Bancos rusos podrían prestar hasta 40 millones de euros al Frente Nacional francés

Mediapart asegura en su edición de este jueves que el Front National ha pedido a distintos bancos rusos 40 millones de euros para financiar sus próximas campañas electorales, y en primer lugar, las regionales que tendrán lugar dentro de cuatro meses. Coincidiendo con otras fuentes, el diario digital francés de izquierdas afirma que un “primer plazo” de ese total ya ha sido concedido por First Czech Bank, un banco fundado en la República Checa, pero que actualmente tiene su sede en Moscú. “Hemos recibido 9 millones, faltan 31 más”, declara un miembro anónimo de la oficina política del FN a Mediapart, que añade que la asociación Cotelec –abreviatura de cotización electoral y vinculada al partido– de Jean Marie Le Pen, padre de Marine y expresidente y fundador del Frente Nacional, ha obtenido otros dos préstamos de entidades financieras rusas.

El diario opina que “esa financiación despierta recelos por la injerencia de un estado extranjero en la política francesa. Y recuerda que en una entrevista publicada por Le Monde el pasado 23 de octubre, Marine Le Pen, la presidenta del Front National, declaró que su partido había solicitado préstamos a todos los bancos franceses, pero que ninguno se lo había concedido. ”Así que recurrimos a varias entidades en el extranjero, de Estados Unidos, de España y, sí, de Rusia“.

Mediapart cita asimismo al diario ruso Kommersant, según el cual “esas operaciones no se han podido llevar a cabo sin el aval de las autoridades rusas”. El diario francés cree que esas concesiones son fruto de un acercamiento político a Rusia que Marine Le Pen inició en 2011, nada más suceder a su padre a la cabeza del Frente Natconal, cuando aseguró “admirar” a Vladímir Putin. Marine Le Pen, dice el diario, ha efectuado dos visitas reconocidas a Rusia y posiblemente una tercera, en la que se habría entrevistado con Vladímir Putin.

En el curso del segundo de esos viajes, la presidenta del Front National declaró lo siguiente: “Creo que tenemos intereses estratégicos comunes y también valores comunes. Opino que la Unión Europea está llevando a cabo una guerra fría contra Rusia. Rusia es presentada con rasgos diabólicos, como una especie de dictadura, como un país totalmente cerrado: esto no es objetivamente real. Yo me siento más conectada con su modelo de patriotismo económico que con el modelo de la Unión Europea”. Cuyo abandono por parte de Francia figura, por cierto, en el programa oficial del Front National.