El Ayuntamiento da por acabada la cesión de la Casa de Cultura de Chamberí pese a que el proceso judicial está aún abierto

El Ayuntamiento de Madrid no espera a los tribunales para anunciar el fin de la cesión de la Casa de Cultura de Chamberí. Su portavoz, Inmaculada Sanz, ha asegurado que el juez desestimó el día 22 las medidas cautelares que solicitaron los vecinos esta semana, según ha explicado en rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.

“El Ayuntamiento de Madrid va a adoptar las medidas oportunas para recuperar ese bien”, ha asegurado Sanz en una escueta respuesta a una pregunta sobre este espacio vecinal, que se había negado a entregar las llaves este miércoles, cuando vencían los cuatro años de cesión. Las 24 asociaciones vecinales que conformaban el proyecto habían puesto en manos del juez una prórroga que les había negado el concejal de distrito.

Las asociaciones que componen la Casa de Cultura, sin embargo, niegan que el proceso judicial haya acabado y piensan que el consistorio está interpretando de forma incorrecta los tiempos de los tribunales. “No entendemos que el Ayuntamiento de Madrid no espera a la resolución de las medidas cautelares y anuncie una decisión que todavía no se ha producido”, explican sus portavoces.

El pasado, 22 de marzo, el juez denegó las medidas “cautelarísimas”, que no se habían solicitado, pero todavía tiene que otmar una decisión sobre las medidas “cautelares” que sí que había solicitado la Casa de Cultura, para las que el Ayuntamiento tiene un plazo de tres días de alegaciones, a partir de las cuales el juez emitirá una resolución que sí que podría resultar definitiva, , según indica el documento oficial al que ha tenido acceso Somos Chamberí, remitido por el abogado de la Casa de Cultura. Por ello, las asociaciones reiteran que no pueden entregar las llaves hasta que se resuelva esta pieza judicial.

Una prórroga en los juzgados

En un comunicado adelantado por este periódico el pasado martes, los colectivos presentes en la casa consideraban que la prórroga ha sido “indebidamente denegada” y por ello ha iniciado una demanda en los juzgados de lo contencioso-administrativo contra la Junta de Chamberí, que hace un mes ordenó revocar la cesión sin valorar la larga lista de actividades celebradas en su interior y sin explicar para qué destino necesita recuperar este espacio municipal, algo que sigue sin conocerse a día de hoy.

La Casa de Cultura defiende su “labor social” durante el periodo de cesión y su atención en los últimos meses a personas en riesgo de exclusión social. Sus portavoces creen que es “inentendible” que en este contexto de “emergencia sanitaria” el gobierno de Almeida no valore sus aportaciones y apuesten por el desalojo. También pedían al concejal de Chamberí, Javier Ramírez (PP) que “escuche al barrio y el mensaje enviado por la masiva manifestación del pasado domingo”. Hace dos días, cientos de personas participaron en una manifestación que pidió la continuidad de la casa por las calles del distrito.

Entre los proyectos que corren peligro de quedarse huérfanos de espacio, el que más preocupa es la Despensa Solidaria de Chamberí. Cada dos semanas reparte alimentos y productos de higiene a decenas de familias del distrito. Sus miembros usaban la Casa de Cultura como almacén y centro de distribución. Ahora su futuro pende de un hilo: el Ayuntamiento no les ha facilitado otro espacio en el que desarrollar su labor, pese a las cerca de 20.000 personas que firmaron en su defensa.