiar cómo minimizar los ataques al ganado
Con las firmas persiguen forzar y lograr un posicionamiento sincero por parte de las tres administraciones competentes en esta materia, la flota y fauna- las Diputaciones- y por parte del Gobierno. “Se tiene que retratar de una vez y que toda la ciudadanía conozca cuáles son sus verdaderas intenciones y políticas medioambientales. Si quieren expulsar definitivamente al lobo, que lo hagan y no se escondan. Aunque para eso deberán cambiar la Ley, porque la están incumpliendo. Ellos saben que con la normativa en la mano no existe ni un solo argumento ni informe técnico que justifique la ausencia del lobo en ese catálogo de especies amenazadas”, insiste Illana.
En ese registro están englobadas, a juicio del activista de Grupo Lobo Euskadi, otras especies vulnerables “pero que no los son más que el lobo”. De continuar con la gestión actual que se aplica en Euskadi hacia este animal, Illana considera que será irreversible su situación. “Será imposible su recuperación en el País Vasco. Debemos empezar por otorgarle ese reconocimiento y las medidas que conlleva. Y a partir de ahí, por supuesto, estudiar también cómo minimizar los ataques al ganado”.
La supervivencia de este depredador pasa por relacionarse con otras poblaciones de lobos y el corredor ecológico hacia tierras como las francesas donde podría encontrarse con otras comunidades resulta infranqueable a su paso por Euskadi según relata Illana. “Animal que ven animal que se cargan”.
Entre otra acciones no descartan organizar una jornadas informativas sobre el lobo en Euskadi e invitar a las mismas a los nuevos responsables del área de las Diputaciones forales.
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